Este walk-around del C-130J merece un espacio extra, ya que Wolf tuvo muy buen ojo para fotografiar los principales detalles de ésta versión. Comenzamos la recorrida…
Aunque en las plataformas de FIDAE, el A380 como los KC-10 y C-17 se robaban todas las miradas, el Hercules es un clásico y tiene lo suyo. El ejemplar desplazado a la exposición es un C-130J (06-4632) perteneciente al escuadrón 41 de carga con base en Pope.
Ingreso por la bodega de carga
Distintas imágenes de la bodega, con multiples accesorios, sistemas de carga, rodillos, gruas, etc.
Una buena dotación de paracaídas por las dudas….
El cockpit y la consola central del C-130J. Aunque todo está apagado se aprecian claramente las seis enormes pantallas multifunción acompañadas por cinco minipantallas LCD auxiliares situadas en la parte superior del tablero. Esta cantidad de pantallas como la automatización de muchos sistemas permitió a la Lockheed eliminar en el C-130J el puesto del ingeniero de vuelo. El equipamiento estándar del C-130J comprende navegadores por girolaser con GPS, mapas digitales, radar meteorológico multimodo MODAR 4000, E-TCAS, EGPWS, dos computadoras de misión, Head Up Display doble, etc. En la consola central son fácilmente identificables los dos sistemas de gestión de vuelo (FMS) y los equipos de comunicaciones.
El C-130J dispone del sistema de alerta misil AN/AAR-47 cuya dos antenas frontales se encuentran a cada lado de la proa, por debajo del cockpit. El sensor situado a la izquierda del MAW es el receptor de alerta. En la foto inferior se aprecia el doble sensor AAR-47 instalado en la punta de las alas junto con el RWR ALR-56M. De éste modo de obtiene una cobertura de 360 grados y detectado el misil, de modo automático se eyectan señuelos ALE-47 y entra en funcionamiento un jammer IR (Sanders AN/ALQ-157) a fin de confundir el misil y desviarlo de su trayectoria. En breve todos los C-130J de la USAF recibirán un equipo más avanzado, el Northrop Grumman Large Aircraft Infrared Countermeasures (LAIRCM).
En detalle el motor AE2011 y las hélices de seis palas de materiales compuestos de Dowty. Cada motor patea 4.591 shp
Algunas de las tantas cosas que un C-130J puede transportar en su bodega, en éste caso un Hummer para operaciones especiales.
Como ya informamos en las últimas noticias, Israel ha solicitado una versión con capacidad de reabastecimiento aéreo y un avanzado sistema de lanzamiento de carga y paracaidistas que esta controlado por una computadora y un receptor GPS que permite un lanzamiento de alta precisión. Las modificaciones elevarán el costo del avión a unos 103 millones de dólares. Un C-130J “normal” tiene un costo de 65 millones de dólares, sin logística ni equipos antimisil.
Actualmente son más de 200 los ejemplares entregados de la serie C-130J, siendo el último usuario la fuerza aérea de India que ha solicitado 6 aviones para operaciones especiales valuados casi en 1.000 millones de dólares. Por su parte el Servicio de Guardacostas de EEUU, ya incorporó el primero de los 6 HC-130J equipados con el radar de vigilancia marítima Elta EL/M-2022A(V)3 y una torreta FLIR Safire III-.En cuanto a la versión cisterna (KC-130J) el mayor usuario es el USMC con 29 unidades seguido por la RAF con 15 ejemplares e Italia con 6. Debido a los recortes presupuestarios, la versión cañonera AC-130J se hace esperar.
Un clásico y un símbolo del transporte militar que lleva 54 años de producción continua.
Fotos Wolf / Textos Spirit666
Aunque en las plataformas de FIDAE, el A380 como los KC-10 y C-17 se robaban todas las miradas, el Hercules es un clásico y tiene lo suyo. El ejemplar desplazado a la exposición es un C-130J (06-4632) perteneciente al escuadrón 41 de carga con base en Pope.
Ingreso por la bodega de carga
Distintas imágenes de la bodega, con multiples accesorios, sistemas de carga, rodillos, gruas, etc.
Una buena dotación de paracaídas por las dudas….
El C-130J dispone del sistema de alerta misil AN/AAR-47 cuya dos antenas frontales se encuentran a cada lado de la proa, por debajo del cockpit. El sensor situado a la izquierda del MAW es el receptor de alerta. En la foto inferior se aprecia el doble sensor AAR-47 instalado en la punta de las alas junto con el RWR ALR-56M. De éste modo de obtiene una cobertura de 360 grados y detectado el misil, de modo automático se eyectan señuelos ALE-47 y entra en funcionamiento un jammer IR (Sanders AN/ALQ-157) a fin de confundir el misil y desviarlo de su trayectoria. En breve todos los C-130J de la USAF recibirán un equipo más avanzado, el Northrop Grumman Large Aircraft Infrared Countermeasures (LAIRCM).
En detalle el motor AE2011 y las hélices de seis palas de materiales compuestos de Dowty. Cada motor patea 4.591 shp
Algunas de las tantas cosas que un C-130J puede transportar en su bodega, en éste caso un Hummer para operaciones especiales.
Como ya informamos en las últimas noticias, Israel ha solicitado una versión con capacidad de reabastecimiento aéreo y un avanzado sistema de lanzamiento de carga y paracaidistas que esta controlado por una computadora y un receptor GPS que permite un lanzamiento de alta precisión. Las modificaciones elevarán el costo del avión a unos 103 millones de dólares. Un C-130J “normal” tiene un costo de 65 millones de dólares, sin logística ni equipos antimisil.
Actualmente son más de 200 los ejemplares entregados de la serie C-130J, siendo el último usuario la fuerza aérea de India que ha solicitado 6 aviones para operaciones especiales valuados casi en 1.000 millones de dólares. Por su parte el Servicio de Guardacostas de EEUU, ya incorporó el primero de los 6 HC-130J equipados con el radar de vigilancia marítima Elta EL/M-2022A(V)3 y una torreta FLIR Safire III-.En cuanto a la versión cisterna (KC-130J) el mayor usuario es el USMC con 29 unidades seguido por la RAF con 15 ejemplares e Italia con 6. Debido a los recortes presupuestarios, la versión cañonera AC-130J se hace esperar.
Un clásico y un símbolo del transporte militar que lleva 54 años de producción continua.
Fotos Wolf / Textos Spirit666