Primero hay que ver si los AR llegan...y en condiciones. Lo de los SUE es todavía mucho más lejano.
Como viene la mano, y salvo que alguien recapacite (tampoco dan los plazos en realidad), quien oficie de seguridad aérea probablemente no porte la escarapela nacional. Lo cual sería una vergüenza.
El problema es que la clase política no siente verguenza por eso. No les importa, es más, van a decir que se ahorran tomarse el trabajo de planificar y coordinar la seguridad de la Cumbre.