Transcribo el comentario de una amiga mía acerca del poema:
Lo primero que me viene a la mente es la inevitable inmortalidad del que hace algo heroico o recorre un camino trascendente... No hay forma de que Omar quede perdido en el pasado anónimo, YA ES parte de la historia, en la página de más reciente gloria...
Lo segundo, es el amor de madre... cada día las madres lo atravesamos todo... conocemos cada sentimiento porque ya lo recorrimos. No lo digo por falta de modestia, porque lo que falta agregar es que la mamá de Omar llegó a ese punto insuperable de la pèrdida. Eso no es para cualquiera, hay que tener fortaleza para dejar ir un hijo y esperar que vuelva... Y si no vuelve, hay que tener más todavía.
Despues se me ocurre pensar en los vecinos, los que lo conocieron a Omar en la vereda, el almacén, la escuela... Omar tocó sus vidas y cuando no volvió, volvió mas fuerte para darles quizá inspiración, pero seguro ORGULLO.
Es bueno rescatar del olvido, y mejor todavía retratar esa ausencia cotidiana, que se me ocurre sofocante, que lo atraviesa todo y que no tendrá ni fin ni cierre, y que es intransferible. La historia de Omar en este poema se arma, se desgrana y se recupera para que sacudamos la memoria: nadie que se fue, se fue solo, nadie que murió, se murió solo.. pero a aquellos que volvieron, los rescatamos del olvido, la indiferencia y la desmemoria?
Nada mas, cosas que se me inspiraron al leer este poema.