Gracias a una serie de publicaciones, fue confirmada la realización por parte de medios y personal de la Armada Argentina de una serie de adiestramientos con foco en la práctica de tecnicas de buceo. La actividad involucró la participación del buque multipropósito ARA “Punta Alta” (MPPA) y el Servicio de Salvamento de la Armada (SISA).

Supervisado por el Comandante de la Capitanía de Puerto (COCP), Capitán de Fragata José Alejandro Ojeda, la actividad fue realizada en aguas abiertas, donde el MPPA actuó como plataforma para el despliegue de buzos a fin de realizar ejercitaciones. Además, durante la navegación a las ubicaciones designadas, la tripulación del ARA “Punta Alta” realizó “ejercicios en roles de lucha contra incendio y abandono del buque, además de efectuar maniobras de fondeo y operaciones con embarcaciones menores y de apoyo a las tareas de buceo. También realizaron prácticas en el lanzamiento y utilización de señales humosas y lumínicas”.

No obstante, uno de los focos de la navegación de buque fue la realización de actividades de buceo de personal del Servicio de Salvamento de la Armada (SISA), sirviendo también la puesta a prueba de un Vehículo de Operación Remota (ROV). Estas etapa de la ejercitación inició cuando el Punta Alta fondeo en la ondeó en cercanías de la localidad balnearia de Pehuen Co, aprovechando las condiciones de subacuáticas de baja visibilidad y fuertes corrientes.

Con motivo de esta actividad, el Jefe del SISA, Capitán de Fragata Rolando Rojas, destacó que: “El SISA debe mantener un elevado nivel de respuesta ante diversas situaciones, tanto en apoyo a las Unidades de la Armada (incluida su actividad antártica) como para asistencia a la comunidad, manteniendo sus medios y personal en apresto permanente para actuar cuando se presenta una emergencia. Esto exige un esfuerzo de adiestramiento constante en técnicas y procedimientos de salvamento y buceo”.

Entre las prácticas y maniobras realizadas se simularon ensamble de piezas en tiempos determinados, manteniendo comunicaciones con las unidades en superficie. Además, el ascenso desde la profundidad se realizó en etapas simulando la descomprensión en el mar para “adelante la práctica del procedimiento de asistencia y preparación del buzo para continuar su descompresión en una cámara hiperbárica portátil.”

Otro de los puntos altos de la ejercitación fue la prueba y despliegue de un Vehículo de Operación Remota (ROV), contando con el apoyo del Ingenieros Electrónicos del Departamento de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Nacional del Sur (UNS).

Desde la Armada expresaron que “El ROV presentaba algunos problemas que impedían su completa operatividad, por lo que a través de gestiones realizadas con personal de la UNS se coordinó con los ingenieros de esa institución académica, quienes evaluaron la situación y trabajaron en solucionar las fallas”.

*Fotografías: Armada Argentina.

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