Conforme a los datos revelados en la Síntesis Ejecutiva correspondiente al tercer trimestre del 2024, la Fuerza Aérea Argentina acumuló 21.678 horas de vuelo al 30 de septiembre, cifra que representa un descenso en la actividad para el mismo período del 2023. El año pasado se registraron 22.807 horas de vuelo, marcando una diferencia de más de 1.000 horas entre ambos años.
De los datos que se desprenden del documento respecto al Alistamiento y Sostenimiento Operacional de las Fuerzas Armadas, también se aprecia que el crédito vigente para el Estado Mayor General de la Fuerza Aérea al 30 de septiembre del año en curso fue de $ 251.742,9 millones de pesos, de los cuales se devengaron $ 171.455,6 millones a la fecha mencionada. Esto representa un 68,1% ejecutado.
Si se coteja con el 2023, el porcentaje ejecutado es casi similar, con un 65,7%. Donde si se aprecia una diferencia notoria es en el crédito vigente, el cual fue de $ 85.153,3 millones por aquel entonces. Esto obedece a los vaivenes de la moneda local y como debió suplirse este problema para atender requerimientos de una institución que en muchos casos deben adquirirse con divisas extranjeras.
En lo que refiere a la diferencia de horas de vuelo entre los períodos 2023 y 2024, la misma podría justificarse por la baja disponibilidad de algunas aeronaves, situación que afectó a las flotas de A-4Ar Fightinghawk y C/KC-130H Hércules, por ejemplo. En el caso de los cazabombarderos con asiento en la V Brigada Aérea, su actividad de vuelo se paralizó luego del accidente que tuvo lugar en el mes de julio, lamentable suceso en el cual falleció el Capitán Mauro Testa La Rosa. Desde entonces, los Fightinghawk no han vuelto a volar, situación que por el momento no ha sido aclarada ni definida oficialmente por la Fuerza Aérea.
Por su parte, la flota de C/KC-130H Hércules ha sufrido a lo largo del 2024 el desgaste y los problemas para sostener su calendario de inspecciones. Para darse una idea de la situación, actualmente se encuentran tres ejemplares en la Fábrica Argentina de Aviones “Brigadier San Martín” a la espera de trabajos de mantenimiento (por finalizar o por iniciar), mientras que las unidades remanentes han tenido que lidiar con novedades que afectaron y afectan su disponibilidad.
Pese a que el último trimestre tuvo actividad de relevancia, como fue el caso del ejercicio Pre-CRUZEX y el despliegue a la Base Aérea de Natal de la Fuerza Aérea Brasileña para participar del CRUZEX 2024, las operaciones suele disminuir considerablemente en el mes de diciembre. Razón por la cual es poco probable que la Fuerza Aérea logre alcanzar el Plan de Actividad Aérea previsto para el año en curso, el cual se estableció en 37.600 horas de vuelo.
Sin mayor información oficial respecto a los factores que han incidido en la actividad operacional de la Fuerza Aérea, habrá que esperar hasta la publicación de la Cuenta de Inversión 2024 para contar con algunos detalles generales que hayan afectado en la sumatoria de horas de vuelo así como a la disponibilidad de aeronaves.
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