Iniciada durante a finales del pasado año 2023, Lockheed Martin continúa avanzando en la fabricación de los primeros cazas furtivos F-35A destinados equipar a la Fuerza Aérea de Finlandia. El hito fue conmemorado en el marco de una visita oficial de funcionarios finlandeses a la planta de producción de aeronaves de quinta generación que la empresa estadounidense posee en Fort Worth, Texas.
A los fines de avanzar en el futuro reemplazo de sus actuales cazas F/A-18 Hornet, el gobierno de Finlandia confirmó a finales de 2021 la selección del F-35A estadounidense como futuro avión de combate furtivo. Enmarcado dentro del Programa HX, la Fuerza Aérea del país escandinavo se equipará en el transcurso del próximo año con un total de 64 nuevos cazas furtivos de quinta generación. Además, la adquisición comprende la también la compra equipamiento, armamento y el desarrollo de capacidades industriales locales para sumar al país a la cadena global de fabricación de la aeronave.
En el marco de la reciente visita de funcionarios del Ministerio de Defensa y mandos militares de Finlandia a Fort Worth, estos constaron los avances en la fabricación del primero de los 64 ejemplares. Denominado como provisionalmente como “JF-501”, este será el primer F-35A en ser entregado a la Fuerza Aérea Finlandesa durante el otoño de próximo año 2025.
Este hito fue sintetizado con la firma en la una de las secciones frontales del fuselaje del avión, la cual llevó la rubrica del personal involucrado en la fabricación del F-35, como de los funcionarios civiles y militares finlandeses que forman parte del programa de incorporación de la nueva plataforma.
A su vez, desde la cartera de defensa informaron algunos detalles adicionales sobre los avances en la fabricación de las aeronaves, indicando que estan serán provistas en la configuración TR-3, incluidas en los lotes de producción 17-22. De cara la adopción de los nuevos aviones se ha estipulado que los primeros ocho ejemplares permanezcan en Estados Unidos a fin de formar y entrenar a las primeras camadas de pilotos y personal técnico de apoyo, teniendo como epicentro a la Base Aérea Ebbing de la Guardia Nacional ubicada en el Estado de Arkansas.
Por último, y de cara a la transferencia de capacidades industriales, estas serán llevadas adelante por la empresa Patria, la cual, junto a firmas locales asociadas, se sumarán a la cadena global de producción de componentes para el F-35, comprendiendo la fabricación de fuselajes delanteros y subcomponentes en las nuevas instalaciones de Jämsä Halli.
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