Este miércoles, los astilleros Babcock en sus instalaciones de Rosyth, Escocia, anunciaron que han comenzado con la construcción de la tercera de las cinco fragatas Tipo 31 para la Real Armada Británica. Con el ceremonial corte de la primera plancha de acero del HMS Formidable, denominación oficial del buque, la compañía dio inicio al programa de construcción del buque, tan sólo 20 meses después de la ceremonia de corte de acero del segundo buque, el HMS Active.
Cabe destacar que de un total de cinco fragatas Tipo 31, la primera de ellas (HMS Venturer) ya está a punto de completarse estructuralmente, mientras que la construcción de la segunda fragata (HMS Active) comenzó en enero del 2023. Se espera que estas nuevas fragatas cuenten con un desplazamiento de aproximadamente 6.000 toneladas, con un largo de 138,7 metros y una amplia gama de armamento a bordo.
En consonancia, estas fragatas serán más “largas y más grandes que sus predecesores, equipados con cañones Bofors de 57 mm y dos de 40 mm, el sistema de defensa aérea Sea Ceptor, un radar 4D, una gran plataforma de vuelo y hangar, y bahías de misión para acomodar equipos, como buceo, kit de caza de minas, drones o suministros de socorro en casos de desastre, para realizar una variedad de misiones: operaciones de seguridad marítima, ayuda humanitaria, defensa aérea, apoyo con disparos, abordaje y búsqueda”; según un comunicado oficial de la Armada.
Con respecto al HMS Formidable, el tercero de estos buques en iniciar a construirse, el Ministro de las Fuerzas Armadas, Luke Pollard, declaró que se trata de un “hito significativo” en medio de “la misión del gobierno de hacer crecer la economía” y respaldar empleos. Esto se debe a que el programa de defensa de la Royal Navy en la construcción de las fragatas Tipo 31, motiva la creación de nuevos puestos de trabajo durante la vida útil del proyecto.
“Estas fragatas desempeñarán un papel significativo en la protección del Reino Unido y en el apoyo a las operaciones internacionales de defensa asociadas. Este programa es una verdadera demostración de la capacidad de construcción naval soberana del Reino Unido y está teniendo un impacto económico positivo en Escocia y en las comunidades de todo el Reino Unido”, puntualizó el funcionario de Babcock, David Lockwood.
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