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<blockquote data-quote="Delfin" data-source="post: 778618" data-attributes="member: 2582"><p><strong>El .40 Smith & Wesson</strong></p><p></p><p style="text-align: center"><span style="font-size: 15px">40 Smith & Wesson</span></p> <p style="text-align: center">Una nueva opción en calibres de defensa</p><p></p><p style="text-align: right">por Rolando Mendez</p><p></p><p></p><p></p><p><em>Rolando es un verdadero experto en RECARGA de cartuchos y un muy buen amigo (virtual). Actualmente está radicado en Israel y tiene experiencia en el campo policial (Israel)</em></p><p><em>Con tiempo iremos subiendo algo sobre BALÍSTICA (especialmete balística externa y terminal) y algunos se sorprenderán del calibre .40 S&W (que en muchos aspectos supera al .45 ACP)</em></p><p></p><p>En comparación con otras ramas de la tecnología moderna como la informática, donde lo que es nuevo hoy, en seis meses casi es obsoleto, la tecnología en materia de armas maneja tiempos más extensos. En este contexto, se puede decir que un calibre con diez o doce años de vida, recién ha comenzado a gatear.</p><p></p><p style="text-align: center"><img src="http://upload.wikimedia.org/wikipedia/en/7/78/357Sig10mm40sw.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /></p> <p style="text-align: center">Izq: 357 SIG - Med: 10mm - Der: .40S&W</p><p></p><p style="text-align: left">La necesidad del hombre de mejorar los recursos disponibles para una determinada función, induce en estos tiempos a la experimentación constante. Si el ingenio desarrollado, a su vez es exitoso económicamente, que es en definitiva el fin buscado, entonces estamos hablando de un éxito rotundo.</p><p></p><p style="text-align: left">El cartucho del que hablare hoy reúne, además de ser un buen producto, los más modernos métodos de comercialización junto a un excelente sentido de la oportunidad de dos grandes empresas del rubro. Me refiero al .40 Smith & Wesson.</p><p></p><p style="text-align: left">No es nueva la idea de usar munición con un diámetro de punta de 10 mm con fines defensivos o como arma de dotación de fuerzas policiales. Sin ir tan atrás en el tiempo, ya en el año 1964 el 41 Remington Magnum hace su aparición para tentar a las fuerzas de la ley a adoptarlo. Por diferentes razones, que no son motivo de esta nota, no tuvo el éxito que merecía tener tan buen cartucho.</p><p></p><p style="text-align: left">Diseñadores americanos y la IMI de Israel también probaron suerte con su .41 Action Express, Ahora de la mano de una pistola, la Jericó, que vieron la luz en 1987. Tampoco tuvo el éxito esperado, teniendo en cuenta que muchos de los aspectos constructivos del 41 AE son los que han llevado al 40 S&W a ser un éxito.</p><p></p><p style="text-align: left">Pero pocos años antes, para 1982, un cierto número de aficionados estadounidenses junto a la firma Dornaus & Dixon, conciben la idea de diseñar un nuevo cartucho con una punta de calibre 10 mm, animado de una velocidad tal, que entregue una energía superior a todos los calibres medianos hasta ese momento considerados clásicos y que pueda ser disparado desde un arma semiautomática.</p><p></p><p style="text-align: left">Con la colaboración de la firma sueca Norma, para 1983 el 10mm. Auto vio la luz de la mano de la pistola Bren Ten, una especie de CZ 75 adaptada y reforzada para soportar las más altas presiones del nuevo producto. La Bren Ten fue un fracaso, y parecía que el 10 mm Auto moriría como un desarrollo mas entre tantos otros. Sin embargo, el impulso que le dio la Colt con la puesta en el mercado de una pistola del estilo Government 1911 reforzada, la Delta Elite, parecía reflotar al alicaído desarrollo. El producto Colt tampoco tuvo éxito y se reportaron fallas en las pistolas.</p><p></p><p style="text-align: left">Pero para fines de 1986, se produce un hecho delictivo terrible, denominado la Masacre de Miami, en la cual varios agentes del FBI se enfrentaron a dos delincuentes fuertemente armados, con sus pistolas 9 Para, sus revólveres 38 Special y escopetas 12/70. Sin entrar en detalles sobre este episodio, una de las consecuencias del mismo fue la decisión del FBI de adoptar un sistema de armas que cubriera las deficiencias demostradas por las, hasta ese momento, armas de dotación.</p><p></p><p style="text-align: left">Luego de los estudios correspondientes, el 10 Auto fue el calibre adoptado. Sin embargo la experiencia de campo determino que por su fuerte retroceso y el tamaño de la empuñadura, el 10 era difícil de manejar para una buena parte de los agentes, sobre todo aquel personal de manos pequeñas. Para solucionar esto el FBI solicito el desarrollo de munición con prestaciones reducidas, denominándose esta carga 10mm Auto FBI o 10 Auto Lite.</p><p></p><p style="text-align: left">Ahora bien, el cartucho mantenía sus dimensiones originales, obligando a las armas que lo disparaban a poseer un tamaño considerable. La disminución de prestaciones hizo del calibre algo más manejable pero los usuarios de manos pequeñas seguían con problemas. La ventaja o desventaja de contar con un cartucho sobredimensionado hizo que una de las fabricas más grandes de armas cortas, la Smith & Wesson, considerara la posibilidad de diseñar un cartucho que entregara las prestaciones del 10 Auto Lite, con un diseño de vaina tal que permitiera ser disparado desde armas ya desarrolladas para calibres de menores dimensiones, como el 9mm Parabellum. La idea resulto a tal punto interesante, que para 1989 la Smith se asocia en este proyecto con la Winchester, una para diseñar el cartucho y la otra el arma que lo disparara.