El Escuadrón de Campos de Prueba de la Real Fuerza Aérea Australiana ha identificado recientemente a los sistemas de drones de vigilancia como una de las principales herramientas para mejorar la seguridad de sus instalaciones. Esta iniciativa, en base a las experiencias en recientes conflictos, no solo apunta a crear la capacitación para lograr una capacidad de sistemas aéreos no tripulados segura, efectiva y creíble, sino que también permitirá la incorporación de nuevo material.
En lo que refiere a capacitación, el líder del escuadrón de vuelo de drones, Martin Young, identificó la Licencia de Piloto Remoto de Defensa (DRePL) existente como adecuada, la cual permite el vuelo nocturno, el vuelo más allá de la línea de visión (BVLOS) y el vuelo por encima de los 120 metros.
El siguiente paso fue identificar los modelos de drones que mejor se adaptaran a los requerimientos iniciales. Para ello, la iniciativa se apoyó en la industria privada y en la experiencia de otras unidades de la Fuerza de Defensa Australiana, identificándose a los drones Parrot ANAFI y al Skydio X10 como los sistemas ideales para el empleo básico. “…Ambas plataformas desarrolladas en EE.UU. han demostrado ser un importante facilitador de capacidades para los operadores…”.
Vale destacar que ambos modelos fueron puestos a prueba en los campos de batalla de Ucrania, recibiendo críticas de sus operadores atento las vulnerabilidades ante los sistemas de guerra electrónica rusos y sus capacidades limitadas para llevar diversas cargas. Los fabricantes de estos drones han reconocido los desafíos que se presentaron durante la experiencia ucraniana, por lo que ambos modelos han incorporado mejoras en base a las experiencias en combate.
Desde la Real Fuerza Aérea Australiana (RAAF) se apunta a que la progresión del programa estará direccionada a mejorar las habilidades para sistemas más grandes y nuevos, así como continuar desarrollando habilidades especializadas como el mapeo 3D y la detección de cambios. “…Existen oportunidades para diversificarse en drones de ala fija y también será un foco para el crecimiento continuo que permita una BVLOS extendida y la introducción de misiones autónomas…”, detalló en su gacetilla la RAAF.
La iniciativa ha comprendido cursos en la base RAAF de Edimburgo y en el campo de tiro de armas aéreas de Evans Head, y se prevé que se realicen más cursos en otros sitios. El Escuadrón de Campos de Prueba de la Real Fuerza Aérea Australiana (AFTRSQN) también está realizando más capacitación para proporcionar a los operadores de drones la competencia necesaria para realizar futuros cursos DRePL para la Fuerza Aérea.
Tras haber logrado una capacidad orgánica de formación, entrenamiento y sostenimiento en plazos acelerados, el Escuadrón continúa evolucionando y desarrollando TTP (tácticas, técnicas, procedimientos), y espera introducir pronto drones más grandes y capaces.
Desde la Real Fuerza Aérea Australiana apuestan a que el siguiente paso consolide la integración de tecnologías innovadoras y esfuerzos colaborativos. La llegada de herramientas impulsadas por IA como los drones ofrece un cambio de capacidades reactivas a proactivas que permiten a AFTRSQN seguir evolucionando antes de la lucha.
Imagen de portada ilustrativa. Créditos: RAAF
Te puede interesar: La Real Fuerza Aérea Australiana completó su flota de 72 cazas de quinta generación F-35A Lightning II