Algo mas edificante....
Arenga del Coronel a sus Veteranos de Guerra.
Su presencia.
"....-Ustedes no son "los chicos de la guerra" como enarbolan los desmalvinizadores, ustedes son los bravos soldados que mas daño inflingieron a Inglaterra después de la segunda guerra mundial, defendiendo el territorio que nos pertenece por legado divino y herencia de España: la Argentina Patagónica, la Argentina Antártica y la Argentina del Atlántico Sur, con sus enormes riquezas que debemos defender y preservar para nuestras generaciones futuras.
Sabemos que la gloriosa sangre derramada por nuestros 649 héroes, no ha sido en vano, pero también sabemos que nos queda el compromiso de convertir en triunfo la derrota..."
ARENGA. (Quizá del prov. arenga, y este del gót. *harihrĭng, reunión del ejército, de harjis, ejército, y *hrĭng, círculo, corro de gente). f. Discurso pronunciado para enardecer los ánimos. (DRAE)
Expresiones como la de más arriba eran mas que suficientes para que nosotros, sus soldados, nos motiváramos y fuéramos adelante con el propósito.
Siempre fue un Jefe detrás de sus soldados y literalmente como ocurría cuando íbamos a comer (último en la cola de la cocina de campaña y, como fue una vez, devolvió su plato de comida porque tenia mas que las raciones que nos daban a los soldados) y adelante de los mismos toda vez que el peligro o la urgencia lo requería (una vez, como tantas, nos estaban bombardeando, y el fuera de su posición y con largavistas mirando los cielos en búsqueda "del avión pirata").
La personalidad del Jefe hizo que entendiéramos que siempre estaba presente y de hecho lo veíamos.
-
Como anda mi Tte. Coronel? Que esta haciendo por acá?
El Sargento Ayudante Ponce de León, responsable de la logística de víveres entre otras cosas y siempre en la cocina y siempre pensando en que y como comeríamos (UN GRANDE), le preguntaba, luego del saludo militar de rigor.
-Acá estoy, Ponce de Leon, vengo a afilar mi sable.
-???????
Yo estaba por ahí, justamente por ahí, viendo de "manguear" algo para comer.
-Afilando el sable mi Tte. Coronel?
Le pregunto
-Así es, así los vamos a esperar.
Increíble; claro lo dijo con una sonrisa, que me pareció que ratificaba que lo decía en serio.
Y "cosas" como esas, muchas.
Recorría las posiciones siempre que podía y siempre con una palabra de aliento.
Su posición, por ejemplo, no era muy diferente a la nuestra. Era algo estrecha y en ella desarrollaba su puesto de comando y en ella recibía a todos, incluso al Tte. Coronel ingles David, encargado de la evacuación del personal argentino, una vez concluida la guerra, quien le ofrece un vehiculo para que se lo traslade al campo de prisioneros, ofrecimiento que rechazo.
Nosotros "sus veteranos de guerra" nos sentimos orgullosos de haber participado en el conflicto con semejante Jefe, y también de haber pertenecido al glorioso Regimiento de Infantería 25 (hoy con el agregado de mecanizado)....."
Malvinas…
Mis memorias.
Por el Dr Rubén Brodsky.