PUERTO BELGRANO - El comandante de la Flota de la Armada de la República Oriental del Uruguay, contralmirante Manuel Burgos Lezama; y el de la Aviación Naval uruguaya, capitán de navío Juan Retamoso, visitaron durante dos días la Base Naval Puerto Belgrano y la Base Aeronaval Comandante Espora para oficializar el agradecimiento hacia la Armada Argentina por un gesto de colaboración.
“Hace un tiempo atrás tuvimos un importante accidente con un avión de nuestra Flota que sufrió grandes daños. Por un cuestión de capacidades no podía ser reparado en Uruguay y por eso se le encomendó el trabajo al Arsenal Aeronaval Comandante Espora (ARCE)”, explicó el contralmirante Burgos Lezama.
En Espora, los oficiales uruguayos recorrieron los hangares de las diferentes escuadrillas y fueron recibidos por cada uno de sus comandantes. El itinerario incluyó el Museo de la Aviación Naval y el Arsenal Naval Comandante Espora.
A la tarde llegaron hasta el edificio del comando de la Aviación Naval, en Puerto Belgrano, donde fueron recibidos por su comandante, contralmirante Rafael Cornejo Solá.
“La amistad entre la Aviación Naval de Uruguay y la de Argentina data de muchos años. Hemos tenido intercambio de oficiales en capacitaciones y se han formado pilotos uruguayos en este país. Estamos acá para afianzar aún más ese lazo”, expresó el contralmirante Manuel Burgos Lezama durante el encuentro.
Explicó que la aeronave reparada es un Beechcraft B200 que la Armada uruguaya utiliza como medio de patrulla marítima para búsqueda y rescate y se constituye en una unidad fundamental para el control de las aguas.
Teniendo en cuenta que el avión es el único de su tipo que posee la Armada del vecino país, durante el tiempo que demandó su arreglo, pilotos de esa fuerza pudieron entrenar y lograr recalificar en la Base Aeronaval Comandante Espora para no perder sus capacidades.
“Ese es el único avión de su tipo que tenemos, por eso todo el tiempo que estuvo sin volar nuestros pilotos habían perdido la calificación. Y por eso también recalificaron acá, con parte teórica y práctica de vuelo con instructores argentinos”, agregaron los oficiales.
“Hubo presencia de oficiales y técnicos de nuestra Armada durante la reparación del avión en el ARCE. Esa experiencia les sirvió como entrenamiento del trabajo, para aprender ciertas cuestiones gracias a la capacidad técnica de su arsenal, siendo todo doblemente provechoso. Nos sirve como un espejo para mirar cuales son las capacidades con las que se puede contar además e abrir puertas para futuras colaboraciones”, finalizó Manuel Burgos Lezama.