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Mensaje: <blockquote data-quote="Barbanegra" data-source="post: 1497156" data-attributes="member: 10064"><img src="http://estaticos.elmundo.es/assets/multimedia/imagenes/2014/01/22/13904271479199.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /> El régimen sirio y la oposición inician el diálogoLa conferencia internacional por la paz en Siria concluyó ayer en Montreux como empezó: sin dar ninguna salida al conflicto que desangra el país desde hace tres años. La cumbre quedó marcada por las tensiones verbales entre el régimen de Bashar Asad y los miembros de la oposición siria, que se acusaron mutuamente de terrorismo. Era la primera vez que ambas partes se sentaban a la misma mesa.Aun así, esta conferencia no impidió que a partir de mañana, en Ginebra, ambos contendientes inicien negociaciones directas para tratar de lograr un gobierno de transición en Siria basado en un "entendimiento mutuo".El enfrentamiento verbal de ayer en Montreux entre el ministro de Exteriores sirio, Walid al Muallim, y el presidente de la Coalición Nacional Siria (el principal órgano de la oposición en el exilio), Ahmed Yarba, inicialmente pareció volver inútiles esas negociaciones, que ya estaban programadas. Finalmente, el diálogo directo superó las tensiones y se desarrollará de forma indefinida, con la mediación del representante especial de la ONU y la Liga Árabe, el argelino Lajdar Brahimi.El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov anunció que está trabajando, junto con EEUU y las Naciones Unidas, en acordar un intercambio de prisioneros. También se mostró positivo, al término de Montreux, en cuanto a los progresos para pactar un posible alto el fuego en la ciudad de Alepo, y quizá otras ciudades como Homs. Se trata de las propuestas presentadas hace unos días por el régimen de Asad y elogiadas por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.Tanto la delegación del Gobierno sirio como la de la Coalición Nacional Siria (CNS) acordaron basarse en el llamado comunicado de Ginebra I, que en junio de 2012 estableció un programa de transición para acabar con la guerra civil en su país, empezando por el gobierno de entendimiento mutuo "con plenos poderes ejecutivos".La exclusión de AsadSegún sostuvieron ayer en Montreux la CNS y el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, ese gabinete no debería incluir al actual presidente sirio, Bashar Asad, quien tendría que traspasar al nuevo ejecutivo todas sus atribuciones, incluyendo las de materia militar y de seguridad. Sin embargo, el actual Gobierno de Damasco se opone a que las negociaciones de Ginebra empiecen con un compromiso de una renuncia por parte de Asad, quien relevó como jefe de Estado a su padre, Hafez, fallecido en 2000.Mientras, Ban admitió que "la lucha contra el terrorismo", alegada por el régimen de Asad como justificación de su campaña militar contra los rebeldes, es, en teoría, "una tarea muy importante". Aunque añadió: "Todas las partes tienen que poner fin a los ataques terroristas".Al clausurar, como anfitrión, la conferencia de Montreux, Ban apeló al régimen y a la oposición a mostrar en las inminentes negociaciones directas "un profundo sentido de urgencia", un "espíritu de compromiso", así como "determinación". "¡Que acabe inmediatamente la violencia", añadió el secretario general de la ONU.'Un cambio pacífico'"Ya es hora de negociar y encontrar un camino pacífico", agregó. Ban recordó lo que ya se rubricó en el comunicado de Ginebra I (posteriormente confirmado por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU), que advierte de que para terminar con la guerra civil siria "no hay una solución militar". Esta visión fue compartida en Montreux por el jefe de la diplomacia española, José Manuel García-Margallo, quien sugirió la transición española como un ejemplo exitoso para Siria.Poco antes de que finalizara la conferencia de Montreux, ayer por la tarde, tanto el ministro de Exteriores sirio, como el presidente de la CNS pronunciaron algunas palabras un poco conciliadoras, de cara a las conversaciones de mañana."Queremos poner fin al baño de sangre en Siria", declaró por ejemplo Mualim. "Por eso estamos aquí. Confiamos en que la conferencia de Ginebra sea un primer paso", concluyó. Por su parte, Yarba afirmó que hay que "detener la espiral de violencia", y "abrir la vía de las negociaciones". Aun así, el mismo presidente de la CNS solicitó una "investigación internacional independiente en los lugares de detención2, para comprobar las recientes acusaciones de un grupo de juristas extranjeros, que presentó un informe que documenta torturas y ejecuciones de unos 11.000 prisioneros por parte del régimen de Asad.Guiado por la cautela, Ban Ki-moon advirtió de que "no se esperan resultados al instante" en Ginebra.<a href="http://www.elmundo.es/internacional/2014/01/22/52e03b10268e3ee2708b4583.html">http://www.elmundo.es/internacional/2014/01/22/52e03b10268e3ee2708b4583.html</a></blockquote>

Verificación: Guerra desarrollada entre Argentina y el Reino Unido en 1982