Mirando al fogón, con el guiskyto en mano, "veo" paisajes de una guerra anterior a MLV, en la que también estaba listo a formar parte (trabajé haciendo trincheras a la macana)...contra Chile, con el BIM5...a pesar de vivir a 3 cuadras del BIM, hacía como 10 días que no podía ir a ver a mis hijos (3 y 1 años, respectivamente), por estar acuartelado...entonces escribí una carta, la puse en un sobre y se la dí a mi suboficial encargado para que, si me pasaba algo, la entregara a mis hijos...era mi única "herencia"...el alma de su viejo...(quizás yo no iba a poder educarlo, por eso le dejaba los principios con los que me muevo)...y mi hijo mayor no sólo la conserva, sinó que hizo de ella una especie de "biblia"...
Es esta, y se la dedico a todos los VGM, pero en especial al Sire Gabino...Sr, una vieja ley del mar dice: "quien honor me rinde, honor merece"...yo cumplo con esa ley...
Carta a mi hijo I
Desde el primer vagido se inició tu marcha áspera y dura del aprendizaje:
No vaciles ante el obstáculo que te ponga la vida, ni te entregues al lamento lloroso de los débiles. Mira siempre mas allá de él, y lo habrás vencido. Y sobre todo, no te detengas en el camino ni un instante, pues quedarás fuera de tu tiempo.
Que tu paso sea firme y tu ideal claro y noble. Ayuda en lo posible al caído, cuidando que el peso de sus penas y sus lacras no te arrastren con él en la caída. No te agaches a recogerlo; lo ayudarás mas alentándolo a luchar por su redención. Permanece erguido hasta que, con sacrificio, se coja de tu mano. De no ser así, déjalo y no te arrepientas: no se merece a sí mismo. Pero no te endurezcas al extremo de olvidar el significado de la palabra ¨ Hermano ¨.
Sé solidario, sin llegar por ello a ofender con la inutilidad de la lastima harapienta. Y calla tus obras buenas; en el pecho del beneficiado por ellas tendrás un sitio. Que eso te baste.
No interrogues nunca por curiosidad malsana. Y no juzgues los hechos ajenos: la Justicia del tiempo y de la conciencia, ya es de por sí dura.
Deja a tu corazón que te guíe. El te dirá claramente quien puede llamarse ¨ amigo ¨.
No desprecies al resto, pero mantente prudentemente alejado de sus besos, pues tarde o temprano habrán de lastimarte.
Ama a tu Patria y su Historia. Ten el honor de defenderla ante cualquiera y en cualquier momento. Que tu pecho sea tabernáculo de su bandera y estarás honrando a tus padres, que ayudan a construirla para dejártela en legado.
Actúa siempre de manera de estar en paz contigo mismo, y lo estarás con Dios, que te mira. No caigas nunca de rodillas ante el oro ni ante el miedo; tu ser vale mas que el primero y tu paz te protegerá del segundo. En todo caso, aúlla de hambre y de coraje y nunca estarás solo.
Sentirás que el alma de tu padre te acompaña y te bendice, niño mío.
(sigue parte 2)
Carta a mi hijo II
Levántate de tus caídas y sangrando y magullado sonríe, y te nombrarán por fuerte.
Si llegaras a llorar, serás el entretenimiento de quienes no tienen otra ocupación que observar el dolor ajeno. Más, no habré de enseñarte a no llorar a solas, pues haría de ti un monstruo de frialdad insana.
Pregúntate siempre de donde vienes y el porque. Y sentirás a la herencia que lleva tu sangre, darte las correctas respuestas de la vida y el bien.
Moldea tu vida en los golpes y el sacrificio; no hay escultor que realice su obra acariciando el mármol. Y márcate la frente con el hermoso signo de la honradez y la nobleza. Tu hermana humanidad se sentirá feliz de poder, ante ti, dejar de par en par sus puertas abiertas.
Venera a tu madre en todo momento y circunstancia. Y no desconozcas a tu padre, pues caerás en el terrible error de desconocerte a ti mismo.
Sé útil a los demás, sin llegar a ser siervo de los demás.
En tu profesión, busca ser el mejor. No porque lo digan, sino porque lo sientas. Compite lealmente en todo terreno y en los ojos de tu rival hallarás reconocimiento.
Y sé valeroso tanto para decir la verdad como para recibirla. El amigo habrá de agradecértela y habrás de agradecérsela. El enemigo, te beneficiará con su marcha.
No defraudes ni estafes a nadie en ningún sentido.
Tus deudas serán cobradas tarde o temprano, a costa de tu conciencia.
Cuando ames, habrás de hacerlo en forma de entrega total.
Más, si el amor te pidiese que rindas tu dignidad en su nombre, déjalo marcharse.
Ese amor no es bueno ni es malo: simplemente, no es.
Y si mis palabras forjan para ti un camino honroso y seguro, di solamente:
gracias, padre....
Yo sabré entonces que mi vida no ha sido en vano.
Eso pretendo.-
Naval
--- merged: Oct 25, 2012 3:28 AM ---
Estimado Diego R: disculpeme si no lo nombré...ud era otro de los tantos que se me quedaron en el teclado....si, tengo ají p..pari0, santiagueño...le van a transpirar hasta los pies, amigo...
jaaaa...
Como me gusta eso de que "tire otra astilla al fuego"...es mantenerlo vivo, esperando a los que puedan llegar, de vuelta de sus "patrullas por la vida"...
Abrazo grande