lobo estepario
Forista Sancionado o Expulsado
Proyecto de la Comisión Europea:
Avión de alta tecnología combatirá a los terroristas
Si un secuestrador toma el control de la nave, ésta se alejaría automáticamente de rascacielos y plantas nucleares.
--------------------------------------------------------------------------------
PARÍS.- Imagínese subir a bordo del avión antiterrorista europeo del futuro. En la puerta, una pequeña nariz electrónica, según se cree, 30 veces más sensible que la de un perro, huele a los pasajeros en busca de productos químicos y de vapores peligrosos.
Después del despegue, las computadoras que examinan las conversaciones de la cabina recogen las palabras sospechosas en el asiento 9B, las cámaras de video del tamaño de una uña detectan movimientos faciales nerviosos, un micrófono oculto registra ruidos sospechosos del pasajero en la hilera posterior, y la pantalla del computador advierte a la tripulación y al piloto de potenciales problemas.
Si un terrorista logra evitar los cerrojos de la puerta de la cabina del piloto, los que se activan con la huella digital, y se apodera de los controles, una computadora asume la dirección y aleja al avión de los rascacielos, de una planta nuclear y de cualquier otra zona sobre la cual esté prohibido sobrevolar.
El proyecto SAFEE -Seguridad Aérea en el Ambiente Europeo del Futuro- es el primer esfuerzo internacional coordinado para crear un sistema de aviones capaces de frustrar los secuestros y ataques terroristas. Está en desarrollo en laboratorios clasificados en 11 países europeos e Israel. Gran parte de la tecnología está en etapas avanzadas de desarrollo, aunque los sistemas para analizar con precisión las expresiones faciales siguen siendo problemáticos.
El director del programa de US$ 50 millones, Daniel Gaultier, trabaja en un edificio moderno con vista al río Sena, donde el ingreso a su oficina se controla con el mismo tipo de cerrojo que tendría la cabina del avión del futuro: con huella digital.
El ejecutivo describe el sistema -que está desarrollando en secreto la Comisión Europea y 31 centros de investigación universitarios, de empresas de aeronaves, de electrónica aeronáutica, de computación y seguridad- como "una última defensa contra los ataques" en un mundo post 11-S.
El proyecto enfrenta una seria oposición. Miembros de organizaciones de derechos humanos están preocupados de la privacidad del pasajero, las agrupaciones de pilotos temen que las computadoras usurpen su autoridad y los vendedores de las aerolíneas se preguntan por el precio final.
"El escuchar furtivamente es algo increíble", señaló Sophia in't Veld, holandesa integrante del Parlamento Europeo, en una entrevista telefónica desde Washington, donde estaba reunida con miembros del Congreso, con el fin de tratar asuntos de antiterrorismo y privacidad.
"Tenemos que sacrificar cierta privacidad y libertad, pero las personas tienen que tener los medios apropiados de reparación para defenderse contra la invasión innecesaria de la privacidad o abusos de datos por parte de las autoridades públicas", dijo.
"El intercambio entre tecnología y derechos humanos es un área delicada y difícil", manifestó Gaultier. "Cuando hay una crisis, todo el mundo lo acepta. Seis meses después de la crisis, todos la olvidan. Siempre hay que tener cuidado en cómo abordar los derechos del pasajero".
El uso de sistemas de monitoreo potencialmente entrometidos -como aquellos que registrarían los movimientos de pasajeros y las expresiones faciales y escucharían furtivamente las conversaciones privadas y las visitas al baño- es un tema especialmente sensible en Europa. Las comisiones de vigilancia se han involucrado en batallas transatlánticas por las reglas estadounidenses que exigen que las aerolíneas informen sobre los datos personales de los pasajeros entrantes a las autoridades norteamericanas.
La prueba de la mayoría de las tecnologías en simuladores va a empezar en el último trimestre de este año y va a continuar hasta principios del próximo año.
El paquete de sistemas es poco probable que esté disponible en los aviones comerciales antes de una década. Para contar con la nueva tecnología antes, ya tendría que ser incorporada a los aviones que están siendo construidos actualmente. Por otro lado, el costo de reacondicionar los aviones existentes sería prohibitivamente alto.
Oposición Organizaciones de derechos humanos se oponen al avión por la pérdida de privacidad que implica el proyecto para los pasajeros.
