El conflicto en Ucrania ha impuesto a las Fuerzas Armadas Rusas y a su complejo industrial valiosas lecciones en términos de equipamiento básico o mandatorio para sus vehículos blindados de combate, transporte y artillería. Una muestra de ello se puede apreciar en las diversas entregas de equipamiento a las Fuerzas Terrestres, los cuales son dotados de sistemas de protección adicionales, como jaulas antidrones, mayor blindaje y nuevos sistemas de camuflaje óptico. El más reciente caso es el de los lanzallamas pesados TOS-2 Tosochka, los cuales han comenzado a ser equipados con nuevos kits de camuflaje absorbente de ondas de radio.

Diseñado como una evolución de los veteranos TOS-1 Buratino y TOS-1A Solntsepek, el TOS-2 Tosochka es un nuevo sistema de lanzallamas pesados en servicio con los regimientos RKhBZ (QBN) de las Fuerzas Terrestres Rusas. La principal diferencia con sus antecesores es que el sistema de lanzamiento de cohetes no guiados y guiados esta montado en el chasis de un camión Ural-63704-0010 6×6 a los fines de brindarle mayor movilidad y flexibilidad. A su vez, esta emplea cohetes de 220mm que el Buratino y Solntsepek, en una lanzadera de 18 celdas.

La primera aparición del Tosochka tuvo lugar durante el año 2020, con motivo del Desfile por el Día de la Victoria, registrándose su empleo operacional en Ucrania durante el mes de octubre del año 2023.

Con estos antecedentes, y viendo su despliegue en suelo ucraniano, es presumible que las Fuerzas Terrestres elevaran requerimiento a fines de mejorar la protección y reducir la firma del vehículo. Esto último le fue encomendado al holding “Roselectronika” de la Corporación Estatal Rostec, la cual desarrollo nuevo kits de camuflaje para el TOS-2.

Siguiendo el comunicado oficial del consorcio ruso, estos kits estan dotados de un “…revestimiento permite ocultar el equipo del reconocimiento en los rangos óptico e infrarrojo cercano, así como de la orientación de armas de alta precisión”. Añadiendo que: “La base del nuevo camuflaje consiste en un tejido especial que absorbe radiación y paneles con material de camuflaje, que se fijan a la coraza sin impedir el movimiento. Esto permite ocultar el armamento no solo mientras está en posición, sino también en marcha y durante su aplicación en combate”.

Actualmente, el conflicto ucraniano es la muestra de una guerra de alta intensidad donde ambos bandos tiene a su disposición multiplicidad de sistemas de vigilancia, detección y reconocimiento. Estos pueden ir desde los conocidos radares de contra batería, hasta sistema aéreos no tripulados equipados con radares terrestres para la detección de unidades de infantería y blindadas. Además, deben sumar la gran variedad de armamento guiado, tanto por láser, sistemas ópticos infrarrojos y por ondas de radiación, que se fijan sobre determinados blancos.

Por último, y en vista del despliegue operacional de los TOS-2 equipados con los nuevos kits de camuflaje, desde Rostec han destacado algunas de las características adicionales, como la confirmación que estan siendo empleados en Ucrania. Al respecto, fue indicado desde Roselectronika que: “La estructura del revestimiento permite lavar con agua la tierra y el polvo que se acumulan en su superficie durante el uso. Gracias a esto, el camuflaje para equipo militar puede usarse de forma continua. Los primeros kits ya se están utilizando en la zona de la operación militar especial, donde han demostrado su efectividad”.

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