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<blockquote data-quote="Leutnant" data-source="post: 486563" data-attributes="member: 45"><p>Lejos de los primeros ataques, y de la esperanza de victoria al principio de la batalla, para el invierno, la situación para las tropas alemanas era totalmente deseperada. Acá les paso un corto relato de como vivian estos soldados en medio de la muerte, el frío y el hambre:</p><p></p><p><em><strong><u>Ultimos dias de un ejército abandonado a su suerte:</u></strong></em></p><p><em></em></p><p><em>A finales de 1942, mientras Hitler daba órdenes temerarias desde su comodo refugio en los Alpes bávaros, las 250.000 tropas alemanas asediadas en Stalingrad aguardaban su destino. <<Nadie sabe qué nos va a pasar, pero créo que esto es el fin>>, escribió un soldado a su prometida. </em></p><p><em>El suministro aéreo ordenado por Hitler fué desbaratado por el mal tiempo, y el hostigamiento de los cazas soviéticos. Los suministros que lograban pasar, a menudo resultaban inútiles. Un embarque resultó ser cuatro toneladas de hierbabuena y pimienta; otro contenia cajas de condones primorosamente envueltos. En los vuelos de regreso, los Ju 52 y He 111 evacuaron 35.000 heridos, pero otros miles permanecieron para morir en la parcela de tierra a la que los soldados llamaban der Kessel, o la Caldera. Cuando cayeron los aeródromos de Pitomnik y Gumrak, los alemanes tuvieron que depender de las así llamadas bombas de suministros, cajas lanzadas en paracaídas. </em></p><p><em>Privados de alimentos, combustible, munición y esperanzas, los hombres escribían a casa cartas de adiós sobre papel higiénico, mapas o cualquier material bueno para ese fin. Sin embargo, el ejército interceptaba estas misivas profundamente intimas, supuestamente para un estudio de la moral de las tropas. Asombrados por los sentimientos abrumadoramente negativos expresados en ellas, el Ministerio de Propaganda ordenó destruir las cartas. Aún así, algunas se conservaron.</em></p><p><em></em></p><p><em>"Todo se derrumba a mi alrededor, todo un ejército muere, día y noche se consume en fuego, y cuatro hombres se ocupan con informes diarios sobre temperaturas y nubosidades. No sé mucho acerca de la guerra. Jamás he matado a un ser humano. Pero esto si sé: el otro bando nunca mostraría semejante falta de interés por sus hombres. Me hubiese gustado contar con las estrellas unas cuantas décadas más, pero ahora ya no podré hacerlo, supongo."</em></p><p><em>..............</em></p><p><em></em></p><p><em>"Esta será mi última carta en un buen tiempo, tal vez la última de mi vida. Se dice que mañana saldrá el último avión de la bolsa. La situación se ha vuelto insostenible. Los rusos se encuentran a apenas cinco kilómetros de nuestro último aeródromo y, cuando lo perdamos, de aqui no saldrá ni un ratón, por no mencionarme a mí."</em></p><p><em>...............</em></p><p><em></em></p><p><em>"A mi lado está tendido un soldado de Breslau que ha perdido un brazo y la naríz, y me dijo que ya no necesitará pañuelos. Cuando le pregunté que haría si quisiese llorar, me respondió: <<Nadie aquí, tu y yo incluidos, tendrá otra oportunidad de llorar... Pronto otros llorarán por nosotros."</em></p><p><em>...............</em></p><p><em></em></p><p><em>"Hemos venido hasta aquí cumpliendo órdenes, hemos matado cumpliendo órdenes, morimos de hambre cumpliendo órdenes. Podríamos haber huido hace mucho tiempo, pero los grandes estrategas aún no se ponen deacuerdo. Pronto será demasiado tarde, si ya no lo es. Una cosa es segura: volveremos a marchar siguiendo órdenes. Probablemente en la dirección originalmente prevista, pero sin armas y bajo un mando distinto."</em></p><p><em><img src="http://img83.imageshack.us/img83/3817/stalingrad08jz8.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /></em></p><p><em>...............</em></p><p><em></em></p><p><em>"Aquí estoy, aún de una sola pieza, con un pulso relativamente normal y una decena de cigarrillos. Antes de ayer tomé sopa, hoy conseguí una lata de jamón. Estoy acuclillado en un sótano, quemando muebles, 26 años de edad y , apesar de ser joven, no soy ningún tonto; uno de esos que ansiaba ser condecorado y gritar <<¡Heil Hitler!>> con todos vosotros; y ahora se trata de morir como un perro o acabar en Siberia."</em></p><p><em><img src="http://img184.imageshack.us/img184/4463/068bpa5.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /></em></p><p><em>...............</em></p><p><em></em></p><p><em>"Aquí gimen, mueren de inanición, mueren por congelación..., no es más que un hecho biológico como comer y beber. Caen como moscas; a nadie le importa y nadie les entierra. Yacen por doquier, sin brazos o piernas, sin ojos, con los intestinos fuera. Es una muerte propia de las bestias."</em></p><p></p><p><img src="http://img91.imageshack.us/img91/815/hbyhwa8.jpg" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /></p><p>..............</p><p></p><p><strong><u>Fuente:</u></strong> "El Tercer Reich, Nro 28: El camino a Stalingrad (Segunda Parte)". Ed. Time - Life. (pags: 142 - 154).</p><p></p><p>Saludos!!!</p></blockquote><p></p>
