Durante un encuentro entre realizado entre el Comandante de la Fuerza Aérea Brasileña, Brigadier Aéreo Marcelo Kanitz Damasceno, y su contraparte de la Fuerza Aérea de Suecia, General de División Jonas Wikman, los titulares de ambas fuerzas destacaron los avances en materia de cooperación aeronáutica, sumado a futuros planes que permitirán avanzar diversos proyectos de modernización e incorporación de nuevas capacidades para ambos países.
Respecto a la Fuerza Aérea Brasileña, su titular, Brigadier Aéreo Damasceno destacó el programa de incorporación de cazas SAAB Gripen F-39E/F, que se encuentra en proceso de entrega, frente a lo cual manifestó la intención de incrementar en un 25% el contrato actual. Por otra parte, recalcó la urgente necesidad de ampliar la flota de aviones de combate de la FAB, teniendo en cuenta las dimensiones continentales de Brasil y los desafíos planteados por la inestabilidad en el escenario internacional.
Cabe destacar que además de los nuevos Gripen F-39E, que recientemente participaron en el CRUZEX 2024 -siendo esta su primera participación en una ejercicio internacional –, la FAB también opera aviones de ataque AMX A-1 (de los cuales es actualmente la única operadora a nivel mundial tras la baja de sus pares italianos) y cazas F-5EM/FM Tiger, que, a pesar de su modernización, también deberán ser reemplazados a mediano plazo.
Por otra parte, en marco de los acuerdos entre ambos países, el titular de la Fuerza Aérea Sueca, manifestó la posibilidad de reequipar el ala de transporte con aviones Embraer KC-390 Millennium, construidos en Brasil. De acuerdo al comunicado oficial, General de División Jonas Wikman destacó las cualidades de la aeronave brasileña, como su versatilidad, capacidad operativa, logística y tecnológica, afirmando que “La profesionalidad, operatividad y actitud demostradas por los pilotos y técnicos brasileños implicados en el despliegue de la aeronave son admirables”
Resulta oportuno mencionar que los planes de adquirir nueve Saab Gripen adicionales pueden ser vistos como una forma de negociación entre el Ministerio de Defensa, Saab y la propia FAB, a pesar de los ajustes en los cronogramas de entrega. No obstante, la FAB finalmente incorporará más unidades del caza Gripen, aunque en un número mayor al anunciado en 2022 durante la administración del presidente Jair Bolsonaro, cuando fue confirmado que el gobierno había aprobado la adquisición de cuatro nuevos aviones para alcanzar una flota de 40 aeronaves de combate.
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