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Mensaje: <blockquote data-quote="Shandor" data-source="post: 464117" data-attributes="member: 50">Nuevo foco de tensión entre Lula y los militaresRIO DE JANEIRO.- En medio de la peor crisis político-militar del gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva, la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) pidió ayer al gobierno adquirir, en una licitación para 36 cazabombarderos, el modelo sueco Gripen NG y dejó en el tercer lugar de la lista al francés Rafale, el preferido del presidente. El reclamo se convirtió en otro foco de tensión entre el mandatario y los jefes militares. Junto con el ministro de Defensa, Nelson Jobim, los altos mandos de las fuerzas armadas habían amenazado, el miércoles pasado, con renunciar en forma generalizada si no se modificaba el proyecto de creación de una Comisión Nacional de la Verdad, considerado "revanchista" por los uniformados. Según el diario Folha de S. Paulo , los aviones Rafale, de la francesa Dassault, claramente preferidos por Lula y por Jobim, que incluyen un amplio acuerdo de transferencia militar con París, quedaron en último lugar en la disputa, superados por los F-18 Super Hornet, de la estadounidense Boeing, que ocuparon el segundo puesto, detrás de los Gripen NG de Saab. "El gobierno está en una posición incómoda: o ignora el informe de la FAB y se queda con los Rafale o irrita al gobierno francés y opta por el Gripen NG. Formalmente, el presidente Lula tiene libertad para elegir cualquiera de los tres", indicó el artículo. En septiembre del año pasado, tras recibir en Brasilia al presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, Lula anunció su decisión de entablar negociaciones con Dassault para adquirir los Rafale, ante la promesa de transferencia de tecnología formulada por el mandatario francés. Entonces, el canciller brasileño, Celso Amorim, había dicho que había "una decisión [del gobierno] de negociar la compra de los Rafale". "No será una mera compra, porque habrá fabricación de Brasil, y habrá posibilidad de vender esos aviones en América latina", dijo entonces Amorim. Previamente al anuncio de la apertura de negociaciones por los aviones de combate, el gobierno de Lula había cerrado con Francia la compra de cinco submarinos Scorpène, uno de ellos de propulsión nuclear; medio centenar de helicópteros de transporte militar EC-725, y la construcción de un astillero y una base naval en Río de Janeiro. Al mismo tiempo, Francia se comprometió a adquirir a Brasil una decena de aeronaves de transporte militar KC-390, un proyecto que será desarrollado por la empresa brasileña Embraer. Estos planes suponen inversiones multimillonarias en equipamiento militar y alimentan los temores de que una carrera armamentística se esté desarrollando entre los países de la región. Brasil argumenta, sin embargo, que son fundamentales para proteger el equivalente a más de 50.000 millones de barriles de petróleo descubierto en el litoral atlántico en los últimos años. La preocupación por garantizar la seguridad de esos "recursos estratégicos" aumentó luego de que Estados Unidos anunció, el año pasado, la reactivación de su IV Flota, destinada al hemisferio occidental. Ante la repercusión del informe en la propia FAB y entre las empresas que compiten con Dassault en la licitación, el gobierno volvió sobre sus pasos en los últimos días y decidió aplazar la licitación. Según Folha de S. Paulo , el informe de la FAB fue finalizado el 18 de diciembre. El diario añadió que la FAB justificó su decisión en favor del Gripen NG de Suecia principalmente por el precio de ese cazabombarderos que, por estar todavía en fase de proyecto, es el más barato de los tres. El texto no considera negativo que el avión sueco sea un monomotor, mientras que el Rafale y el F-18 estadounidense son bimotores. Aclara que mientras que el avión francés es un modelo ya existente, lo que reduce la posibilidad de transferencia de tecnología, el sueco está aún en desarrollo, lo que permitiría más beneficios en este aspecto para Brasil. El diario, que tuvo acceso al informe técnico de la FAB, agregó que los militares expusieron tres argumentos contrarios a la compra de los Rafale. En primer lugar, el precio, considerado muy elevado. A fines del año pasado, dirigentes de la Saab confirmaron a la prensa brasileña que su cazabombardero costaría "la mitad del precio de los Rafale", que, según las estimaciones que circulan en Brasil, serían ofrecidos por alrededor de 140 millones de dólares por unidad. Además, la prometida transferencia de tecnología fue considerada insatisfactoria por la aeronáutica, que recordó que el cazabombarderos francés es un "producto listo", que difícilmente podría ser vendido por Brasil a otros países a diferencia del cazabombardero sueco. Por último, la fábrica brasileña de aviones Embraer informó que los márgenes de ganancia que obtendría de la producción local de los cazabombarderos franceses serían inferiores a los de los demás modelos. Según el diario, Jobim pretende reunirse esta semana en Brasilia con el comandante de la aeronáutica, el brigadier Juniti Saito, para intentar decidir la licitación y definir la empresa que se adjudicará el negocio, estimado en unos 10.000 millones de dólares. Agencias DPA, EFE y AFP</blockquote>

Verificación: Libertador de Argentina