En base a una reciente publicación oficial, el gobierno de los EE.UU. ha autorizado la potencial venta de munición de 120 mm destinada a los tanques Merkava de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), en lo que sería una adquisición que requeriría una inversión de 774,1 millones de dólares. Así fue comunicado por el Departamento de Estado al Congreso de EE.UU. en el día de ayer, 13 de agosto.
Conforme a la mencionada autorización publicada por la Agencia de Cooperación en Defensa y Seguridad (DSCA), las FDI han solicitado un paquete que incluye un total de 32.739 proyectiles de 120 mm, tanto en sus variantes HEMP-T (antitanque de alto explosivo multiusos con trazador) M1147 y MPAT M830A1. A su vez, la adquisición comprendería documentación técnica, soporte logístico y transporte para el material en cuestión. En términos de plazos de entrega, las mismas deberían iniciar en el curso del año 2027.
Acorde a lo manifestado por la DSCA: “Estados Unidos está comprometido con la seguridad de Israel y es vital para sus intereses nacionales ayudar a Israel a desarrollar y mantener una capacidad de autodefensa fuerte y preparada. La venta propuesta es coherente con esos objetivos. La venta propuesta mejorará la capacidad de Israel para hacer frente a las amenazas enemigas actuales y futuras, fortalecerá su defensa interna y servirá como elemento disuasorio frente a las amenazas regionales. Israel no tendrá dificultades para incorporar estos artículos y servicios a sus fuerzas armadas.“
Respecto de los contratistas principales involucrados en la operación, se trata de la empresa General Dynamics Ordnance and Tactical Systems y de Northrop Grumman Defense Systems, con sedes en los estados de Florida y Virginia respectivamente. Cabe aclarar que ninguna de las dos empresas, ni el gobierno de los EE.UU., deberán poner a disposición representantes para facilitar la formación de los efectivos israelíes.
Finalmente, ha de recordarse que la compra se enmarcaría en un contexto de alza de tensiones en Medio Oriente, considerando que Israel no sólo se halla lidiando con la guerra contra el grupo terrorista Hamás en Gaza, sino que también prevee un inminente crecimiento de los roces con aquel país que lo financia: Irán. En ese sentido, tanto el gobierno israelí como el estadounidense han acordado aumentar la presencia del segundo en la región para disuadir a la República Islamica de intentar un nuevo ataque, principalmente con el despliegue de un grupo de portaaviones, un submarino de misiles de crucero y avanzados cazas furtivos F-22. Sumado a ello, debe considerarse que también se ha avanzado con la compra de nuevo equipamiento por parte de Israel, siendo ejemplo de ello no solo la potencial compra de las municiones mencionadas, sino también aquella de 50 cazas F-15IA por US$ 18.000 millones.
*Imagenes utilizadas a modo ilustrativo
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