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Mensaje: <blockquote data-quote="MAC1966" data-source="post: 80617" data-attributes="member: 49">El gigante EADS, a punto de mutar en un consorcio semipúblico ruso-europeo @Jesús García Lunes, 16 de octubre de 2006 El consorcio aeronáutico europeo EADS está a punto de sufrir una profunda transformación gracias a la política gubernamental de Chirac y Merkel y, por qué no decirlo, también de Putin. Incluso hay posibilidades de que el Gobierno ZP entre en liza, aunque no fue invitado a la última reunión ¿Por qué será? Vladimir Putin, de acuerdo con sus profundos conocimientos de espionaje soviético, está haciendo una auténtica guerra psicológica al consorcio, cada vez más necesitado de ayudas económicas y de gestión. A través del banco estatal Vneshtorgbank podría haber incrementado su participación del 5 hasta el 7% en un momento en el que los socios alemanes y franceses tratan de limitarle su entrada en el consejo y los derechos de voto. Es curioso porque el consorcio Daimler Chrysler está soportando una gran presión y parte de su 22% podría ser adquirido por uno o varios lander, así como por otras entidades de carácter público alemán. En los mercados se especula con que podría reducir su participación al 15% al menos. El Estado francés tiene un 15% de EADS a través de Sogeade. Sólo falta saber qué hará Lagardere, que también ha aligerado su participación en la entidad desde el 20 al 7,5% en un momento en el que precisamente lo que resultaba necesario era consolidar su presencia y dar a entender a su accionariado el apoyo total al proyecto. Aunque la postura de Daimler Chrysler y de Lagardere puede ser criticada, resulta muy difícil para entidades privadas observar cómo su inversión se difumina gracias a las constantes intervenciones gubernamentales. La lucha entre alemanes y franceses, con sus fobias y sus personalismos, ha convertido en ingobernable a una compañía que aparecía a los ojos de todos con un futuro brillante. Su gran proyecto, el superjumbo A 380, ha puesto el consorcio patas arriba y ha mostrado hasta qué punto se puede gestionar mal una compañía. Asistimos o podemos asistir a la descomposición accionarial de la empresa, al desmoronamiento de la presencia privada mientras que recibe inyecciones de moral y de dinero público por todas partes. Es el gran fracaso del consorcio aeronáutico entendido con la filosofía de cuando surgió la entidad como rompeolas de lo que iba a ser la nueva Europa. Todos juntos la mataron y ella sola se murió. Además, es infumable que ahora, cuando resulta necesario un ajuste de caballo a la empresa, Francia y Alemania salgan a la palestra explicando que repartirán el daño salomónicamente. Chirac besándole la mano a la canciller Merkel es la foto vergonzosa de lo que los políticos quieren hacer con la empresa. ¿Quién puede justificar que el cierre de fábricas se haga con criterios empresariales, más que políticos? Y lo que es peor, que esos criterios permitan a la empresa salir adelante. Goldman Sachs ha dicho en uno de sus últimos informes que sería necesario cerrar siete plantas en Europa, entre ellas Illescas, en Toledo, con 500 empleados, y echar a unas 9.000 personas. El famoso plan de recorte de costes elaborado por Christian Streiff, que ha sido sustituido por Louis Gallois, tiene que ponerse en marcha aunque lo hará con la varita de los políticos en la mesa del consejo de administración. En la Sepi, que tiene un 5,4%, se han puesto las pilas temerosos de que el ajuste de caballo se pacte en un café de estos por la mañana entre líderes políticos franceses y alemanes y las fábricas de Illescas, Puerto Real y Getafe –que, por cierto, siempre han sido cumplidoras, no como las de Hamburgo o Toulouse- se conviertan en moneda de cambio. El Gobierno trata de sentarse también a jugar y es posible que acabe adquiriendo un 5% más, algo hasta ahora negado por activa y por pasiva. El dinero privado no llega por el miedo al mangoneo público y finalmente será el Estado el que se haga cargo. Una muestra de por dónde va el libre mercado en Europa. Arcelor, el consorcio siderúrgico europeo, ha pasado a mejor vida en manos de Mittal, antes de que los rusos de Severstal entraran. EADS, surgido como muestra del entendimiento europeo, es hoy una Torre de Babel, camino de mutar en una entidad de carácter semipúblico europeo y con participación estatal rusa. Que nos cojan confesados. Sólo en España hay más de 20.000 empleos indirectos de empresas auxiliares, que pueden estar en peligro.</blockquote>

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