</p><p></p><p style="text-align: left">En enero de 1990, se presenta por primera vez al publico en general, la pistola Smith & Wesson modelo 4006, junto al nuevo cartucho, el .40 Smith & Wesson. Su aparición en el Shot Show de ese año provoca un suceso. La posibilidad de contar con un cartucho capaz de entregar prestaciones mayores a un .45 ACP desde armas con el tamaño de una 9 Para, fue un gran acierto, ya que cubrió una brecha entre la alta capacidad de las wondernines, y las contundentes .45 ACP con una pequeña cantidad de munición en sus cargadores. Si tenemos en cuenta que una 9 Para podía albergar entre 15 y 17 cartuchos en forma estándar, mientras que una 45 ACP clásica, estaba en los 7, las nuevas cuarenta ofrecían cargadores con capacidades entre 12/13 cartuchos, y la contundencia del viejo cuatro y medio.</p><p></p><p style="text-align: left">Las demás fabricas de armas no tardaron en presentar modelos para el calibre, ya que las características del nuevo cartucho no exigían el desarrollo de nueva tecnología a la ya existente, pudiéndose utilizar armazones y correderas similares a las ya conocidas pistolas 9 mm. En el éxito del cuarenta contribuyo el hecho de que las principales fabricas de municiones también comenzaron con la producción de munición para el calibre.</p><p></p><p style="text-align: left">Muchos departamentos de policía en los Estados Unidos vieron con agrado el nacimiento del cuarenta, adoptándolo como calibre de dotación. Además, la posibilidad de contar con variados tipos de puntas, en cuanto a forma y peso, hizo que muchos civiles en el país del norte modificaran sus preferencias hacia el, utilizándolo como calibre defensivo, o para actividades deportivas, como el Tiro Practico, donde se puede obtener factor mayor sin inconvenientes.</p><p></p><p style="text-align: left">Con las facilidades en el ingreso de artículos importados vividos por los tiradores locales durante la década pasada, el cuarenta ingreso al país y fue aceptado por un alto número de tiradores, en mayor medida, de los principiantes. El hecho de que una fabrica nacional como Bersa pusiera en el mercado a su modelo Thunder en calibre cuarenta, también favoreció a los fierreros autóctonos, ya que nos dio la posibilidad de conseguir una buena pistola a un precio accesible.</p><p></p><p style="text-align: left">En la introducción de esta nota, comentaba sobre una adecuada política de comercialización de dos grandes de la industria de las armas, unido a la puesta en el mercado de un producto que llenaba una brecha existente, merced a sus prestaciones y características. Pero ¿cuales son esas características?</p><p></p><p></p><p></p><p style="text-align: center"><img src="http://www.fullaventura.com/municiones/fotos/nota102121_1.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /></p><p></p><p></p><p></p><p>Las prestaciones de la munición que fue presentada en 1990 estaba conformada por una punta de calibre .40 (10.16 mm) de forma troncocónica de 180 grains de peso, animada de una velocidad en la boca de fuego de entre 950/970 pies / segundo, con una energía aproximada de 368 libras / pie. La principal razón que le permite al cuarenta ser disparado desde armas similares al 9 Para, lo constituye el diseño de su vaina, que en esencia es una vaina del 10 mm Auto, con un largo menor (21.59 mm) y el cambio en el uso de fulminantes del tipo Small Pistol standard, en lugar de los Large Pistol utilizados por el calibre del que deriva.</p><p></p><p>La vaina es del tipo rimless, ósea que no posee reborde, y el diámetro del mismo es ligeramente mayor al reborde de una vaina 9 Para, mientras que sus paredes son rectas, ya que la diferencia de diámetro entre cuello y base es despreciable. A partir del éxito logrado durante su aparición, las diferentes fabricas de munición comenzaron a producir variantes, sobre todo con la utilización de puntas de menor peso: hoy en día hay disponible puntas cuyo peso varia entre los 155 a los 170 grains. En pesos mayores, se pueden encontrar puntas con peso de 200 grains. Con las puntas más livianas, las velocidades aumentan hasta casi convertirlo en un 357 Magnum, rondando velocidades de unos 1200 pies / segundo.</p><p></p><p>En cuanto a balística exterior, las características propias lo ubican entre el 9 Para y el 45 ACP. Su punta de mayor diámetro, de forma troncocónica, y animada de menores o similares velocidades al calibre alemán, no le confiere una trayectoria tan tendida, mientras que con respecto al cuarenta y cinco sale mejor parado en este aspecto. Por el diseño de las puntas el principal punto que se tuvo en cuenta, es la balística terminal.</p><p></p><p>Todas las fabricas de puntas producen algún modelo de punta deformable, existiendo una amplia variedad. La punta que menos se utiliza a nivel mundial (menos en Argentina) es la del tipo TMJ o totalmente encamisada. Si bien estas presentan una muy buena superficie frontal, el hecho de ser prácticamente indeformable no favorece el uso con fines defensivos.</p><p></p><p>El cuarenta fue diseñado con la mente puesta en las fuerzas del orden, y como calibre de defensa para civiles. Como dije antes, lleno una especie de vacío que existía entre los tradicionales cartuchos de pistola utilizados con este propósito, tratando de reunir las mejores cualidades de ambos. Buen poder de parada unida a una mas que respetable capacidad de fuego. Estas ventajas lo posicionarón muy fuerte en el ámbito policial, sobre todo en el país del que es oriundo.</p><p></p><p>En particular en nuestro país, se ha incrementado muchísimo el número de tiradores que han adoptado al mismo, así como también muchos nuevos fierreros que hacen sus primeras experiencias con él. Sin embargo como medio defensivo de un usuario de nuestro país, y a pesar de que ha superado a varios desarrollos anteriores, me parece que aún existen mejores opciones, por lo menos hasta que se modifique la prohibición que nos impone el gobierno al uso de puntas deformables para defensa. Talves muchos que lean esto no estarán de acuerdo conmigo, y me parece perfecto que así sea. Lo arriba escrito es solo mi falible opinión.