Publicado el día Viernes 27 de Junio de 2014
Mohamed Alí Seineldin.
Extracto de "Malvinas un sentimiento".
Episodio 41.
"...Después de otra terrible noche con bombardeo naval, lo que hizo que no durmiéramos, me llevó a pensar que los ingleses tomarían un descanso después de tanto esfuerzo; entonces me aliste para recorrer la totalidad del área bajo mi mando
- Mi Teniente Coronel mida bien el riesgo de su decisión; las avanzadas de los ingleses ya disponen de campo visual sobre nuestra posición; estamos propensos a recibir fuego por sorpresa.
- Debo visitar las posiciones, es necesario, la guerra se pondrá mas intensa cada día. Además es importante que los soldados me vean"
Tanto ha sido así, que para nosotros, sus soldados, no era indistinto verlo o no. Porque no solo significaba verlo, sino que además eso conllevaba palabras de aliento y consecuentemente un robustecimiento de nuestra moral. Siempre comentábamos:
- Hoy vino el Turco.
- El "Teco" (abreviatura de Teniente Coronel) paso por acá a preguntar como estábamos.
Y esa realidad para un soldado era un verdadero estimulo (el Jefe estaba con nosotros)
Y ni que decir cuando compartíamos una comida y hablábamos de "esos canallas".
- Permiso, mi Teniente Coronel, la Compañía sin novedad.
- ¿Como sin novedad? Anoche tuvieron un lindo baile, las secuelas del bombardeo están a la vista.
- Ud. sabe, mi Teniente Coronel, que el Capitán Vlzek (cuyo Puesto de Comando había sido destruido por el bombardeo) no quería quedarse en el Puesto Sanitario (había contraído un cuadro gripal), pero entre el Mayor Vergara y los doctores Isola y Brodsky lo obligaron a internarse, sino, créame que no habría contado el cuento.
- Y me mostró los cráteres ocasionados por la artillería naval inglesa."
"La acción de ambos médicos, mas la permanente actividad de los enfermeros, permitió que el Regimiento alcanzara un impecable estado de salud."
Si bien es cierto que nuestro Jefe en el Puesto Sanitario era el Teniente Primero Leonardo Álvarez Berro, odontólogo, no es menos cierto que nuestro jefe medico era el Teniente Primero Juan Carlos Isola. Este estaba en el hospital, ya que por su especialidad, Traumatología era más útil en los quirófanos. Así que permanentemente intercambiábamos información.
El Teniente Coronel cada tanto me mandaba a llamar para conocer y seguir el estado sanitario de la tropa y cuando existieron casos puntuales de mayor necesidad medica, siempre lo tenia presente e insistía en su preocupación para que las cosa se solucionaran.
Así como la Sanidad, también era su preocupación el estado de nutrición de los soldados y supimos tener mas de una charla en ese sentido, pero había una clara interacción entre la llegada del medico con la de los alimentos y es en este sentido en el que las dificultades se sumaban día a día. El terreno era cada vez mas accidentado y consecuentemente más difícil lo que ocurría por el agravamiento de la guerra y, por supuesto del clima, lo que asociado a muchos días bajo esa inclemente situación, todo se potenciara.
Sin embargo era maravilloso ver a nuestros enfermeros corriendo de una posición a otra, colaborando con la actividad medica. Y, la verdad, parecía que no importaba que estuvieran tirando bombas, HICIERON SU TRABAJO...."
Fuente:
Malvinas…
Mis memorias.
Por el Dr.Rubén Brodsky
Un Héroe con su Madre.
Fuente: Dr.Ruben Brodsky