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Mensaje: <blockquote data-quote="Diego75" data-source="post: 768696" data-attributes="member: 3228">Si bien esta noticia se refiere a Inglaterra, creo que en el fondo el problema es de toda Europa y tiene que ver con el tema tratado aqui:Fin a la "tolerancia pasiva" en Gran BretañaLas minorías étnicas deberán respetar las normas del país. Preocupado por los guetos, Londres abandonó el relativismo culturalDavid Cameron dijo que su gobierno no aceptará a las minorías que no respeten los principios morales y legales del Reino Unido. El primer ministro británico anunció en consecuencia una nueva estrategia respecto a las relaciones entre las culturas que conviven en su suelo. El gobierno rompe de este modo con las teorías relativistas según las cuales una sociedad puede estar formada por grupos diferenciados yuxtapuestos, regidos por los cánones morales y las costumbres que cada uno trae de su historia y cultura.Uno de los resultados de esa política, llamada "multiculturalismo" y seguida por el Reino Unido en las últimas décadas con los inmigrantes que llegaron a su territorio, es la existencia de guetos en los cuales la falta de sentimiento de pertenencia a una identidad nacional facilita que se conviertan en semilleros de adeptos a causas extremistas."Con la doctrina del multiculturalismo, dijo Cameron, hemos alentado a diferentes culturas a vivir separadamente. Hemos fallado en garantizar la visión de una sociedad única. Hemos tolerado que estas comunidades segregadas pudiesen actuar contra nuestros principios. Si un blanco expresa conceptos racistas, lo condenamos, y es justo. Pero cuando puntos de vista y prácticas igualmente inaceptables provienen de quien no es blanco nos volvemos demasiado cautos, incluso temerosos en tomar posiciones contra ellos".El Premier comunicó que desde ahora, para pertenecer al Reino Unido, habrá que profesar los valores nacidos y consolidados en ese país, tales como la democracia política, la libertad, la igualdad entre hombres y mujeres, entre otros. No habrá integración sin estas premisas.Gran Bretaña abandona por lo tanto una vía que, con el argumento de la tolerancia, fomentaba en realidad la fragmentación social y el debilitamiento de la identidad  nacional. En adelante, intentará emprender un camino que la acerca al modelo del "melting pot" o mestizaje, usual en países poblados mediante inmigración, como los Estados Unidos y la Argentina. En ambas naciones, el Estado, sirviéndose principalmente de la escuela, nacionalizó culturalmente a los inmigrantes. No es casual que en esos países se ice la bandera o se canten himnos patrios al inicio de las clases. Son ejemplos de integración pluricultural exitosa dado que rechazar el multiculturalismo no implica desconocer la existencia de diferentes culturas sino promover su integración y su mezcla.Londres reconoce ahora el riesgo de que los grupos de inmigrantes se constituyan en entidades auto-reguladas y cerradas, impermeables a la cultura británica, lo que en definitiva favorece el racismo, al revés de lo que pretende el relativismo cultural. Ello sin mencionar el peligro del fanatismo ideológico que puede consolidarse más fácilmente en comunidades aisladas.Cameron también hizo un llamado a otras naciones a adoptar los nuevos postulados: "Europa debe despertarse y debe darse cuenta de lo que está sucediendo en nuestros países. Debemos ser absolutamente claros sobre los orígenes de los ataques terroristas y sobre cómo se difunden las ideologías extremistas islámicas que están detrás de ellos".La política seguida hasta ahora no ha evitado los desbordes terroristas. No habrá por lo tanto más condescendencia hacia el multiculturalismo y las organizaciones ideológicamente ambiguas que no condenen explícitamente el terrorismo. "Es legítimo preguntarse, dijo Cameron, si estas organizaciones están a favor de los derechos humanos. ¿Creen en la democracia? ¿Creen en la igualdad ante la ley? ¿Alientan la integración o la segregación y el separatismo cultural?"No habrá más subsidios ni diálogo con estos grupos si no repudian el fanatismo y no respetan las leyes británicas. Para tener una idea de hasta dónde se desarrolló en el Reino Unido el multiculturalismo baste saber que desde los años 80 existen en ese país cortes islámicas para la resolución de los conflictos familiares y financieros de esas comunidades. Aunque limitadas en sus atribuciones y controladas por la justicia nacional, de hecho promueven una diferenciación de los ciudadanos ante la ley.Y no debe creerse que esta tendencia sea sólo británica. En años recientes, una corte provincial argentina -rompiendo con la tradición jurídica e histórica de ese país- anuló una condena por estupro contra un cacique de la etnia wichi y pidió un nuevo juicio que tuviera en cuenta las costumbres culturales de ese grupo en materia de relaciones íntimas con menores de edad. Y, en Bolivia, la última reforma constitucional incluyó en la Carta Magna el reconocimiento a las justicias aborígenes, que con frecuencia apelan a principios y penas que contradicen la Declaración Universal de los Derechos Humanos, suscripta por ese país.Fuente: Infobae.com</blockquote>

Verificación: Guerra desarrollada entre Argentina y el Reino Unido en 1982