</p><p></p><p>Como cartucho de uso deportivo, se mostró adecuado para ser usado en la modalidad de Tiro Práctico, ya que la posibilidad de contar con un arma con un respetable poder de fuego, mas la capacidad del cartucho de rendir factor mayor sin inconvenientes, es una atractiva opción para el que se inicie en esta disciplina. Es probable que no sea la mejor opción para tiradores de primer nivel en las categorías mas exigentes y competitivas, ya que existe cartuchería que permite un mayor número de munición en cargador o prestaciones balísticas superiores.</p><p></p><p>La corta vida del cuarenta no permite evaluar como se comportaría como cartucho de caza y en lo personal, creo que más allá de tener una energía suficiente como arma de remate, ninguna pistola salvo específicos modelos monotiro, podrá superar al revolver en esta materia. No tengo experiencia con armas largas desarrolladas para este cartucho, por lo que el rendimiento en caños largos para mí, es una incógnita. De todas maneras, no me parece que sea una opción a tener en cuenta, habiendo en el mercado diseños mucho mejores que se adaptan a esta modalidad.</p><p></p><p>La inexistente producción de munición factory por parte de fabricas nacionales, obliga al usuario del mismo a utilizar munición factory de origen importado, valuada en dólares, o a adquirir las recargas comerciales que se venden cada vez mas en los polígonos del país. La otra opción, por supuesto es la de recargar en forma artesanal nuestra propia munición. Afortunadamente en nuestro ámbito pueden encontrarse todos los insumos necesarios para tal fin, sin que el desabastecimiento ni precios desorbitantes nos lo hagan prohibitivo.</p><p></p><p>Lo primero que hay que tener en cuenta al recargar al cuarenta es que el mismo es un cartucho que trabaja con altas presiones. Los beneficios que brindan el tener una vaina de largo reducido, en contrapartida proveen al cartucho de una pequeña cámara de combustión. Sumado al hecho de que las puntas, aun las más livianas, presentan una masa importante. De acuerdo a las normas Saami, la presión máxima admisible es de 35000 psi.</p><p></p><p>Una idea de la elevada presión en que el cuarenta trabaja la da el hecho que 35000 psi es la presión máxima del 357 magnum y del 9mm Parabellum, mientras que el 44 Remington Magnum tiene una máxima de 36000 psi. A pesar de no llevar un registro exhaustivo que pruebe lo que digo, no creo equivocarme al decir que este cartucho no se caracteriza por ser tolerable a fallas en la recarga o pequeños defectos del arma.</p><p></p><p>El mayor índice de roturas o problemas en armas cortas, por lo menos en el ámbito en que me muevo, lo tienen los sistemas de armas de este calibre. Creo que, como decimos los que también gustamos de los autos, a los diseñadores "se le fue la mano cuando le tocaron las levas", es por eso que cualquier error puede producir desde desgaste prematuro del arma, hasta un accidente.</p><p></p><p>Estimo que para asegurar una buena alimentación, las rampas de alimentación que ayudan al cartucho a introducirse en recamara dejan parte del cuerpo de la vaina sin retención, debiendo las mismas soportar el esfuerzo al momento del disparo. Este sistema es utilizado por el 45 ACP desde hace mas de 90 años sin problemas, pero debemos tener en cuenta que la presión máxima de este viejo cartucho es unos 14000 psi menor, por lo tanto no es tan critico este punto.</p><p></p><p>En el cuarenta, cualquier error en el uso de vainas que no estén en condiciones optimas puede acarrear la rotura de la misma especialmente en ese sector libre de la contención de la recamara. De no mantenerse el retardo del cierre del arma unido hasta que las presiones hayan descendido a niveles tolerables pueden provocar un problema similar al anterior.</p><p></p><p>Si bien todas estas recomendaciones son validas para toda arma y cartucho que se disparen en una pistola, el cuarenta es particularmente sensible a este tipo de fallas. Por ello sugiero que se vigile con mucho mas detalle el estado de los resortes recuperadores, así como cualquier síntoma que indique desgaste de caño y el buen estado de la rampa de alimentación del mismo. He tenido oportunidad de apreciar vainas disparadas con deformaciones considerables sobre la porción inmediatamente anterior a la ranura de extracción, esto puede provocar dos problemas: el primero tiene que ver con el hecho de que la vaina pierde vida útil por debilitamiento de material, debido a sucesivas contracciones y expansiones fuera de lo normal.</p><p></p><p>El segundo, talves mas aislado pero que puede darse, es el que se puede producir al pasar a la vaina por el die de recalibrado, produciéndose algo así como él "arrugue" de la porción de la vaina que esta sobreexpandida, lo que da por resultado una vaina inutilizada. Por eso no estaría de mas revisar las vainas, no solo antes de la primera operación de recarga, sino también después.</p><p></p><p>Una de las diferencias entre el cuarenta y su antecesor el 10 Auto, es el uso por parte del primero de fulminantes del tipo Small Pistol. Por las cantidades de propelente a usar no considero necesario usar los del tipo magnum, y no conozco ninguna tabla de recarga que lo aconseje. Por lo tanto, el hecho de usar un fulminante magnum no nos asegura la generación de mejores prestaciones. Lo que sí puede producir este tipo de fulminantes es un aumento indeseable en la presión de trabajo, lo que en este calibre se torna muy peligroso. Por lo tanto sugiero que se utilice solamente el fulminante recomendado por tabla.</p><p></p><p>Las pólvoras que mejor trabajan con el 40 son las de quemado medio para armas cortas. Por supuesto que se pueden usar propelentes rápidos, pero no proporcionaran las mejores prestaciones, y tratar de alcanzarlas con ellas no es lo más aconsejable. En general las pólvoras que se consiguen con estas características son de origen importado, ya que las de origen nacional no son fáciles de conseguir a no ser que alguien nos la consiga o tengamos alguna otra manera de hacernos con un poco de ella. En si esto es una desventaja, si lo que buscamos son prestaciones topes. De todas maneras para los que tengan la posibilidad o los medios de valerse de pólvora importada mi recomendación es:</p><p></p><p></p><p></p><p></p><p>Alliant </p><ul> <li data-xf-list-type="ul"><u><span style="color: #990000">Blue Dot:</span></u> Si bien esta pólvora ya se ubica dentro del segmento de propelentes medio-lentos, en el cuarenta trabaja muy bien con puntas livianas y pesadas.