Bolivia podría adquirir material de Defensa de Rusia por valor de hasta 300 millones de dólares dentro del convenio técnico-militar firmado entre ambas naciones y como parte del objetivo gubernamental de devolver a las Fuerzas Armadas bolivianas la misma capacidad que tuvieron hasta hace unos 20 años.
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, afirmó que el ejecutivo no busca equipar a la institución armada con fines belicistas sino asegurar que las Fuerzas Armadas tengan la capacidad operativa necesaria para cumplir su misión constitucional sin los problemas ni las limitaciones actuales.
"Bolivia no tiene una intención armamentista. Somos pacifistas por convicción", afirmó San Miguel en una entrevista con el diario local La Prensa. San Miguel aseguró que las Fuerzas Armadas bolivianas tienen en sus filas a premilitares y conscriptos quienes deben recibir instrucción especializada, "para los que necesitamos contar con armas adecuadas y modernas".
En febrero pasado, en Moscú, los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y la Federación Rusa, Dimitri Medvedev, suscribieron un convenio técnico-militar, que dará lugar a acuerdos específicos, cuyo contenido es evaluado actualmente por autoridades bolivianas. En el marco de este acuerdo, el diario El País informó de que Bolivia podría adquirir equipamiento militar de origen ruso por un monto aproximado de 300 millones de dólares, aunque San Miguel aclaró que esto está aún sujeto a una serie de factores. Mencionó, por ejemplo, la capacidad de endeudamiento y de pago del Estado, como requisito indispensable para enumerar los equipos, implementos y materiales que serán.
Sin embargo, el ministro de Defensa boliviano apuntó que "lo primero que necesitamos es contar con helicópteros de carga" para atender a la población que reside en las zonas más alejadas de los centros urbanos del país, así como embarcaciones para incrementar la vigilancia y control de los ríos y vías fluviales del país.
San Miguel afirmó que Rusia posee la mejor industria pesada del mundo, por lo que, en caso de que Bolivia haga la solicitud correspondiente, podrían llegar carros blindados, tanques y equipos destinados para el rescate de personas en situaciones complicadas o en emergencias.
El ministro de Defensa reiteró que "tenemos que evaluar prioridades". Aún no hay elección de armas o equipos, pues el convenio firmado entre Bolivia y de Rusia en febrero es genérico y no se ha definido cuáles son los elementos que serán adquiridos porque, previamente, se debe determinar los parámetros sobre los cuales se ejecutará ese acuerdo. "Rusia no tiene límites para efectuar la provisión a Bolivia", agregó.
El experto en asuntos militares Samuel Montaño aseguró en declaraciones al diario local que las Fuerzas Armadas bolivianas tienen enormes limitaciones relativas a su equipamiento, especialmente en relación con el equipamiento del Ejército de Tierra que consideró "completamente obsoleto y diezmado". Explicó, por ejemplo, que de los 60 carros de asalto M103 de fabricación estadounidense con que se contaba en un principio, quedan unos 20 en funciones y el resto hace más de 20 años está parado por falta de repuestos.
En principio, hubo 25 carros Mowag suizos, pero cinco están inutilizados por la misma razón.
De los 12 blindados Urutú, de industria brasileña, no queda uno solo en el país, pero siete fueron alquilados a Naciones Unidas para la misión de paz que se lleva adelante en Congo, África, y cinco fueron enviados con similar propósito a Haití. Montaño aseguró que quedan 23 carros de combate y reconocimiento de fabricación brasileña. Uno sufrió importantes desperfectos en los centros mineros del norte del departamento de Potosí, adonde habían sido enviados para afirmar el golpe de Estado del 17 de julio de 1980, liderado por Luis García Meza y Luis Arce Gómez.
Los siete carros blindados Cadillac Gage V-100, de industria estadounidense, no pueden ser empleados a causa de la falta de repuestos y mantenimiento. Se encuentran hace diez años en el Regimiento Tarapacá, con asiento en la población de Coro Coro, departamento de La Paz.
La mitad de los 34 tanques SK-105, producidos en Austria, está en condiciones de operar y se halla, según la fuente, en una unidad situada en Patacamaya, La Paz. Además, en septiembre de 2006, Argentina donó 24 blindados M-9 fabricados entre 1940 y 1950 en Estados Unidos y que el Ejército del país vecino readecuó hace 20 años. Éstos se hallan almacenados en el Regimiento Chichas, situado en Tupiza, departamento de Potosí.
