Durante el pasado fin de semana, las redes sociales se viralizaron con imágenes y videos que mostraban a las autoridades chinas combatiendo un importante incendio en el crucero portaaviones Minsk. Este buque, perteneciente a la clase Kiev, y que sirvió en la Armada de la Unión Soviética, se encuentra actualmente fondeado en un lago artificial en los márgenes del río Yangtsé en China, tras un largo periplo desde que fue dado de baja en 1993 por la Armada Rusa.

El Minsk es el segundo de un total de cuatro cruceros portaaviones construidos entre los años 1970 y 1987 para la Armada de la Unión Soviética. Con un desplazamiento de 45 mil toneladas a plena carga, el buque fue una de las plataformas de proyección estratégica más potentes e importantes de la Armada Roja durante sus años de servicio. Equipados con un armamento propio de destructores de misiles, estos cruceros también contaban con la capacidad de desplegar aeronaves de despegue y aterrizaje vertical Yak-38 y helicópteros embarcados.

El Minsk fue comisionado en 1978 y sirvió hasta el colapso de la Unión Soviética, momento en que pasó a formar parte de la recién resurgida Armada Rusa hasta 1993, cuando se decidió su baja. Entre las razones esgrimidas para su retiro se menciona un accidente que requería reparaciones en astilleros ubicados en Ucrania, lo cual resultó imposible para Rusia en ese momento.

La decisión del gobierno ruso fue vender el buque a una empresa surcoreana para ser desguazado y vendido como chatarra, al igual que el buque Novorossiysk. Sin embargo, la presión de grupos ambientalistas locales llevó a que su destino fuera otro: el buque fue vendido a una empresa china que lo trasladó al Gigante Asiático para convertirlo en un parque temático denominado “Minsk World”, el cual abrió sus puertas en el año 2000.

Fotografía de dominio público

Sin embargo, el periplo del crucero portaaviones no terminó ahí, ya que la empresa que lo había comprado entró en quiebra en 2006, y el Minsk fue relocalizado a su posición actual, a 50 millas al noroeste de la ciudad de Shanghái, en una laguna artificial creada para lo que parece ser su última morada. Desde entonces, surgieron diversos proyectos para recuperar el buque y reinaugurarlo como parque temático, pero dichos intentos nunca dieron frutos, quedando como una atracción para exploradores urbanos.

En cuanto a la actualidad, y según lo reportado por fuentes locales y otras que se viralizaron en redes sociales chinas, se confirmó un importante incendio en el Minsk que se habría iniciado a las 04:00 PM hora local por causas aún no esclarecidas. Siguiendo las imágenes viralizadas, el foco del fuego se centralizó en la isla del buque, donde se alojaban el puente de mando y diversos sensores cuando estaba en servicio.

Los últimos reportes emanados por las autoridades chinas indican que el incendio fue controlado, pero la isla del crucero portaaviones Minsk quedó completamente destruida en el proceso. Aunque no se brindaron mayores novedades, este podría ser posiblemente el final de la trágica historia de este buque, que fue orgullo de una de las armadas más poderosas del mundo en su época. Más allá de los planes de recuperación con fines recreativos, es altamente dudoso que empresas busquen poner en condiciones las instalaciones del buque para estos fines después de un incendio tan catastrófico.

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