Airbus ha advertido a los futuros y potenciales usuarios del transporte A400M sobre un retraso en el programa de 3 meses según se informó hoy. El programa –valuado en 26.000 millones de dólares- preveía el ensamble del primer prototipo para Marzo próximo pero ahora se espera que el mismo sea ensamblado durante la segunda mitad de éste año. Los motivos del atraso han sido un rediseño del avión, especialmente en algunos componentes estructurales que interfieren con las performances del avión.
Las fuerzas aéreas de Francia, Alemania, Gran Bretaña, Sudáfrica, España, Turquía y Luxemburgo deberán entonces reprogramar sus flotas de C-130 ya que èstos deberán permanecer más tiempo en servicio de lo programado.
Una auditoria permitió conocer que los rediseños se completaron a tiempo, pero que no se han implementado en tiempo y forma en la producción del primer ejemplar. Este retraso fue anunciado por muchos medios de prensa tras conocerse los sucesivos retrasos en el A380, y aunque el retraso de 3 meses se considera “no crítico” para el programa, la confianza de los clientes militares comienza a contagiarse de lo sufrido por los clientes comerciales del A380, ya que saben que se trata de una aeronave totalmente nueva, nueva célula, motores y hélices lo que seguramente producirá algún retraso adicional.
Por si fuera poco Airbus perdió estrepitosamente el 2006 frente a su batalla con Boeing, ya que sólo obtuvo pedidos por 790 ejemplares frente a los 1.044 del constructor de Chicago. Airbus consideró que el 2006 fue un año negro ya que se sumó el atraso en el A380, el fiasco del A350, las compensaciones millonarias que debe pagar a los clientes del A380 y ahora ya en el 2007, se ve obligado a anunciar un retraso en su principal programa militar.
Lo cierto es que los números no vienen muy bien. Las acciones siguen en baja y la banca suiza le ha negado un crédito por 1.120 millones de Euros. Quizás el mayor colmo del A400M es que los nuevos motores –los TP400- serán probados en un C-130 Hercules, el rival a vencer y como toque final, Jean-Paul Herteman, el director ejecutivo de Safran’s Sagem Defense Security (productor del motor) ha declarado que el TP400 es “muy cambiante”.
Quizás si Airbus hubiera generado sus propios diseños y su propio mercado, y no vivir tratando de destronar a Boeing modelo por modelo, los números serían otros. Del A380 ya nadie se anima a dar cifras, nadie cree que tras 150/200 ejemplares el programa comience a dar ganancias. Un elefante blanco que está generando demasiada turbulencia y demasiados números en rojo; y lamentablemente el A400M ya presenta demoras cuando aún no se completó ni el primer ejemplar.
Es casi indudable que con ésta noticia Canadà terminará por confirmar la compra de los 16 C-130J y el resto de los usuarios deberá estirar la vida útil de sus C-130. Boeing y Lockheed-Martin agradecidos....
Las fuerzas aéreas de Francia, Alemania, Gran Bretaña, Sudáfrica, España, Turquía y Luxemburgo deberán entonces reprogramar sus flotas de C-130 ya que èstos deberán permanecer más tiempo en servicio de lo programado.
Una auditoria permitió conocer que los rediseños se completaron a tiempo, pero que no se han implementado en tiempo y forma en la producción del primer ejemplar. Este retraso fue anunciado por muchos medios de prensa tras conocerse los sucesivos retrasos en el A380, y aunque el retraso de 3 meses se considera “no crítico” para el programa, la confianza de los clientes militares comienza a contagiarse de lo sufrido por los clientes comerciales del A380, ya que saben que se trata de una aeronave totalmente nueva, nueva célula, motores y hélices lo que seguramente producirá algún retraso adicional.
Por si fuera poco Airbus perdió estrepitosamente el 2006 frente a su batalla con Boeing, ya que sólo obtuvo pedidos por 790 ejemplares frente a los 1.044 del constructor de Chicago. Airbus consideró que el 2006 fue un año negro ya que se sumó el atraso en el A380, el fiasco del A350, las compensaciones millonarias que debe pagar a los clientes del A380 y ahora ya en el 2007, se ve obligado a anunciar un retraso en su principal programa militar.
Lo cierto es que los números no vienen muy bien. Las acciones siguen en baja y la banca suiza le ha negado un crédito por 1.120 millones de Euros. Quizás el mayor colmo del A400M es que los nuevos motores –los TP400- serán probados en un C-130 Hercules, el rival a vencer y como toque final, Jean-Paul Herteman, el director ejecutivo de Safran’s Sagem Defense Security (productor del motor) ha declarado que el TP400 es “muy cambiante”.
Quizás si Airbus hubiera generado sus propios diseños y su propio mercado, y no vivir tratando de destronar a Boeing modelo por modelo, los números serían otros. Del A380 ya nadie se anima a dar cifras, nadie cree que tras 150/200 ejemplares el programa comience a dar ganancias. Un elefante blanco que está generando demasiada turbulencia y demasiados números en rojo; y lamentablemente el A400M ya presenta demoras cuando aún no se completó ni el primer ejemplar.
Es casi indudable que con ésta noticia Canadà terminará por confirmar la compra de los 16 C-130J y el resto de los usuarios deberá estirar la vida útil de sus C-130. Boeing y Lockheed-Martin agradecidos....