[QUOTE="Leutnant, post: 486563, member: 45"] Lejos de los primeros ataques, y de la esperanza de victoria al principio de la batalla, para el invierno, la situación para las tropas alemanas era totalmente deseperada. Acá les paso un corto relato de como vivian estos soldados en medio de la muerte, el frío y el hambre: [I][B][U]Ultimos dias de un ejército abandonado a su suerte:[/U][/B] A finales de 1942, mientras Hitler daba órdenes temerarias desde su comodo refugio en los Alpes bávaros, las 250.000 tropas alemanas asediadas en Stalingrad aguardaban su destino. <<Nadie sabe qué nos va a pasar, pero créo que esto es el fin>>, escribió un soldado a su prometida. El suministro aéreo ordenado por Hitler fué desbaratado por el mal tiempo, y el hostigamiento de los cazas soviéticos. Los suministros que lograban pasar, a menudo resultaban inútiles. Un embarque resultó ser cuatro toneladas de hierbabuena y pimienta; otro contenia cajas de condones primorosamente envueltos. En los vuelos de regreso, los Ju 52 y He 111 evacuaron 35.000 heridos, pero otros miles permanecieron para morir en la parcela de tierra a la que los soldados llamaban der Kessel, o la Caldera. Cuando cayeron los aeródromos de Pitomnik y Gumrak, los alemanes tuvieron que depender de las así llamadas bombas de suministros, cajas lanzadas en paracaídas. Privados de alimentos, combustible, munición y esperanzas, los hombres escribían a casa cartas de adiós sobre papel higiénico, mapas o cualquier material bueno para ese fin. Sin embargo, el ejército interceptaba estas misivas profundamente intimas, supuestamente para un estudio de la moral de las tropas. Asombrados por los sentimientos abrumadoramente negativos expresados en ellas, el Ministerio de Propaganda ordenó destruir las cartas. Aún así, algunas se conservaron. "Todo se derrumba a mi alrededor, todo un ejército muere, día y noche se consume en fuego, y cuatro hombres se ocupan con informes diarios sobre temperaturas y nubosidades. No sé mucho acerca de la guerra. Jamás he matado a un ser humano. Pero esto si sé: el otro bando nunca mostraría semejante falta de interés por sus hombres. Me hubiese gustado contar con las estrellas unas cuantas décadas más, pero ahora ya no podré hacerlo, supongo." .............. "Esta será mi última carta en un buen tiempo, tal vez la última de mi vida. Se dice que mañana saldrá el último avión de la bolsa. La situación se ha vuelto insostenible. Los rusos se encuentran a apenas cinco kilómetros de nuestro último aeródromo y, cuando lo perdamos, de aqui no saldrá ni un ratón, por no mencionarme a mí." ............... "A mi lado está tendido un soldado de Breslau que ha perdido un brazo y la naríz, y me dijo que ya no necesitará pañuelos. Cuando le pregunté que haría si quisiese llorar, me respondió: <<Nadie aquí, tu y yo incluidos, tendrá otra oportunidad de llorar... Pronto otros llorarán por nosotros." ............... "Hemos venido hasta aquí cumpliendo órdenes, hemos matado cumpliendo órdenes, morimos de hambre cumpliendo órdenes. Podríamos haber huido hace mucho tiempo, pero los grandes estrategas aún no se ponen deacuerdo. Pronto será demasiado tarde, si ya no lo es. Una cosa es segura: volveremos a marchar siguiendo órdenes. Probablemente en la dirección originalmente prevista, pero sin armas y bajo un mando distinto." [IMG]http://img83.imageshack.us/img83/3817/stalingrad08jz8.jpg[/IMG] ............... "Aquí estoy, aún de una sola pieza, con un pulso relativamente normal y una decena de cigarrillos. Antes de ayer tomé sopa, hoy conseguí una lata de jamón. Estoy acuclillado en un sótano, quemando muebles, 26 años de edad y , apesar de ser joven, no soy ningún tonto; uno de esos que ansiaba ser condecorado y gritar <<¡Heil Hitler!>> con todos vosotros; y ahora se trata de morir como un perro o acabar en Siberia." [IMG]http://img184.imageshack.us/img184/4463/068bpa5.jpg[/IMG] ............... "Aquí gimen, mueren de inanición, mueren por congelación..., no es más que un hecho biológico como comer y beber. Caen como moscas; a nadie le importa y nadie les entierra. Yacen por doquier, sin brazos o piernas, sin ojos, con los intestinos fuera. Es una muerte propia de las bestias."[/I] [IMG]http://img91.imageshack.us/img91/815/hbyhwa8.jpg[/IMG] .............. [B][U]Fuente:[/U][/B] "El Tercer Reich, Nro 28: El camino a Stalingrad (Segunda Parte)". Ed. Time - Life. (pags: 142 - 154). Saludos!!! [/QUOTE]
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Guerra desarrollada entre Argentina y el Reino Unido en 1982
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