Un interesante informe del parlamento de Australia fue publicado el pasado 9 de Junio, donde se revelan datos muy precisos sobre las capacidades del JSF y luego de evaluar las posibilidades de incorporar el F-22 Raptor, el informe concluye que la opción más acertada sería ir por un F-15 Eagle. Aquí les dejo un resúmen con lo más importante del informe:
1) La información técnica disponible indica que las características Stealth del F-35 estarán un tercio degradadas en relación a la configuración de Estados Unidos. Toda la aeronave ha sido optimizada para ser que los radares que operan con las bandas X, Ku, K y Ka no lo detecten con facilidad. En tales bandas operan los principales radares instalados en los aviones cazas y los sistemas de defensa antiaérea. Sin embargo el diseño del F-35 es menos capaz contra las bandas de frecuencia L y S, que son las utilizadas para los radares fijos o móviles de vigilancia aérea o los radares de alerta temprana (AEW), tal como el Boeing 737 Wedgetail adquirido por Australia, y China por ejemplo opera éste tipo de aeronaves denominadas A-50 Mainstay.
2) No es ninguna novedad que los principales países de la región operan con cazas Sukhoi Su-30 o derivados que disponen de la capacidad real de combate más allá del alcance visual (BVR) y de avanzados misiles de adquisición infrarroja. Estos cazas operar regularmente con las aeronaves AWACS , con un radar que es capaz de detectar a los F-35 lo que constituye una serie desventaja para ésta aeronave. Así la limitada capacidad stealth del F-35 australiano lo limitará a operar en circunstancias donde el adversario no haga empleo de sus medios AEW o de radares de vigilancia terrestres.
Conclusión del Informe
Los plazos del programa JSF está obligando al gobierno australiano a tomar decisiones de importancia sobre su participación en el proyecto, cuando en la región las condiciones de superioridad aérea cambian continuamente. El único contendiente es el F-22 Raptor, el cual ya se encuentra en servicio operativo, aunque a un precio muy superior al JSF. El Boeing F-15 Eagle también está disponible, no tiene ningún costo de desarrollo y las versiones adoptadas por Corea del Sur y Singapur lo posicionan como una opción más que interesante a cuenta de la incorporación de aviónica y armamento de última generación, incluso con radares equivalentes al del JSF. Dados los costos de mantenimiento del F/A-18 y F-111, la opción del F-15 es la más segura y económica, en un momento que el crecimiento de los presupuestos de defensa no pueden garantizarse.
No queda mucho para decir, sin ser experto en nada, cae de maduro que para reemplazar una aeronave de ataque profundo como el F-111 y un polivalente como el F/A-18 Hornet, lo más indicado es precisamente un F-15E Eagle o un Super Hornet, considerando las capacidades de ambas aeronaves y de las enormes distancias de Australia y su zona de influcencia en Oceanía. El Raptor sería lo ideal, pero es extremadamente caro. Lo cierto es que Australia es otro país que va por el F-35 pero para nada convencido de ello.
1) La información técnica disponible indica que las características Stealth del F-35 estarán un tercio degradadas en relación a la configuración de Estados Unidos. Toda la aeronave ha sido optimizada para ser que los radares que operan con las bandas X, Ku, K y Ka no lo detecten con facilidad. En tales bandas operan los principales radares instalados en los aviones cazas y los sistemas de defensa antiaérea. Sin embargo el diseño del F-35 es menos capaz contra las bandas de frecuencia L y S, que son las utilizadas para los radares fijos o móviles de vigilancia aérea o los radares de alerta temprana (AEW), tal como el Boeing 737 Wedgetail adquirido por Australia, y China por ejemplo opera éste tipo de aeronaves denominadas A-50 Mainstay.
2) No es ninguna novedad que los principales países de la región operan con cazas Sukhoi Su-30 o derivados que disponen de la capacidad real de combate más allá del alcance visual (BVR) y de avanzados misiles de adquisición infrarroja. Estos cazas operar regularmente con las aeronaves AWACS , con un radar que es capaz de detectar a los F-35 lo que constituye una serie desventaja para ésta aeronave. Así la limitada capacidad stealth del F-35 australiano lo limitará a operar en circunstancias donde el adversario no haga empleo de sus medios AEW o de radares de vigilancia terrestres.
Conclusión del Informe
Los plazos del programa JSF está obligando al gobierno australiano a tomar decisiones de importancia sobre su participación en el proyecto, cuando en la región las condiciones de superioridad aérea cambian continuamente. El único contendiente es el F-22 Raptor, el cual ya se encuentra en servicio operativo, aunque a un precio muy superior al JSF. El Boeing F-15 Eagle también está disponible, no tiene ningún costo de desarrollo y las versiones adoptadas por Corea del Sur y Singapur lo posicionan como una opción más que interesante a cuenta de la incorporación de aviónica y armamento de última generación, incluso con radares equivalentes al del JSF. Dados los costos de mantenimiento del F/A-18 y F-111, la opción del F-15 es la más segura y económica, en un momento que el crecimiento de los presupuestos de defensa no pueden garantizarse.
No queda mucho para decir, sin ser experto en nada, cae de maduro que para reemplazar una aeronave de ataque profundo como el F-111 y un polivalente como el F/A-18 Hornet, lo más indicado es precisamente un F-15E Eagle o un Super Hornet, considerando las capacidades de ambas aeronaves y de las enormes distancias de Australia y su zona de influcencia en Oceanía. El Raptor sería lo ideal, pero es extremadamente caro. Lo cierto es que Australia es otro país que va por el F-35 pero para nada convencido de ello.