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Mensaje: <blockquote data-quote="Guachingtom" data-source="post: 3567407" data-attributes="member: 70204"><h3><a href="https://www.themoscowtimes.com/2024/08/30/ukraines-kursk-incursion-has-exposed-russias-hollow-civic-identity-a86198">La incursión ucraniana en Kursk expone la vacía identidad cívica de Rusia</a></h3>La reacción de los rusos ante la ofensiva en la región de Kursk es muy similar a la que mostraron ante el motín de Yevgeny Prigozhin hace un año: una apatía total y la transferencia de la responsabilidad de resolver el problema a las autoridades federales y a las fuerzas del orden.Irónicamente, esta es la reacción pública que el propio Kremlin ha tratado de lograr con todas sus acciones durante los últimos 25 años y, especialmente, los últimos tres años. Sus esfuerzos han tenido como resultado que el ruso medio se vea completamente privado de subjetividad cívica y que cualquier manifestación de ésta sea inmediatamente castigada con sentencias penales o con la expulsión forzada del país bajo amenaza de prisión.<img src="https://static.themoscowtimes.com/image/article_1360/8a/boi_v_kurskoy_oblasti.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" />La operación en Kursk demostró que la identidad cívica es una formalidad para los rusos y que no se fortalece en tiempos de crisis. Ni siquiera los habitantes de la región de Kursk hicieron cola en las oficinas de alistamiento militar después de que Ucrania lanzara su ataque el 6 de agosto. Por lo tanto, sería extraño esperar que los hombres de la región de Zabaikalsky en Siberia, por ejemplo, hicieran cola para defender Kursk.Una de las crisis que ya afronta la sociedad rusa (y que volverá a estallar en otoño) es la creación de entre 100.000 y 200.000 desplazados internos, a los que los medios de comunicación rusos denominan, con ignorancia, “refugiados”.En Ucrania, al comienzo de la guerra ruso-ucraniana en 2014, vimos la misma confusión con la terminología. Se podría argumentar, basándose en la experiencia ucraniana: “Está bien, ya descubrirán cómo referirse a ellos correctamente, habrá tiempo suficiente para eso”. A corto plazo, los rusos desplazados no podrán regresar a sus hogares, tanto por los combates como por la destrucción (no solo por las fuerzas ucranianas) que la guerra está infligiendo a sus propiedades. El Kremlin ya está sintiendo la presión social, aunque moderada, y obviamente no sabe qué hacer con las personas que han tenido que abandonar sus hogares y sus medios de vida. La <a href="https://www.themoscowtimes.com/2024/08/13/russia-relocates-some-displaced-kursk-residents-to-occupied-ukraine-a86011">propuesta</a> sorprendentemente mal concebida de reasentar a los evacuados de Kursk en la parte ocupada de la región ucraniana de Zaporizhia confirma aún más esto.La cuenta regresiva para la meseta de estabilidad del régimen de Putin comenzó desde el momento del accidente aéreo de Prigozhin y la fallida contraofensiva ucraniana del verano de 2023. El objetivo era controlar el ritmo general de las operaciones de combate: el ejército ruso presionaba y sufría pérdidas, pero <a href="https://www.themoscowtimes.com/2024/08/20/what-we-know-about-russias-advances-in-ukraines-donetsk-region-a86089">avanzaba</a> en el Donbás. Cálculo puro y nada más: los territorios capturados se intercambiaban por las vidas de los soldados, que, a su vez, se compraban con petrodólares, en forma de pagos por la firma de un contrato. En el plan del Kremlin, Ucrania debía defenderse y ceder territorio poco a poco. Una condición esencial para mantener esta meseta políticamente fue la ausencia de una nueva ola de movilización y de grandes fracasos operativos por parte del ejército ruso.Los acontecimientos de Kursk han demostrado a todo el mundo (y sobre todo al Kremlin) que la estrategia elegida para reforzar el ejército ruso mediante incentivos predominantemente financieros no le permite acumular suficientes reservas estratégicas ni una ventaja en términos de efectivos sobre el ejército ucraniano. El reclutamiento en varios niveles (mediante <a href="https://www.themoscowtimes.com/2024/07/30/russian-regions-hike-military-sign-up-payments-in-bid-to-boost-manpower-for-ukraine-war-a85864">pagos</a> , indultos a criminales, obligar a los reclutas a firmar contratos, conceder la ciudadanía rusa a los ciudadanos extranjeros) sólo es suficiente para reponer las grandes pérdidas diarias (los llamados <a href="https://www.bbc.com/news/articles/c80xjne8ryxo">ataques de carne</a> ) y mantener el número actual de efectivos del ejército.Los actuales esfuerzos <a href="https://www.themoscowtimes.com/2024/05/21/how-russias-covert-mobilization-finds-manpower-for-the-war-in-ukraine-a85168">de movilización híbrida</a> no serán suficientes. Ya no han sido suficientes para el nuevo frente en la región de Kursk: hay que cerrarlo, ya sea a expensas de otras secciones del frente o pasando a acciones defensivas y entregando la iniciativa a las Fuerzas Armadas de Ucrania, o mediante una movilización forzada, como vimos en el otoño de 2022.Se tratará más bien de desplazamientos de familiares de reclutas, desplazados internos y sus familiares, habitantes de las regiones fronterizas que sienten las consecuencias cinéticas de la guerra y rusos que serían el objetivo de una segunda movilización masiva. En otras palabras, podríamos estar hablando de millones de rusos. Ni siquiera hace falta mencionar aquí los riesgos económicos y financieros inminentes; las razones ya citadas, que afectan directamente a la vida cotidiana de los rusos, son suficientes.Su carácter apolítico las hace aún más graves y peligrosas para el Kremlin, ya que involucran a segmentos muy amplios de la sociedad. Las primeras manifestaciones pueden ser grafitis esporádicos, obras musicales u otras formas de arte audiovisual, chistes y cambios en el discurso cotidiano relacionados con la percepción de Putin y su capacidad para dirigir el país y hacerlo avanzar.No en vano, el Kremlin está poniendo en <a href="https://www.themoscowtimes.com/2024/08/21/russia-blames-telegram-whatsapp-outage-on-cyberattack-as-experts-point-to-censorship-a86098">práctica</a> todo tipo de bloqueos de redes sociales y mensajeros. La razón principal no es sólo el deseo de proteger a la sociedad de la “influencia corrosiva de Occidente” y de la oposición rusa, sino también el de poner freno a los medios de comunicación rusos poco éticos. Incapaz de impedir la cristalización del descontento, el Kremlin intentará frenar su propagación. Intentará hacer lo mismo que hizo en las comunidades de redes sociales locales de la región de Kursk después de que Ucrania iniciara su ofensiva: borrar todos los comentarios negativos y advertir de la responsabilidad por nuevas publicaciones.De una forma u otra, esto se convertirá en una nueva realidad que tiene todas las posibilidades de multiplicarse: desde el ahora famoso canal de Telegram “Sudzha Native” a toda Rusia.[URL unfurl="true"]https://www.themoscowtimes.com/2024/08/30/ukraines-kursk-incursion-has-exposed-russias-hollow-civic-identity-a86198[/URL]</blockquote>

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