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Mensaje: <blockquote data-quote="Rolando Lero" data-source="post: 1371958" data-attributes="member: 15908">Brasileño llega a Congo para liderar ‘tropa de élite’<img src="http://www.forte.jor.br/wp-content/uploads/2013/06/14944997.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" />DE La BBC BRASILEl general brasileño Carlos Alberto de Santos Cruz llega a la República Democrática de Congo esta semana para comandar la primera brigada militar con características de “fuerza de ataque” a tutear en una misión de paz de la ONU.Santos Cruz fue escogido para el puesto debido a su actuación al frente de la misión de paz de Haití entre 2007 y 2009 –periodo en que los cascos azules de las Naciones Unidas terminaron el proceso de pacificación de la capital Puerto Príncipe.Su misión de esa vez envuelve un potencial enfrentamiento directo con grupos rebeldes que se establecieron en el leíste de Congo – entre ellos el LRA (sigla del Ejército de Resistencia del Señor, del líder guerrillero Joseph Kony), la M23 (Movimiento 23 de Marzo) y el FDLR (sigla de Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda).El brasileño será el comandante general de una fuerza de casi 20 mil cascos azules establecida en 2010. Su principal desafío será lidar con el área leíste del país, aún no pacificada.Él tendrá a su disposición una unidad especial de 3.000 hombres, que viene siendo formada desde el mes pasado. Cuando esté completa, la Brigada de Intervención será formada por batallones de artillería, infantaria y de fuerzas especiales, además de una compañía de reconocimiento y helicópteros de ataque.Unidades de artillería y de fuerzas especiales ya fueron usadas dentro de contextos específicos de operaciones anteriores de la ONU –especialmente en Sudán (artillería) y en el propio Congo (fuerzas especiales).Sin embargo, en más de 60 años de misiones de paz, “esta es la primera vez que las Naciones Unidas establecen una brigada específica, dentro del contexto de una misión de paz mayor, para usar la fuerza”, segundo dijo a la BBC Brasil Andre Michel Essoungou, uno de los portavoces del Departamento de Misiones de Paz de la ONU.“La brigada podrá hacer acciones ofensivas teniendo como blanco grupos armados específicos que están arruinando el proceso de paz en el país”, afirmó.MISIONES DE PAZLas operaciones de paz de la ONU nacieron inicialmente con el objetivo genérico de monitorear acuerdos ya establecidos de cesar-fuego. Pero, en muchas regiones –como en África y en Haití, por ejemplo– las tropas de la ONU se depararam con situaciones de conflictos.Debido a la cambios en la naturaleza de esos conflictos –que en muchos casos dejaron de tener “líneas de frente” y asumieron características de la guerra de guerrilla–, las operaciones comenzaron a pasar por una tendencia de cementación. El cambio también fue en parte motivada, según analistas, por la tentativa fallida de un grupo de cascos azules de impedir el genocidio de Ruanda en 1994.Nuevas herramientas pasaron a ser utilizadas, tales como implementación de embargos y el envío de fuerzas milites cada vez más robustas para países en crisis.Hasta ahora, la Monusco (la misión de paz de la ONU en Congo) aparenta representar el ápice de esa tendencia. Ella fue establecida con un embasamento jurídico que permite a su comandante no sólo defender los operarios de la ONU y la población o revidar agresiones, pero también adoptar iniciativas ofensivas contra grupos rebeldes contrarios al gobierno.El texto de la resolución del Consejo de Seguridad que creó la Brigada de Intervención llega a decir que la unidad funcionará “en carácter excepcional, sin crear precedente o prejuicio contra los principios establecidos de misiones de paz”.ACUERDOLa creación de la Brigada de Intervención es sólo la faz militar de un esfuerzo general de las Naciones Unidas para restablecer la paz en el leíste de la República Democrática de Congo, especialmente en las áreas conocidas como Kivus.A pesar de la presencia de la Monusco en el país desde 2010, la región continúa prácticamente sin la presencia del Estado y es escenario de ondas de violencia, crisis humanitarias crónicas y serios abusos de derechos humanos – principalmente violaciones y violencia de género, que son usados como arma de combate, según la ONU.En febrero, 11 naciones africanas firmaron un tratado para colaborar con el fin de los enfrentamientos en el país. La acción diplomática viene siendo tratada por la ONU como una esperanza para la región de los Grandes Lagos. Eso porque la organización dice sospechar que el conflicto sería influenciado y financiado en parte por naciones vecinas.El caso más clásico es la sospecha de la ONU de que los gobiernos de Uganda y Ruanda hayan apoyado la M23, uno de los más fuertes grupos rebeldes de la región – que llegó a invadir Goma, la principal ciudad del leíste, el año pasado. Las dos naciones negaron las acusaciones y son signatárias del tratado.En el fin de mayo, el propio secretario-general de la ONU, Ban Ki-moon visitó la ciudad y clasificó el tratado como el “Cuadro de la Esperanza”. Según él, además de las acciones diplomática y militar, el Banco Mundial debe destinar cerca de US$ 1 bilhão (R$ 2 bilhões) para la creación de redes de protección social, desarrollo del comercio regional e inversiones en fuentes de energía e infraestrutura.“Ese acuerdo da a la población del leíste de la República Democrática de Congo su mejor oportunidad en muchos años de tener acceso a la paz, a los derechos humanos y al desarrollo económico”, dijo Ban en el fin de mayo.PREPARACIÓNLo Brasil no debe enviar tropas para la Brigada de Intervención, que será formada principalmente por militares de naciones africanas, tales como Sudáfrica, Tanzania, Malaui.A pesar de la unidad haber sido establecida en marzo, hasta ahora sólo una cuota de sus componentes llegó la Goma, donde su sede será establecida. Ella será directamente chefiada por un oficial subordinado al mando de Santos Cruz.El general brasileño estaba en la reserva del Ejército cuando fue invitado en abril para asumir el cargo. Él fue reincorporado a la fuerza y enviado a la sede de la ONU en Nueva York para pasar por un entrenamiento – que fue concluido el último viernes. Santos Cruz llegaría Kinshasa en la noche del último domingo.La invitación fue celebrada en el gobierno brasileño como un reconocimiento de la ONU al papel ejercido por el país en la misión de paz de Haití. En su esfuerzo para ampliar su prestigio internacional y obtener una vacante en el Consejo de Seguridad, lo Brasil mantiene tropas en operaciones en Haití y en Líbano.Pero, sólo un pequeño equipo de oficiales debe ser enviada a Congo con el general.Una de sus primeras tareas en el terreno será coordinar la formación de la Brigada de Intervención e insistir con los países participantes que los contingentes milites sean enviados el más rápido posible.Según analistas, él debe enfrentar resistencia de los grupos rebeldes. Portavoces del grupo M23 ya dijeron a la prensa internacional que responderán con “fuerza total” a un eventual ataque de la ONU.FUENTE: UOL/BBC Brasil vía Resenha del Ejército</blockquote>

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