Franceses critican posición de Dilma en relación la cazas
16 Diez 2012
Andrei Netto
CORRESPONDIENTE / PARÍS
A presidente Dilma Rousseff confirmó en el viaje a Francia, semana pasada, el aplazamiento por tiempo indeterminado de la decisão sobre la compraventa de 36 aviones de caza para la Fuerza Aérea Brasileña (FAB). Tampoco dio pista sobre un eventual favorito en el proyecto FX-2. Pero Serge Dassault, presidente de honra de la Dassault Aviation, fabricante de los cazas franceses Rafale, reconhece: los americanos F-18 Super Hornet, de Boeing, son hoy los favoritos de Brasilia.
Los indicativos fueron dados pelo industrial en la jantar de gala oferecido el martes por el presidiente de Francia, François Hol- lande, a Dilma. Dassault, de 87 años, reconoce las dificultades que su empresa enfrenta para convencer el actual gobierno brasileño a invertir en los Rafale, y no en uno de sus concurrentes: el Super Hornet, de Boeing, y el Gripen NG, de la sueca Saab.
Además de reconocer el poder de convencimento de los rivales - "los americanos están haciendo una fuerza terrible" - y de los problemas de cambio - "los Rafale cuestan más caro a causa de la relación entre el euro y el dólar"-, Dassault reconoce que la relación entre la compañía y los gobiernos los francés y brasileño esfriou desde la posesión de Dilma Rousseff. "Ella es más preocupada con los problemas financieros, lo que es normal", dijo. Según él, "la relación con Lula era más simpática, más abierta". "Infelizmente él no tomó la decisión en el melhor momento."
Los últimos meses, tres fontes diferentes de la diplomacia francesa reconocieron al Estado que las críticas hechas por el governo de Nicolas Sarkozy a las negociações realizadas por Brasil y Turquía sobre el programa nuclear de Irán, en 2010, generaron grande insatisfação en Lula, que habría decidido congelar a conpara de los Rafale.
El desafío del Ministerio de la Defensa francés desde entonces es encontrar un nuevo tono para las negociações. El ministro Jean-Yves Le Drian evita hasta elencar la concorrência de los cazas brasileños entre las prioridades de la diplomacia de París. "No creo que el Rafale tenha sido un asunto", dijo él, sobre los encuentros entre Dilma y Hollande. Indagado sobre por qué el tema salió de la mesa de niegociações, respondió: "Porque a mío ver las elecciones estratégicas de Brasil en términos de defensa se" volvieron más para el mar".
El ministro brasileño de la Defesa, Celso Amorim, monstrou la misma despreocupação sobre el asunto. "No hay ninguna novidade", dijo. Amorim dijo estar satisfecho con la nueva postura francesa. "Hay muy respeto de la parte de ellos sobre el momento de lo Brasil tomar una decisión."
Fuente: O Estado de São Paulo