Las primeras mujeres Submarinistas
Aqui subo una informacion publicada en un diario local de la ciudad de Punta Alta pensando que tal vez sea un tema interesante de discucion "Rol de la mujer en las Fuerzas Armadas"
22/07/2011 |
Las cabos Rosana Elizabeth Arias Heckel y Alejandra Elizabeth García hacen su capacitación en la Escuela de Submarinos y Buceo de la Base Naval Mar del Plata.
"Ser la primera es una responsabilidad muy grande, porque detrás de mí van a venir más chicas. Es un compromiso para mucha gente que en estos momentos me está apoyando", dice la cabo primero Rosana Elizabeth Arias Heckel, una de las dos mujeres pioneras en cursar en la Escuela de Submarinos y Buceo de la Base Naval Mar del Plata.
"Es una responsabilidad, un desafío, una meta, pero me encanta. La mujer cada vez hace más cosas, está siendo más partícipe en lugares donde antes no estaba", asegura.
Su especialidad es Servicios Varios Cocinera y no dejará de serlo. Rosana dejó en claro que "submarinista no es una especialidad, sino una capacitación que me va a permitir cocinar a bordo de un submarino -aclara-. La verdad es que extraño cocinar, porque este año [al estar en la Escuela] no lo he hecho."
¡Que las mujeres se animen!. Rosana Arias Heckel tiene 28 años, es de Punta Alta, donde vive toda su familia y sus 2 hermanos, mayores que ella, también son cabos principales de la Armada y tienen destino en Puerto Belgrano. Ella ingresó en 2003 porque "ya es de familia -cuenta-. Iba a la escuela y ya sabía que sería militar. Mi papá también lo fue".
Cursó sus estudios primarios en la Escuela N° 2 "Domingo Faustino Sarmiento" y la secundaria en la Escuela de Educación Técnica N°1, ambas de su añorada ciudad natal.
"Me gusta. Siempre vuelvo y siempre se extraña. Mar del Plata, también. Y no tendría problemas en quedarme acá, en el submarino que me toque", dice.
-¿Por qué los submarinos?
"En 2009 vine con el ‘Bahía San Blas' a Mar del Plata y los vi en el agua. En ese buque permanecí 3 años y sabía que me tenía que desembarcar porque llevaba mucho tiempo a bordo. Entonces pregunté y me dijeron que el de submarinista era un curso selectivo, que debía rendir unos exámenes. Y lo hice. Ahora estoy estudiando".
"Lo que estoy viviendo ahora es algo que no me esperaba. Estoy aprendiendo muchas cosas. La verdad es que quería seguir a bordo de una unidad, porque que en el "San Blas" tuve una linda experiencia de navegación. Me tocaron 2 comisiones al exterior (estuve en Haití en 2007 y 2009)", expresa con orgullo la joven puntaltense.
La cabo Rosana Arias Heckel cierra su relato con satisfacción: "Mi familia me apoya por esta decisión que tomé. Mi mamá ya está acostumbrada a que navegue y no esté. Está muy emocionada con lo que he logrado. Mis hermanos también. Dicen que son los hermanos de ‘la primera'. Y a otras mujeres, les digo que se animen a tomar el curso. Es una linda experiencia y una buena capacitación. ¡Se puede!".
Un estilo de vida. La cabo segundo Furriel Alejandra Elizabeth García es la otra pionera en la Escuela de Submarinos y Buceo. Sobre la nueva etapa profesional que transita coincide con su compañera de curso: "El hecho de ser una de las primeras es un desafío y una gran responsabilidad. Una vez que egrese, mi meta es navegar en el nuevo submarino ‘San Juan".
Alejandra García nació en la ciudad de Salta. Tiene tan solo 21 años. Cuenta que por su especialidad, se encarga de la parte administrativa. "Egresé de la Escuela de Suboficiales en 2008 y me dieron pase a Mar del Plata. Cuando llegué a mi destino, me mandaron al detal de base y me tocó hacer los papeles para el ingreso de algunos cursantes. No sabía muy bien de qué se trataba y entonces empecé a investigar".
-¿Cuál fue la razón de esta elección?
"Me di cuenta de que no había ningún impedimento para la mujer y presenté los papeles para rendir en la Escuela de Submarinos y Buceo. Y me aceptaron. La Armada es un estilo de vida que uno elige. Y ahora, este curso que elegí es un desafío día a día."
Alejandra también confiesa que conoció por primera vez el mar y el puerto cuando llegó a Punta Alta para ingresar a la ESSA (Escuela de Suboficiales de la Armada).
"Decidí entrar por una compañera que su padre era retirado de la Armada. Ella completó los papeles y me preguntó si la acompañaba. Y así fue. Nos presentamos a rendir. Ella no entró. Me fui a Punta Alta y me gustó mucho, aunque no conocía nada. Luego me di cuenta de que había muchos salteños allí", relata.
En Salta viven su padre, empleado en una estación de servicio, y su madre, ama de casa. También tiene 3 hermanos: el mayor es cabo de Gendarmería y está en Rosario (Santa Fe); el menor también es gendarme, pero vive en Rawson (Chubut); y su hermana menor estudia.
Según la cabo Alejandra García, su familia está contenta con su decisión, aunque al principio el padre no quería que se fuera tan lejos. "Pero a mí me llamó la atención pertenecer a la Armada porque es algo diferente".
La experiencia bajo el agua. Antes de Semana Santa, los cursantes realizaron un embarco de instrucción en superficie a bordo del submarino "Salta". La segunda navegación tuvo lugar a fines de junio.
"Fue muy positivo, porque en la escuela aprendemos muchos conocimientos teóricos y cuando vamos a bordo los volcamos a la práctica. Así asimilo más rápido", dice García.
La cabo Rosana Arias Heckel también cuenta su experiencia: "Es raro estar encerrado porque uno no ve lo que hay afuera ni cómo está. Yo tenía la experiencia del barco, pero me sentí bien. Los instructores a bordo y la gente de la tripulación nos enseñaron los diferentes tipos de maniobras. En total, somos 18 haciendo el curso (hay sólo 2 mujeres y un venezolano que está de intercambio)".
"El trato es igual, aunque seamos mujeres. Si vamos a limpiar, limpiamos todos. Si vamos a rendir, es para todos. Hacemos guardias igual que los varones; las mismas actividades que ellos. Quieren que salgamos buenas", bromea la cabo pionera salteña.
Fuente: Gaceta Marinera