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Mensaje: <blockquote data-quote="nippur_1967" data-source="post: 1925376" data-attributes="member: 1952"><img src="http://www.dunken.com.ar/web2/tapas/2015/14241.JPG" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" />En 1982, durante la Guerra de Malvinas, el Servicio de Inteligencia Naval (SIN) de la Armada Argentina, organizó una operación de sabotaje en el puerto militar de Gibraltar. Para ello, envió al mediterráneo español a cuatro integrantes de un grupo para llevar a cabo un atentado con bombas submarinas al primer buque de guerra inglés que ingresara a la bahía de Algeciras. El hecho fue conocido después de la guerra como “Operación Algeciras” y se supo que en la operación participaron el capitán (RE) Héctor Rosales y tres ex – montoneros: Máximo Nicoletti, Diego Nelson Latorre y un cuarto que nunca trascendió la identidad y que fue conocido como “el marciano”. “Operación Gibraltar”, cuenta la historia verdadera en boca de uno de sus protagonistas, “el marciano”, que en realidad fue un soldado conscripto de Infantería de Marina, acusado de montonero y torturado en el Batallón de Comunicaciones de la Base Naval de Puerto Belgrano. El soldado Abel Adolfo Ojeda también participó el 2 de abril de 1982 en el Operativo Rosario a bordo del ARA Cabo San Antonio y luego fue destinado a Río Grande, Tierra del Fuego, para comenzar la “guerra electrónica”. De ese lugar desaparece y es obligado, bajo pena de muerte, a participar de la operación de sabotaje como si fuera un montonero. Una historia de vida y de dolor, de un joven soldado argentino que pudo superar muchas dificultades y rescatar los recuerdos del olvido. Abel Ojeda nació en San Lorenzo. En 1981 fue incorporado como soldado de Infantería de Marina por ley del Servicio Militar Obligatorio. Recibió instrucción en el Centro de Incorporación y Formación de Conscriptos de la Infantería de Marina (CIFIM), conocido como “el infierno verde”. Formó parte de la 4ta. Tanda 62 del Batallón 1 de Comunicaciones de la Fuerza de Apoyo Anfibio (FAPA) de la Base Naval de Puerto Belgrano. Participó de la recuperación de Malvinas el 2 de abril de 1982, luego fue destinado a la “guerra electrónica” en Río Grande, Tierra del Fuego y, finalmente, fue obligado a participar en una operación de alto riesgo en España, con el objetivo de atentar contra buques de guerra de Gran Bretaña. Fue dado de baja en setiembre de 1982. Apareció en listados provisorios de la Armada como ex – combatiente de Malvinas y recibió un diploma del Congreso de la Nación, después desapareció de las listas y nunca más fue reconocido como tal.</blockquote>

Verificación: Libertador de Argentina