</li> <li data-xf-list-type="ul"><u><span style="color: #990000">Power Pistol:</span></u> Esta pólvora es de nuevo desarrollo y esta especialmente proyectada para ser usada en calibres como el 40, el 357 Sig y en menor medida el 9 Para.</li> <li data-xf-list-type="ul"><u><span style="color: #990000">Unique:</span></u> Es la mas rápida de las tres pero, sin llegar a proporcionar prestaciones máximas, es una buena opción para recargas potentes. Talves el único problema que presenta puede ser cierta dificultad al dispensar la misma en tolva. La misma tiende a "corta el grano". Esto puede producir diferencias en los pesos de las cargas, que en cargas máximas puede resultar peligroso.</li> </ul><p>Accurate</p><ul> <li data-xf-list-type="ul"><u><span style="color: #990000">N° 5:</span></u> Es un poco rápida para el calibre. Generara prestaciones buenas sin ser las mejores. Por ser una pólvora esférica, es de fácil tirada en tolva. Es importante tener cuidado porque el volumen de una misma carga es reducido con respecto al mismo volumen de otro tipo de propelentes y puede provocar nuestro error con una doble carga.</li> <li data-xf-list-type="ul"><u><span style="color: #990000">N° 7:</span></u> A pesar de ser mas lenta que la anterior, las prestaciones no serán las máximas a niveles normales de presión. Rigen las mismas precauciones que para la pólvora anterior.</li> </ul><p>Winchester</p><ul> <li data-xf-list-type="ul"><u><span style="color: #990000">231:</span></u> Es una pólvora rápida para el calibre, y entregara prestaciones similares a la Accurate N° 5.</li> </ul><p>Lamentablemente no tengo experiencia con otras pólvoras de esta marca para la recarga de este cartucho.</p><p></p><p>En materia de pólvoras nacionales, no existe tanta variedad. A este hecho debemos sumarle que no es fácil conseguir los distintos tipos de propelentes que se producen en nuestro país, es por eso que en el caso del cuarenta no se podrá recargar con la pólvora nacional que mejor rendimiento entregue, sino con la que se consiga. En este momento la A2 es el propelente más común de conseguir. A pesar de no ser lo mejor, se puede obtener resultados aceptables, sobre todo teniendo en cuenta la diferencia de costos que podremos ahorrar con relación a pólvoras de origen importado.</p><p></p><p>Como comente arriba, todas las fabricas de puntas de primera línea en el ámbito mundial comercializan productos para este calibre. En general están pensadas con el propósito de proporcionar la mejor balística de efectos para ser usadas en defensa personal. Y también debo decir que estas puntas son con las que menos experiencia tengo. Esto se debe a su costo, el cual es demasiado alto para dispararle a un cartón en el Club.</p><p></p><p>Mas allá de consumir unos tiros para medir velocidad y precisión, las puntas que he usado son las nacionales confeccionadas en plomo con cobertura de teflón, de 180 grains de peso. También he usado para tirar en el polígono, unas puntas electrolíticos de forma redondeada, similares a las clásicas que monta el 45 ACP. Creo que para el tirador que gusta de consumir una cierta cantidad de munición en forma periódica, estas son las opciones a tener en cuenta, dejando el uso de las puntas importadas para usos específicos.</p><p></p><p>Al momento de colocar la punta en la recarga hay dos ítems a tener en cuenta:</p><p>El primero tiene que ver con el hecho de que, como en muchos otros calibres de pistola, el asentamiento de la munición en recamara se produce sobre la boca de la vaina, contra el escalón que la recamara posee. Es por ello que no se debe efectuar ningún tipo de doblado sobre esta parte de la vaina, como el producido por el Roll Crimp. Las encargadas de sostener firmemente a la punta serán las paredes de la vaina, en la porción en que estas estén en contacto con el futuro proyectil. Este tipo de cierre se denomina Tapper Crimp.</p><p></p><p>El segundo punto a tener en cuenta tiene que ver con la profundidad con que coloquemos a la punta en la vaina. Las dimensiones de la vaina son pequeñas, y cualquier error en este punto puede hacer que la presión de trabajo se eleve a niveles peligrosos, y más teniendo en cuenta que este calibre es sensible con este tema. La profundidad correcta estará dada por lo mas alta que esta se pueda colocar siempre y cuando no se exceda ni el largo nominal máximo del cartucho terminado, o se comprometa el correcto manejo en el cargador, lo que puede producir problemas de alimentación. Es por eso que no me parece recomendable recargar al cuarenta con puntas de mas de 180 grains de peso.</p><p></p><p>Si bien existen puntas más pesadas, para que estas puedan alimentar bien, se debe introducir profundamente dentro de la vaina, reduciendo la capacidad de la misma para contener pólvora, y las prestaciones que se pueden obtener de este tipo de recargas son muy bajas.</p><p></p><p></p><p>Final </p><p></p><p>Hoy, los tiradores locales hablan sobre el cuarenta de la misma manera que lo hacen sobre otros calibres con muchísima más historia, y que están desde hace mucho tiempo arraigados en los círculos fierreros en nuestro país. Talves varios de los problemas o puntos discutibles de este nuevo calibre sean con el tiempo solucionados, como ha pasado con tantos otros cartuchos de arma larga y corta.</p><p></p><p>Tal vez sea el equilibrio entre aquellos que piensan que lo importante es la velocidad, y los otros que piensan en proyectiles pesados. De lo que sí estoy seguro, es que el 40 Smith & Wesson se ha convertido en el poco tiempo de vida que posee en un éxito total, dentro y fuera de los ámbitos para el que fue creado.</p><p></p><p style="text-align: left">Vaina - Fulminante - Punta / Peso - Pólvora / Peso - Velocidad</p> <p style="text-align: left">Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - Unique 6.7 grains - 1000 p/s</p> <p style="text-align: left">Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - Accurat 7 9.6 grains - 943 p/s</p> <p style="text-align: left">Remington - Winch SPS Teflón 180 grains - Blue Dot 9 grains - 1003 p/s</p> <p style="text-align: left">Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - A2 4 grains - 939 p/s</p> <p style="text-align: left">Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - A2 - 4,4 grains - 968 p/s</p><p></p><p>Estas cargas fueron disparadas desde una pistola Whalter P99. Ninguna carga mostró signos de sobrepresión. De todas maneras se sugiere usar estos datos solo como referencia y con precaución.</p><p></p><p><img src="http://farm3.static.flickr.com/2164/2318074275_fbf413e1fc.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /></p></blockquote><p></p>
[QUOTE="Delfin, post: 778618, member: 2582"] [b]El .40 Smith & Wesson[/b] [CENTER][SIZE=4]40 Smith & Wesson[/SIZE] Una nueva opción en calibres de defensa[/CENTER] [RIGHT]por Rolando Mendez[/RIGHT] [I]Rolando es un verdadero experto en RECARGA de cartuchos y un muy buen amigo (virtual). Actualmente está radicado en Israel y tiene experiencia en el campo policial (Israel)[/I] [I]Con tiempo iremos subiendo algo sobre BALÍSTICA (especialmete balística externa y terminal) y algunos se sorprenderán del calibre .40 S&W (que en muchos aspectos supera al .45 ACP)[/I] En comparación con otras ramas de la tecnología moderna como la informática, donde lo que es nuevo hoy, en seis meses casi es obsoleto, la tecnología en materia de armas maneja tiempos más extensos. En este contexto, se puede decir que un calibre con diez o doce años de vida, recién ha comenzado a gatear. [CENTER][IMG]http://upload.wikimedia.org/wikipedia/en/7/78/357Sig10mm40sw.jpg[/IMG] Izq: 357 SIG - Med: 10mm - Der: .40S&W[/CENTER] [LEFT]La necesidad del hombre de mejorar los recursos disponibles para una determinada función, induce en estos tiempos a la experimentación constante. Si el ingenio desarrollado, a su vez es exitoso económicamente, que es en definitiva el fin buscado, entonces estamos hablando de un éxito rotundo.[/LEFT] [LEFT]El cartucho del que hablare hoy reúne, además de ser un buen producto, los más modernos métodos de comercialización junto a un excelente sentido de la oportunidad de dos grandes empresas del rubro. Me refiero al .40 Smith & Wesson.[/LEFT] [LEFT]No es nueva la idea de usar munición con un diámetro de punta de 10 mm con fines defensivos o como arma de dotación de fuerzas policiales. Sin ir tan atrás en el tiempo, ya en el año 1964 el 41 Remington Magnum hace su aparición para tentar a las fuerzas de la ley a adoptarlo. Por diferentes razones, que no son motivo de esta nota, no tuvo el éxito que merecía tener tan buen cartucho.[/LEFT] [LEFT]Diseñadores americanos y la IMI de Israel también probaron suerte con su .41 Action Express, Ahora de la mano de una pistola, la Jericó, que vieron la luz en 1987. Tampoco tuvo el éxito esperado, teniendo en cuenta que muchos de los aspectos constructivos del 41 AE son los que han llevado al 40 S&W a ser un éxito.[/LEFT] [LEFT]Pero pocos años antes, para 1982, un cierto número de aficionados estadounidenses junto a la firma Dornaus & Dixon, conciben la idea de diseñar un nuevo cartucho con una punta de calibre 10 mm, animado de una velocidad tal, que entregue una energía superior a todos los calibres medianos hasta ese momento considerados clásicos y que pueda ser disparado desde un arma semiautomática.[/LEFT] [LEFT]Con la colaboración de la firma sueca Norma, para 1983 el 10mm. Auto vio la luz de la mano de la pistola Bren Ten, una especie de CZ 75 adaptada y reforzada para soportar las más altas presiones del nuevo producto. La Bren Ten fue un fracaso, y parecía que el 10 mm Auto moriría como un desarrollo mas entre tantos otros. Sin embargo, el impulso que le dio la Colt con la puesta en el mercado de una pistola del estilo Government 1911 reforzada, la Delta Elite, parecía reflotar al alicaído desarrollo. El producto Colt tampoco tuvo éxito y se reportaron fallas en las pistolas.[/LEFT] [LEFT]Pero para fines de 1986, se produce un hecho delictivo terrible, denominado la Masacre de Miami, en la cual varios agentes del FBI se enfrentaron a dos delincuentes fuertemente armados, con sus pistolas 9 Para, sus revólveres 38 Special y escopetas 12/70. Sin entrar en detalles sobre este episodio, una de las consecuencias del mismo fue la decisión del FBI de adoptar un sistema de armas que cubriera las deficiencias demostradas por las, hasta ese momento, armas de dotación.[/LEFT] [LEFT]Luego de los estudios correspondientes, el 10 Auto fue el calibre adoptado. Sin embargo la experiencia de campo determino que por su fuerte retroceso y el tamaño de la empuñadura, el 10 era difícil de manejar para una buena parte de los agentes, sobre todo aquel personal de manos pequeñas. Para solucionar esto el FBI solicito el desarrollo de munición con prestaciones reducidas, denominándose esta carga 10mm Auto FBI o 10 Auto Lite.[/LEFT] [LEFT]Ahora bien, el cartucho mantenía sus dimensiones originales, obligando a las armas que lo disparaban a poseer un tamaño considerable. La disminución de prestaciones hizo del calibre algo más manejable pero los usuarios de manos pequeñas seguían con problemas. La ventaja o desventaja de contar con un cartucho sobredimensionado hizo que una de las fabricas más grandes de armas cortas, la Smith & Wesson, considerara la posibilidad de diseñar un cartucho que entregara las prestaciones del 10 Auto Lite, con un diseño de vaina tal que permitiera ser disparado desde armas ya desarrolladas para calibres de menores dimensiones, como el 9mm Parabellum. La idea resulto a tal punto interesante, que para 1989 la Smith se asocia en este proyecto con la Winchester, una para diseñar el cartucho y la otra el arma que lo disparara.[/LEFT] [LEFT]En enero de 1990, se presenta por primera vez al publico en general, la pistola Smith & Wesson modelo 4006, junto al nuevo cartucho, el .40 Smith & Wesson. Su aparición en el Shot Show de ese año provoca un suceso. La posibilidad de contar con un cartucho capaz de entregar prestaciones mayores a un .45 ACP desde armas con el tamaño de una 9 Para, fue un gran acierto, ya que cubrió una brecha entre la alta capacidad de las wondernines, y las contundentes .45 ACP con una pequeña cantidad de munición en sus cargadores. Si tenemos en cuenta que una 9 Para podía albergar entre 15 y 17 cartuchos en forma estándar, mientras que una 45 ACP clásica, estaba en los 7, las nuevas cuarenta ofrecían cargadores con capacidades entre 12/13 cartuchos, y la contundencia del viejo cuatro y medio.[/LEFT] [LEFT]Las demás fabricas de armas no tardaron en presentar modelos para el calibre, ya que las características del nuevo cartucho no exigían el desarrollo de nueva tecnología a la ya existente, pudiéndose utilizar armazones y correderas similares a las ya conocidas pistolas 9 mm. En el éxito del cuarenta contribuyo el hecho de que las principales fabricas de municiones también comenzaron con la producción de munición para el calibre.[/LEFT] [LEFT]Muchos departamentos de policía en los Estados Unidos vieron con agrado el nacimiento del cuarenta, adoptándolo como calibre de dotación. Además, la posibilidad de contar con variados tipos de puntas, en cuanto a forma y peso, hizo que muchos civiles en el país del norte modificaran sus preferencias hacia el, utilizándolo como calibre defensivo, o para actividades deportivas, como el Tiro Practico, donde se puede obtener factor mayor sin inconvenientes.[/LEFT] [LEFT]Con las facilidades en el ingreso de artículos importados vividos por los tiradores locales durante la década pasada, el cuarenta ingreso al país y fue aceptado por un alto número de tiradores, en mayor medida, de los principiantes. El hecho de que una fabrica nacional como Bersa pusiera en el mercado a su modelo Thunder en calibre cuarenta, también favoreció a los fierreros autóctonos, ya que nos dio la posibilidad de conseguir una buena pistola a un precio accesible.[/LEFT] [LEFT]En la introducción de esta nota, comentaba sobre una adecuada política de comercialización de dos grandes de la industria de las armas, unido a la puesta en el mercado de un producto que llenaba una brecha existente, merced a sus prestaciones y características. Pero ¿cuales son esas características?[/LEFT] [CENTER][IMG]http://www.fullaventura.com/municiones/fotos/nota102121_1.jpg[/IMG][/CENTER] Las prestaciones de la munición que fue presentada en 1990 estaba conformada por una punta de calibre .40 (10.16 mm) de forma troncocónica de 180 grains de peso, animada de una velocidad en la boca de fuego de entre 950/970 pies / segundo, con una energía aproximada de 368 libras / pie. La principal razón que le permite al cuarenta ser disparado desde armas similares al 9 Para, lo constituye el diseño de su vaina, que en esencia es una vaina del 10 mm Auto, con un largo menor (21.59 mm) y el cambio en el uso de fulminantes del tipo Small Pistol standard, en lugar de los Large Pistol utilizados por el calibre del que deriva. La vaina es del tipo rimless, ósea que no posee reborde, y el diámetro del mismo es ligeramente mayor al reborde de una vaina 9 Para, mientras que sus paredes son rectas, ya que la diferencia de diámetro entre cuello y base es despreciable. A partir del éxito logrado durante su aparición, las diferentes fabricas de munición comenzaron a producir variantes, sobre todo con la utilización de puntas de menor peso: hoy en día hay disponible puntas cuyo peso varia entre los 155 a los 170 grains. En pesos mayores, se pueden encontrar puntas con peso de 200 grains. Con las puntas más livianas, las velocidades aumentan hasta casi convertirlo en un 357 Magnum, rondando velocidades de unos 1200 pies / segundo. En cuanto a balística exterior, las características propias lo ubican entre el 9 Para y el 45 ACP. Su punta de mayor diámetro, de forma troncocónica, y animada de menores o similares velocidades al calibre alemán, no le confiere una trayectoria tan tendida, mientras que con respecto al cuarenta y cinco sale mejor parado en este aspecto. Por el diseño de las puntas el principal punto que se tuvo en cuenta, es la balística terminal. Todas las fabricas de puntas producen algún modelo de punta deformable, existiendo una amplia variedad. La punta que menos se utiliza a nivel mundial (menos en Argentina) es la del tipo TMJ o totalmente encamisada. Si bien estas presentan una muy buena superficie frontal, el hecho de ser prácticamente indeformable no favorece el uso con fines defensivos. El cuarenta fue diseñado con la mente puesta en las fuerzas del orden, y como calibre de defensa para civiles. Como dije antes, lleno una especie de vacío que existía entre los tradicionales cartuchos de pistola utilizados con este propósito, tratando de reunir las mejores cualidades de ambos. Buen poder de parada unida a una mas que respetable capacidad de fuego. Estas ventajas lo posicionarón muy fuerte en el ámbito policial, sobre todo en el país del que es oriundo. En particular en nuestro país, se ha incrementado muchísimo el número de tiradores que han adoptado al mismo, así como también muchos nuevos fierreros que hacen sus primeras experiencias con él. Sin embargo como medio defensivo de un usuario de nuestro país, y a pesar de que ha superado a varios desarrollos anteriores, me parece que aún existen mejores opciones, por lo menos hasta que se modifique la prohibición que nos impone el gobierno al uso de puntas deformables para defensa. Talves muchos que lean esto no estarán de acuerdo conmigo, y me parece perfecto que así sea. Lo arriba escrito es solo mi falible opinión. Como cartucho de uso deportivo, se mostró adecuado para ser usado en la modalidad de Tiro Práctico, ya que la posibilidad de contar con un arma con un respetable poder de fuego, mas la capacidad del cartucho de rendir factor mayor sin inconvenientes, es una atractiva opción para el que se inicie en esta disciplina. Es