Algunos SK-105 Bolivianos
Y los M-9 a los que hace referencia, vendrian a ser algo como esto?:
Y mientras tanto nosotros no ponemos un sope para las F.F.A.A.......:banghead:
El ministro de Defensa, Walker San Miguel, afirmó que el ejecutivo no busca equipar a la institución armada con fines belicistas sino asegurar que las Fuerzas Armadas tengan la capacidad operativa necesaria para cumplir su misión constitucional sin los problemas ni las limitaciones actuales.
"Bolivia no tiene una intención armamentista. Somos pacifistas por convicción", afirmó San Miguel en una entrevista con el diario local La Prensa. San Miguel aseguró que las Fuerzas Armadas bolivianas tienen en sus filas a premilitares y conscriptos quienes deben recibir instrucción especializada, "para los que necesitamos contar con armas adecuadas y modernas".
En febrero pasado, en Moscú, los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y la Federación Rusa, Dimitri Medvedev, suscribieron un convenio técnico-militar, que dará lugar a acuerdos específicos, cuyo contenido es evaluado actualmente por autoridades bolivianas. En el marco de este acuerdo, el diario El País informó de que Bolivia podría adquirir equipamiento militar de origen ruso por un monto aproximado de 300 millones de dólares, aunque San Miguel aclaró que esto está aún sujeto a una serie de factores. Mencionó, por ejemplo, la capacidad de endeudamiento y de pago del Estado, como requisito indispensable para enumerar los equipos, implementos y materiales que serán.
Sin embargo, el ministro de Defensa boliviano apuntó que "lo primero que necesitamos es contar con helicópteros de carga" para atender a la población que reside en las zonas más alejadas de los centros urbanos del país, así como embarcaciones para incrementar la vigilancia y control de los ríos y vías fluviales del país.
San Miguel afirmó que Rusia posee la mejor industria pesada del mundo, por lo que, en caso de que Bolivia haga la solicitud correspondiente, podrían llegar carros blindados, tanques y equipos destinados para el rescate de personas en situaciones complicadas o en emergencias.
El ministro de Defensa reiteró que "tenemos que evaluar prioridades". Aún no hay elección de armas o equipos, pues el convenio firmado entre Bolivia y de Rusia en febrero es genérico y no se ha definido cuáles son los elementos que serán adquiridos porque, previamente, se debe determinar los parámetros sobre los cuales se ejecutará ese acuerdo. "Rusia no tiene límites para efectuar la provisión a Bolivia", agregó.
El experto en asuntos militares Samuel Montaño aseguró en declaraciones al diario local que las Fuerzas Armadas bolivianas tienen enormes limitaciones relativas a su equipamiento, especialmente en relación con el equipamiento del Ejército de Tierra que consideró "completamente obsoleto y diezmado". Explicó, por ejemplo, que de los 60 carros de asalto M103 de fabricación estadounidense con que se contaba en un principio, quedan unos 20 en funciones y el resto hace más de 20 años está parado por falta de repuestos.
En principio, hubo 25 carros Mowag suizos, pero cinco están inutilizados por la misma razón.
De los 12 blindados Urutú, de industria brasileña, no queda uno solo en el país, pero siete fueron alquilados a Naciones Unidas para la misión de paz que se lleva adelante en Congo, África, y cinco fueron enviados con similar propósito a Haití. Montaño aseguró que quedan 23 carros de combate y reconocimiento de fabricación brasileña. Uno sufrió importantes desperfectos en los centros mineros del norte del departamento de Potosí, adonde habían sido enviados para afirmar el golpe de Estado del 17 de julio de 1980, liderado por Luis García Meza y Luis Arce Gómez.
Los siete carros blindados Cadillac Gage V-100, de industria estadounidense, no pueden ser empleados a causa de la falta de repuestos y mantenimiento. Se encuentran hace diez años en el Regimiento Tarapacá, con asiento en la población de Coro Coro, departamento de La Paz.
La mitad de los 34 tanques SK-105, producidos en Austria, está en condiciones de operar y se halla, según la fuente, en una unidad situada en Patacamaya, La Paz. Además, en septiembre de 2006, Argentina donó 24 blindados M-9 fabricados entre 1940 y 1950 en Estados Unidos y que el Ejército del país vecino readecuó hace 20 años. Éstos se hallan almacenados en el Regimiento Chichas, situado en Tupiza, departamento de Potosí.
Algunos SK-105 Bolivianos
Y los M-9 a los que hace referencia, vendrian a ser algo como esto?:
Y mientras tanto nosotros no ponemos un sope para las F.F.A.A.......:banghead: