Entre 2003 y 2010, el país se benefició con programas de entrenamiento y tareas conjuntas en los que fueron capacitados 4.195 oficiales de las distintas fuerzas de seguridad.
A cambio, se compró armamento norteamericano por u$s292,7 millones, según cifras oficiales
El historial militar entre Argentina y los EEUU es medido desde 1950. El intercambio de dinero y personal especializado ha sido fluido, tanto bajo gobiernos de facto como en democracia, sin cambios drásticos. El avión cuya carga fue decomisada en Buenos Aires por las autoridades argentinas por material supuestamente no declarado formaba parte de los programas de entrenamiento que Washington pone a disposición de las fuerzas de seguridad y defensa en países aliados.
Argentina fue en 2009 el cuarto país de la región más ayudado en términos de entrenamiento de personal de seguridad detrás de Colombia, México y Perú, según datos oficiales analizados por organismos independientes.
La ONG norteamericana Just the Facts? se dedica a medir la asistencia para asuntos de defensa y seguridad de los EEUU hacia América Latina y el Caribe sobre la base de datos de la Secretaría de Estado que hoy preside Hillary Clinton.
La Asistencia Militar al Extranjero (IMET por sus siglas en inglés) se focaliza en programas para combatir el narcotráfico, el terrorismo y la protección de las fronteras. Según Just the Facts, la cooperación con Argentina es clave porque puede ser una "ruta hacia Europa y otros mercados de la cocaína producida en Bolivia". Además, el país se transformó en "tránsito para la efedrina con destino a México y los EEUU en 2008". El organismo extranjero considera que la venta ilegal de esta sustancia "sigue siendo un problema" a pesar de que el gobierno argentino prohibió su importación.
Efectivos de Gendarmería, la Policía y las Fuerzas Armadas participaron de los programas de capacitación. Esta cooperación no fue interrumpida por las administraciones kirchneristas, de 2003 a la fecha.
Según Just the Facts, durante ese período (2003 – 2010) la Argentina recibió u$s17 millones en asistencia militar de los EEUU y 4.195 miembros de las fuerzas de seguridad fueron entrenados. La contraprestación, pocas veces informada, fue la compra, durante los últimos siete años, de u$s292,7 millones de armamento norteamericano.
"Las ventas de servicios, el entrenamiento y las transferencias de dinero –donaciones o subsidios– tienen una innegable marca mercantil y utilitaria", afirmó Roberto Cajina, consultor en temas seguridad y defensa en un reciente artículo de la revista Atenea.
Esta tendencia no es nueva. Si se toma un plazo más amplio, la política de entrenamiento y asistencia financiera abre más mercados de venta de armas. Entre 1996 y 2010, EEUU entregó a Argentina u$s53,6 millones y el país le compró u$s1.300 millones en armamentos. Si la capacitación se hizo con un determinado artículo militar, es lógico que ante la necesidad de mantenimiento o compra de repuestos, se recurra al país de la empresa proveedora.
La Asistencia Militar Extranjera o IMET es parte de la economía norteamericana. La Secretaría de Estado destina unos u$s146 mil millones en este rubro para todo el mundo. La industria armamentística es clave para el PBI de los EEUU y un gran empleador de mano de obra.
infobae
A cambio, se compró armamento norteamericano por u$s292,7 millones, según cifras oficiales
El historial militar entre Argentina y los EEUU es medido desde 1950. El intercambio de dinero y personal especializado ha sido fluido, tanto bajo gobiernos de facto como en democracia, sin cambios drásticos. El avión cuya carga fue decomisada en Buenos Aires por las autoridades argentinas por material supuestamente no declarado formaba parte de los programas de entrenamiento que Washington pone a disposición de las fuerzas de seguridad y defensa en países aliados.
Argentina fue en 2009 el cuarto país de la región más ayudado en términos de entrenamiento de personal de seguridad detrás de Colombia, México y Perú, según datos oficiales analizados por organismos independientes.
La ONG norteamericana Just the Facts? se dedica a medir la asistencia para asuntos de defensa y seguridad de los EEUU hacia América Latina y el Caribe sobre la base de datos de la Secretaría de Estado que hoy preside Hillary Clinton.
La Asistencia Militar al Extranjero (IMET por sus siglas en inglés) se focaliza en programas para combatir el narcotráfico, el terrorismo y la protección de las fronteras. Según Just the Facts, la cooperación con Argentina es clave porque puede ser una "ruta hacia Europa y otros mercados de la cocaína producida en Bolivia". Además, el país se transformó en "tránsito para la efedrina con destino a México y los EEUU en 2008". El organismo extranjero considera que la venta ilegal de esta sustancia "sigue siendo un problema" a pesar de que el gobierno argentino prohibió su importación.
Efectivos de Gendarmería, la Policía y las Fuerzas Armadas participaron de los programas de capacitación. Esta cooperación no fue interrumpida por las administraciones kirchneristas, de 2003 a la fecha.
Según Just the Facts, durante ese período (2003 – 2010) la Argentina recibió u$s17 millones en asistencia militar de los EEUU y 4.195 miembros de las fuerzas de seguridad fueron entrenados. La contraprestación, pocas veces informada, fue la compra, durante los últimos siete años, de u$s292,7 millones de armamento norteamericano.
"Las ventas de servicios, el entrenamiento y las transferencias de dinero –donaciones o subsidios– tienen una innegable marca mercantil y utilitaria", afirmó Roberto Cajina, consultor en temas seguridad y defensa en un reciente artículo de la revista Atenea.
Esta tendencia no es nueva. Si se toma un plazo más amplio, la política de entrenamiento y asistencia financiera abre más mercados de venta de armas. Entre 1996 y 2010, EEUU entregó a Argentina u$s53,6 millones y el país le compró u$s1.300 millones en armamentos. Si la capacitación se hizo con un determinado artículo militar, es lógico que ante la necesidad de mantenimiento o compra de repuestos, se recurra al país de la empresa proveedora.
La Asistencia Militar Extranjera o IMET es parte de la economía norteamericana. La Secretaría de Estado destina unos u$s146 mil millones en este rubro para todo el mundo. La industria armamentística es clave para el PBI de los EEUU y un gran empleador de mano de obra.
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