Avión de alta tecnología combatirá a los terroristas
Si un secuestrador toma el control de la nave, ésta se alejaría automáticamente de rascacielos y plantas nucleares.
--------------------------------------------------------------------------------
PARÍS.- Imagínese subir a bordo del avión antiterrorista europeo del futuro. En la puerta, una pequeña nariz electrónica, según se cree, 30 veces más sensible que la de un perro, huele a los pasajeros en busca de productos químicos y de vapores peligrosos.
Después del despegue, las computadoras que examinan las conversaciones de la cabina recogen las palabras sospechosas en el asiento 9B, las cámaras de video del tamaño de una uña detectan movimientos faciales nerviosos, un micrófono oculto registra ruidos sospechosos del pasajero en la hilera posterior, y la pantalla del computador advierte a la tripulación y al piloto de potenciales problemas.
Si un terrorista logra evitar los cerrojos de la puerta de la cabina del piloto, los que se activan con la huella digital, y se apodera de los controles, una computadora asume la dirección y aleja al avión de los rascacielos, de una planta nuclear y de cualquier otra zona sobre la cual esté prohibido sobrevolar.
El proyecto SAFEE -Seguridad Aérea en el Ambiente Europeo del Futuro- es el primer esfuerzo internacional coordinado para crear un sistema de aviones capaces de frustrar los secuestros y ataques terroristas. Está en desarrollo en laboratorios clasificados en 11 países europeos e Israel. Gran parte de la tecnología está en etapas avanzadas de desarrollo, aunque los sistemas para analizar con precisión las expresiones faciales siguen siendo problemáticos.
El director del programa de US$ 50 millones, Daniel Gaultier, trabaja en un edificio moderno con vista al río Sena, donde el ingreso a su oficina se controla con el mismo tipo de cerrojo que tendría la cabina del avión del futuro: con huella digital.
El ejecutivo describe el sistema -que está desarrollando en secreto la Comisión Europea y 31 centros de investigación universitarios, de empresas de aeronaves, de electrónica aeronáutica, de computación y seguridad- como "una última defensa contra los ataques" en un mundo post 11-S.
El proyecto enfrenta una seria oposición. Miembros de organizaciones de derechos humanos están preocupados de la privacidad del pasajero, las agrupaciones de pilotos temen que las computadoras usurpen su autoridad y los vendedores de las aerolíneas se preguntan por el precio final.
"El escuchar furtivamente es algo increíble", señaló Sophia in't Veld, holandesa integrante del Parlamento Europeo, en una entrevista telefónica desde Washington, donde estaba reunida con miembros del Congreso, con el fin de tratar asuntos de antiterrorismo y privacidad.
"Tenemos que sacrificar cierta privacidad y libertad, pero las personas tienen que tener los medios apropiados de reparación para defenderse contra la invasión innecesaria de la privacidad o abusos de datos por parte de las autoridades públicas", dijo.
"El intercambio entre tecnología y derechos humanos es un área delicada y difícil", manifestó Gaultier. "Cuando hay una crisis, todo el mundo lo acepta. Seis meses después de la crisis, todos la olvidan. Siempre hay que tener cuidado en cómo abordar los derechos del pasajero".
El uso de sistemas de monitoreo potencialmente entrometidos -como aquellos que registrarían los movimientos de pasajeros y las expresiones faciales y escucharían furtivamente las conversaciones privadas y las visitas al baño- es un tema especialmente sensible en Europa. Las comisiones de vigilancia se han involucrado en batallas transatlánticas por las reglas estadounidenses que exigen que las aerolíneas informen sobre los datos personales de los pasajeros entrantes a las autoridades norteamericanas.
La prueba de la mayoría de las tecnologías en simuladores va a empezar en el último trimestre de este año y va a continuar hasta principios del próximo año.
El paquete de sistemas es poco probable que esté disponible en los aviones comerciales antes de una década. Para contar con la nueva tecnología antes, ya tendría que ser incorporada a los aviones que están siendo construidos actualmente. Por otro lado, el costo de reacondicionar los aviones existentes sería prohibitivamente alto.
Oposición Organizaciones de derechos humanos se oponen al avión por la pérdida de privacidad que implica el proyecto para los pasajeros.