probable que no sea la mejor opción para tiradores de primer nivel en las categorías mas exigentes y competitivas, ya que existe cartuchería que permite un mayor número de munición en cargador o prestaciones balísticas superiores. La corta vida del cuarenta no permite evaluar como se comportaría como cartucho de caza y en lo personal, creo que más allá de tener una energía suficiente como arma de remate, ninguna pistola salvo específicos modelos monotiro, podrá superar al revolver en esta materia. No tengo experiencia con armas largas desarrolladas para este cartucho, por lo que el rendimiento en caños largos para mí, es una incógnita. De todas maneras, no me parece que sea una opción a tener en cuenta, habiendo en el mercado diseños mucho mejores que se adaptan a esta modalidad. La inexistente producción de munición factory por parte de fabricas nacionales, obliga al usuario del mismo a utilizar munición factory de origen importado, valuada en dólares, o a adquirir las recargas comerciales que se venden cada vez mas en los polígonos del país. La otra opción, por supuesto es la de recargar en forma artesanal nuestra propia munición. Afortunadamente en nuestro ámbito pueden encontrarse todos los insumos necesarios para tal fin, sin que el desabastecimiento ni precios desorbitantes nos lo hagan prohibitivo. Lo primero que hay que tener en cuenta al recargar al cuarenta es que el mismo es un cartucho que trabaja con altas presiones. Los beneficios que brindan el tener una vaina de largo reducido, en contrapartida proveen al cartucho de una pequeña cámara de combustión. Sumado al hecho de que las puntas, aun las más livianas, presentan una masa importante. De acuerdo a las normas Saami, la presión máxima admisible es de 35000 psi. Una idea de la elevada presión en que el cuarenta trabaja la da el hecho que 35000 psi es la presión máxima del 357 magnum y del 9mm Parabellum, mientras que el 44 Remington Magnum tiene una máxima de 36000 psi. A pesar de no llevar un registro exhaustivo que pruebe lo que digo, no creo equivocarme al decir que este cartucho no se caracteriza por ser tolerable a fallas en la recarga o pequeños defectos del arma. El mayor índice de roturas o problemas en armas cortas, por lo menos en el ámbito en que me muevo, lo tienen los sistemas de armas de este calibre. Creo que, como decimos los que también gustamos de los autos, a los diseñadores "se le fue la mano cuando le tocaron las levas", es por eso que cualquier error puede producir desde desgaste prematuro del arma, hasta un accidente. Estimo que para asegurar una buena alimentación, las rampas de alimentación que ayudan al cartucho a introducirse en recamara dejan parte del cuerpo de la vaina sin retención, debiendo las mismas soportar el esfuerzo al momento del disparo. Este sistema es utilizado por el 45 ACP desde hace mas de 90 años sin problemas, pero debemos tener en cuenta que la presión máxima de este viejo cartucho es unos 14000 psi menor, por lo tanto no es tan critico este punto. En el cuarenta, cualquier error en el uso de vainas que no estén en condiciones optimas puede acarrear la rotura de la misma especialmente en ese sector libre de la contención de la recamara. De no mantenerse el retardo del cierre del arma unido hasta que las presiones hayan descendido a niveles tolerables pueden provocar un problema similar al anterior. Si bien todas estas recomendaciones son validas para toda arma y cartucho que se disparen en una pistola, el cuarenta es particularmente sensible a este tipo de fallas. Por ello sugiero que se vigile con mucho mas detalle el estado de los resortes recuperadores, así como cualquier síntoma que indique desgaste de caño y el buen estado de la rampa de alimentación del mismo. He tenido oportunidad de apreciar vainas disparadas con deformaciones considerables sobre la porción inmediatamente anterior a la ranura de extracción, esto puede provocar dos problemas: el primero tiene que ver con el hecho de que la vaina pierde vida útil por debilitamiento de material, debido a sucesivas contracciones y expansiones fuera de lo normal. El segundo, talves mas aislado pero que puede darse, es el que se puede producir al pasar a la vaina por el die de recalibrado, produciéndose algo así como él "arrugue" de la porción de la vaina que esta sobreexpandida, lo que da por resultado una vaina inutilizada. Por eso no estaría de mas revisar las vainas, no solo antes de la primera operación de recarga, sino también después. Una de las diferencias entre el cuarenta y su antecesor el 10 Auto, es el uso por parte del primero de fulminantes del tipo Small Pistol. Por las cantidades de propelente a usar no considero necesario usar los del tipo magnum, y no conozco ninguna tabla de recarga que lo aconseje. Por lo tanto, el hecho de usar un fulminante magnum no nos asegura la generación de mejores prestaciones. Lo que sí puede producir este tipo de fulminantes es un aumento indeseable en la presión de trabajo, lo que en este calibre se torna muy peligroso. Por lo tanto sugiero que se utilice solamente el fulminante recomendado por tabla. Las pólvoras que mejor trabajan con el 40 son las de quemado medio para armas cortas. Por supuesto que se pueden usar propelentes rápidos, pero no proporcionaran las mejores prestaciones, y tratar de alcanzarlas con ellas no es lo más aconsejable. En general las pólvoras que se consiguen con estas características son de origen importado, ya que las de origen nacional no son fáciles de conseguir a no ser que alguien nos la consiga o tengamos alguna otra manera de hacernos con un poco de ella. En si esto es una desventaja, si lo que buscamos son prestaciones topes. De todas maneras para los que tengan la posibilidad o los medios de valerse de pólvora importada mi recomendación es: Alliant [LIST] [*][U][COLOR=#990000]Blue Dot:[/COLOR][/U] Si bien esta pólvora ya se ubica dentro del segmento de propelentes medio-lentos, en el cuarenta trabaja muy bien con puntas livianas y pesadas. [*][U][COLOR=#990000]Power