Desde mediados de septiembre, en el marco del Ejercicio Multinacional Tobruq Arrows 2024, las Fuerzas Armadas de Eslovaquia, República Checa y Letonia desplegaron sus capacidades de defensa aérea para hacer frente a drones de combate, de vigilancia y/o aviones y misiles de crucero enemigos. El entrenamiento se realizo con el lanzamiento de munición de guerra, incluyendo actividades de tiro diurno y nocturno.
La misión principal derivo del Batallón de Defensa Antiaérea contra Misiles consistiendo en la proporción de apoyo directo a unidades terrestres contra amenazas aéreas. Las unidades de defensa antiaérea se desplegaron en tres posiciones de tiro enfrentando aviones, misiles y drones en virtud del ejercicio táctico Tobruq Arrows 2024. La actividad permitió verificar el flujo de datos y el sistema de mando y control desde el batallón a puestos de mando de las unidades hasta los elementos de fuego individuales.
Cada tripulación de defensa antiaérea practicó el trasporte aéreo de sus sistemas en helicópteros Mil Mi-17 de la Fuerza Aérea de República Checa y, además, la tripulación eslovaca entrenó con sus MANPADS IGLA en un ejercicio de fuego real. Mientras los operadores de sistemas de defensa aérea checos y letones utilizaron sistemas Saab RBS-70 y RBS-70NG para atacar un vehículo aéreo no tripulado que remolcaba una manga de objetivo.
El Torbruq Arrows culminó con demostraciones de ejercicios de fuego real exponiendo a los operadores a desafiantes tareas. Según un comunicado de la OTAN, se sostuvo la necesidad de verificar la preparación real del personal y sus capacidades para enfrentarse a los objetivos. Las situaciones de estrés que se relacionan con el lanzamiento de un misil y tareas de tiro pueden crearse en un entorno real, más allá de las prácticas en un entorno de entrenamiento simulado, comento el teniente coronel Řezníček. También sostuvo que “nos entrenamos cada vez más a menudo con unidades de helicópteros, porque la movilidad resulta ser clave en los conflictos contemporáneos. Los sistemas de misiles de defensa antiaérea que utilizamos en este ejercicio pueden desplegarse con rapidez y eficacia incluso en terrenos escarpados, atacar a los medios del adversario y luego reubicarse rápidamente”.
El ejercicio combinado Tobruq Arrows 2024 representó una vez más la cooperación internacional entre Aliados de la OTAN, reconociendo la oportunidad que envisten las fuerzas eslovacas de crear y entrenar una unidad combinada checo-letona mejorando la preparación de defensa del espacio aéreo.
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