El pasado sábado 14 de diciembre, un submarino nuclear de la Marina Nacional francesa disparó a una antigua corbeta modelo A69 “PM L’Her” ya retirada del servicio, esto haciendo uso de uno de sus nuevos torpedos F21 para testear sus capacidades contra un objetivo real. Según se informa desde el Ministerio de Defensa de Francia, el buque fue hundido sin mayores dificultades, quedando sus restos a varios miles de metros de profundidad donde no representarían peligros para el transito naval.

Sobre las pruebas el almirante Nicolas Vaujour, Jefe del Estado Mayor de la Marina francesa, afirmaba que: “En el marco de un ensayo de tiro, uno de nuestros submarinos de ataque nuclear disparó un torpedo de combate contra el casco. El tiro fue un éxito, lo que demuestra el alto nivel de preparación de la Armada, en un contexto de crecientes conflictos y complejas operaciones aeromarítimas. El objetivo principal: elevar el nivel de entrenamiento y reforzar los conocimientos de la tripulación. El tiro se llevó a cabo en las condiciones más realistas posibles, con escenarios adaptados a las nuevas amenazas. El casco, que había sido completamente limpiado y asegurado, se hundió a una profundidad de más de 4.000 metros. No representa ningún peligro, ni para el medio ambiente ni para las actividades marítimas.”

Ha de destacarse, que esta ocasión fue la primera vez en la que uno de los modernos F21 es disparado con una ojiva activada contra un blanco real, lo que se constituye como un evento poco frecuente en general para la Marina Nacional. Acorde ha sido afirmado por uno de los portavoces de la institución, el último ejercicio de estas características se había realizado en el año 2004, con el hundimiento del LST Champlain en aguas cercanas a la isla de Martinica. La cuestión no resulta menor, en tanto da cuenta del avance de la nueva estrategia de ejercicios conocida en Francia como POLARIS, diseñada por el antecesor del almirante Vaujour (el almirante Vandier) a fines de fortalecer el adiestramiento de sus efectivos.

Ahondando en detalles, cabe recordar que estos nuevos torpedos F21 son producto del desarrollo del programa conocido como Artemis, considerado como uno de los principales armamentos de los que dispondrán las clases Rubis y Suffren de la Marina Nacional francesa. Sin que hayan sido brindados demasiados detalles en el comunicado, la fuerza recoge que se trata de un sistema que presenta mejoras en términos de sigilo, velocidad y rango de alcance en relación con los torpedos hasta ahora utilizados por sus buques; a saber, los F17 Mod. 2.

Por lo que sabemos, los nuevos F21 pesan apróximadamente unos 1.550 Kg, contenidos estos en un diámetro estándar OTAN (533 mm) y una longitud de 6 metros. En términos de velocidad, cada ejemplar es capaz de alcanzar marcas superiores a los 50 nudos gracias a su motor eléctrico accionado por una batería de óxido de plata y aluminio, siendo posible su uso contra objetivos situados hasta 50 kilómetros de distancia. Respecto de su funcionamiento, resulta útil mencionar que se trata de un torpedo que se guía por cable en la primera etapa de su trayectoria, mientras que posteriormente se vale de un sistema de localización acústica.

*Imagen de portada: Ministerio de Defensa francés

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