Pistol:[/COLOR][/U] Esta pólvora es de nuevo desarrollo y esta especialmente proyectada para ser usada en calibres como el 40, el 357 Sig y en menor medida el 9 Para. [*][U][COLOR=#990000]Unique:[/COLOR][/U] Es la mas rápida de las tres pero, sin llegar a proporcionar prestaciones máximas, es una buena opción para recargas potentes. Talves el único problema que presenta puede ser cierta dificultad al dispensar la misma en tolva. La misma tiende a "corta el grano". Esto puede producir diferencias en los pesos de las cargas, que en cargas máximas puede resultar peligroso. [/LIST]Accurate [LIST] [*][U][COLOR=#990000]N° 5:[/COLOR][/U] Es un poco rápida para el calibre. Generara prestaciones buenas sin ser las mejores. Por ser una pólvora esférica, es de fácil tirada en tolva. Es importante tener cuidado porque el volumen de una misma carga es reducido con respecto al mismo volumen de otro tipo de propelentes y puede provocar nuestro error con una doble carga. [*][U][COLOR=#990000]N° 7:[/COLOR][/U] A pesar de ser mas lenta que la anterior, las prestaciones no serán las máximas a niveles normales de presión. Rigen las mismas precauciones que para la pólvora anterior. [/LIST]Winchester [LIST] [*][U][COLOR=#990000]231:[/COLOR][/U] Es una pólvora rápida para el calibre, y entregara prestaciones similares a la Accurate N° 5. [/LIST]Lamentablemente no tengo experiencia con otras pólvoras de esta marca para la recarga de este cartucho. En materia de pólvoras nacionales, no existe tanta variedad. A este hecho debemos sumarle que no es fácil conseguir los distintos tipos de propelentes que se producen en nuestro país, es por eso que en el caso del cuarenta no se podrá recargar con la pólvora nacional que mejor rendimiento entregue, sino con la que se consiga. En este momento la A2 es el propelente más común de conseguir. A pesar de no ser lo mejor, se puede obtener resultados aceptables, sobre todo teniendo en cuenta la diferencia de costos que podremos ahorrar con relación a pólvoras de origen importado. Como comente arriba, todas las fabricas de puntas de primera línea en el ámbito mundial comercializan productos para este calibre. En general están pensadas con el propósito de proporcionar la mejor balística de efectos para ser usadas en defensa personal. Y también debo decir que estas puntas son con las que menos experiencia tengo. Esto se debe a su costo, el cual es demasiado alto para dispararle a un cartón en el Club. Mas allá de consumir unos tiros para medir velocidad y precisión, las puntas que he usado son las nacionales confeccionadas en plomo con cobertura de teflón, de 180 grains de peso. También he usado para tirar en el polígono, unas puntas electrolíticos de forma redondeada, similares a las clásicas que monta el 45 ACP. Creo que para el tirador que gusta de consumir una cierta cantidad de munición en forma periódica, estas son las opciones a tener en cuenta, dejando el uso de las puntas importadas para usos específicos. Al momento de colocar la punta en la recarga hay dos ítems a tener en cuenta: El primero tiene que ver con el hecho de que, como en muchos otros calibres de pistola, el asentamiento de la munición en recamara se produce sobre la boca de la vaina, contra el escalón que la recamara posee. Es por ello que no se debe efectuar ningún tipo de doblado sobre esta parte de la vaina, como el producido por el Roll Crimp. Las encargadas de sostener firmemente a la punta serán las paredes de la vaina, en la porción en que estas estén en contacto con el futuro proyectil. Este tipo de cierre se denomina Tapper Crimp. El segundo punto a tener en cuenta tiene que ver con la profundidad con que coloquemos a la punta en la vaina. Las dimensiones de la vaina son pequeñas, y cualquier error en este punto puede hacer que la presión de trabajo se eleve a niveles peligrosos, y más teniendo en cuenta que este calibre es sensible con este tema. La profundidad correcta estará dada por lo mas alta que esta se pueda colocar siempre y cuando no se exceda ni el largo nominal máximo del cartucho terminado, o se comprometa el correcto manejo en el cargador, lo que puede producir problemas de alimentación. Es por eso que no me parece recomendable recargar al cuarenta con puntas de mas de 180 grains de peso. Si bien existen puntas más pesadas, para que estas puedan alimentar bien, se debe introducir profundamente dentro de la vaina, reduciendo la capacidad de la misma para contener pólvora, y las prestaciones que se pueden obtener de este tipo de recargas son muy bajas. Final Hoy, los tiradores locales hablan sobre el cuarenta de la misma manera que lo hacen sobre otros calibres con muchísima más historia, y que están desde hace mucho tiempo arraigados en los círculos fierreros en nuestro país. Talves varios de los problemas o puntos discutibles de este nuevo calibre sean con el tiempo solucionados, como ha pasado con tantos otros cartuchos de arma larga y corta. Tal vez sea el equilibrio entre aquellos que piensan que lo importante es la velocidad, y los otros que piensan en proyectiles pesados. De lo que sí estoy seguro, es que el 40 Smith & Wesson se ha convertido en el poco tiempo de vida que posee en un éxito total, dentro y fuera de los ámbitos para el que fue creado. [LEFT]Vaina - Fulminante - Punta / Peso - Pólvora / Peso - Velocidad Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - Unique 6.7 grains - 1000 p/s Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - Accurat 7 9.6 grains - 943 p/s Remington - Winch SPS Teflón 180 grains - Blue Dot 9 grains - 1003 p/s Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - A2 4 grains - 939 p/s Remington - Winch SPS - Teflón 180 grains - A2 - 4,4 grains - 968 p/s[/LEFT] Estas cargas fueron disparadas desde una pistola Whalter P99. Ninguna carga mostró signos de sobrepresión. De todas maneras se sugiere usar estos datos solo como referencia y con precaución. [IMG]http://farm3.static.flickr.com/2164/2318074275_fbf413e1fc.jpg[/IMG] [/QUOTE]
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