ÑANCU, pese a que los datos de ambos gráficos son correctos, presta a confusión que en un caso se trata de los presupuestos totales asignados a VENG y en el otro que subí de twiter está neteado el gasto específico y concreto de acceso al espacio. Que no son lo mismo, ello por la simple razón de que VENG tiene a su cargo muchas otras tareas diferentes al programa ISCUL.
Si queremos conocer cuánto se invirtió específicamente en el programa de acceso al espacio, que es de lo que se trata, corresponde distinguir el presupuesto destinado a las otras actividades.
Las propias notas de Latam Satelital Lo explican en otras notas y en la propia nota que usted sube así lo hace. Vale una simple comprobación: a 2017 sólo el 30% del personal de Veng estaba asignado al acceso al espacio. 135/450. La misma nota especifica que solo en SAOCOM tenía ocupado el 50% del personal. Y las erogaciones en personal consumían no menos del 80% del presupuesto.
Además del proyecto ISCUL, VENG también participa de la ingeniería, integración y ensayos de las misiones SAOCOM, así como también de la campaña de lanzamiento y la operación de los satélites. VENG también brinda servicios de segmento terreno a su accionista, incluyendo la instalación y puesta en marcha de la Estación Terrena de Tierra del Fuego y su futura operación.
Durante 2019 la empresa estatal VENG no realizará inversiones significativas y suspende la construcción del Centro Espacial Manuel Belgrano. Nueva orientación a la venta de imágenes y servicios. El personal de la empresa se redujo de 520 a 460 personas en un año. El Ministerio de Hacienda de la...
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Así, en una extrapolación rápida vemos que teniendo en cuenta esos parámetros, y que los gastos de capital fuera de los salarios referido al programa en específico, ha sido casi nulo, el gasto 2017 para acceso al espacio de 11 M U$S es el que resulta adecuado.
No el del total del presupuesto de VENG para ese año. Y expresamente se ha contado que en los últimos tiempos la actividad se redujo a tareas de ingeniería, con casi nula inversión en otros bienes, con la excepción de la impresora láser, algunos insumos para su instalación y funcionamiento más el mantenimiento y un muy lerdo proceso de puesta en operaciones de la maquinarias del CEPI (lerdo justamente por la restricción presupuestaria).
Y también, lo de los 20 años es un dato erróneo y utilizar una hipérbole de base falsa para imputar ineficacia. Los tiempos y los presupuestos también están contados por diferentes notas. Así, del link anterior:
VENG fue fundada en el año 1998
La empresa recién en el
año 2007 comenzó a tener
actividad efectiva y
el financiamiento para el proyecto ISCUL
se concreta con la transferencia en el año 2012 de la CONAE de la Cancillería Argentina al entonces Ministerio de Planificación Federal, Inversión y Servicios Públicos a cargo de Julio de Vido.
Lo que se condice con el flujo de fondos.
Los vehículos VEx-1A y VEx-1B fueron lanzados en el año 2014. 2017 Vex 5
Me parece que ni la inversión ni los tiempos sea algo desmedido tomando en cuenta que optando por combustibles líquidos se empezó de cero. Con más las inversiones en infraestructura y maquinaria. Pero entiendo que eso es muy opinable y seguramente podría haber sido mejor.
Saludos