Mientras funcionarios del Servicio de Aduana de Hong Kong realizaban un control de rutina sobre todos los contenedores descargados en la terminal de Kwai Cheng, encontraron que uno de ellos no tenia la licencia de importación ni ningún otro documento. Tal como indica el procedimiento decidieron realizar la apertura del container y en su interior apareció ni más ni menos que un MiG 29 Fulcrum…
El container había salido de Ucrania y tenía como destino Estados Unidos, aunque las autoridades chinas confirmaron que el destino real del container sería otro, ya que difícilmente tal cargamento pudiera ingresar a EEUU sin ningún tipo de documentación. Según se informó se trata de un Mig 29 biplaza, en excelente estado con todo su equipamiento electrónico completo, aunque no portaba armas de ningún tipo y ni ninguno de sus dos motores, hecho que confirma que tenía como destino alguna fuerza aérea, ya que ningún coleccionista o museo ha solicitado un ejemplar de ésas características ni cuenta con las herramientas necesarias para reensamblar la aeronave o dotarla de motores.
Este "descubrimiento" revela que el tráfico ilegal de armas es una constante en cualquier lugar del mundo y que el gobierno de Ucrania no tiene ningún tipo de control sobre su armamento. Según el comentario en off de algunas redes de traficantes, un avión como el Fulcrum o un Su-25 Frogfoot, se puede conseguir a un costo de 1 a 2 millones de dólares, aunque conseguir un lote de repuestos duplicaría esos valores. Esta vez, a alguien "el negocio" le salió mal....
El container había salido de Ucrania y tenía como destino Estados Unidos, aunque las autoridades chinas confirmaron que el destino real del container sería otro, ya que difícilmente tal cargamento pudiera ingresar a EEUU sin ningún tipo de documentación. Según se informó se trata de un Mig 29 biplaza, en excelente estado con todo su equipamiento electrónico completo, aunque no portaba armas de ningún tipo y ni ninguno de sus dos motores, hecho que confirma que tenía como destino alguna fuerza aérea, ya que ningún coleccionista o museo ha solicitado un ejemplar de ésas características ni cuenta con las herramientas necesarias para reensamblar la aeronave o dotarla de motores.
Este "descubrimiento" revela que el tráfico ilegal de armas es una constante en cualquier lugar del mundo y que el gobierno de Ucrania no tiene ningún tipo de control sobre su armamento. Según el comentario en off de algunas redes de traficantes, un avión como el Fulcrum o un Su-25 Frogfoot, se puede conseguir a un costo de 1 a 2 millones de dólares, aunque conseguir un lote de repuestos duplicaría esos valores. Esta vez, a alguien "el negocio" le salió mal....