finitivamente muy tarde a reincorporarse al Grupo de Batalla, se decidió una solución de compromiso y caer 30 grados a babor, al rumbo 150º, cuando se estimaba estar en el límite del alcance de la posición del supuesto lanzador argentino de Exocet ubicado probablemente, de acuerdo a la información de inteligencia disponible, en Cabo San Felipe (Cape Pembroke) (Cabo San Felipe). Cuando estaban muy cercanos al límite del área de peligro de misiles dibujada en la carta y algo más aliviados porque nada había sucedido con la supuesta batería argentina, hicieron la caída a babor de 30 grados y mantuvieron los 24 nudos de velocidad. Después de todo si hubiesen estado al alcance del Exocet, los argentinos ya lo habrían lanzado, incluso varios minutos antes, por lo que el Segundo Comandante, Capitán de Fragata Chris Gotto, dispuso pasar a Defence Watches (dos guardias) y mandar a descanso a la mitad de la dotación del buque después de una larga vista incluso desde lugares tan alejados como Darwin y Goose Green, causando júbilo en los defensores argentinos y una gran preocupación entre las fuerzas británicas. A bordo del “Glamorgan”, en el complicado momento de relevos de guardia y entrega de novedades, algunos tripulantes pudieron ver otra explosión, de tantas de aquella noche, en tierra. Posiblemente un depósito de municiones que estallaba, sin embargo, desde esa misma dirección apareció un punto brillante que se acercaba rápidamente… En el puente, el Oficial de Navegación, Capitán de Corbeta Ian Inskip, observando la pantalla del radar táctico 992 vio un contacto débil al 020º y 8 millas que lo sobresaltó, se alivió al pensar en un eco falso porque el punto desapareció en el siguiente barrido, pero volvió a aparecer al próximo y mucho más cerca. De acuerdo a su información y consultado también con la CIC, noche en estaciones de combate. Lo que los ingleses no sabían era que la verdadera posición del lanzador directamente con el PWO Teniente Greg Gilchrist, no había aviones ni helicópteros volando, por lo que debía ser un Exocet… tampoco había una era unas 3 millas al SSW de lo estimado, en Hookers Point, por lo que aún estaban dentro del alcance del Exocet y se mantendrían en esa situación por algunos minutos. A las 06:30 horas un contacto apareció cercano al límite del alcance del RASIT. Con el nerviosismo producido por la agitación pero con meticulosidad, pues no cometerían el mismo error del 6 de junio, los argentinos efectuaron el procedimiento de lanzamiento y a las 06:35 horas una gigantesca llamarada marcó el exitoso lanzamiento del misil superficie-superficie, que fue visto alejarse con expectación por el personal de la batería y por muchos soldados de ambos bandos que combatían en el área. Dos minutos después una gran explosión en el mar fue interceptación del radar del misil por parte de los operadores de guerra electrónica que hubiese confirmado o alertado antes de la presencia del temido misil. La CIC intentó lanzar chaff, pero éstos se encontraban descargados o no disponibles, el blanco hostil se encontraba muy cerca para lanzar Sea Slug, aproximando por la aleta de babor, fuera del arco de fuego de los cañones de 4.5’’, por lo que solo quedaba lanzar el misil de corto alcance Sea Cat. El puente por su parte ejecutó la maniobra antimisil dispuesta, consistente en presentar la popa del buque de manera que el misil impactara abierto 10 grados en un ángulo que se esperaba fuera lo suficientemente abierto (lejos de la perpendicular) al casco deREDERiCK RiVADEnEiRA muy cerrada a estribor, presentaba una fuerte manera que el Exocet rebotara, no estallara o al menos lo hiciera fuera del buque. Para efectuar esta maniobra el destructor debía caer rápidamente por estribor hasta el rumbo 190º. El Capitán Inskip dio la orden al timonel “estribor 30 grados”, sin embargo el timonel repitió “babor 30 grados” y comenzó a girar el timón a babor, ¡NO a estribor! fue el inmediato grito del Oficial de Navegación y el timonel cambió la caña, pero se perdieron valiosos segundos para iniciar la caída. Por la mente del Capitán Inskip pasaba la pregunta ¿en qué momento exacto se debía detener la caída para quedar exactamente con la proa al 190º? Detenerla muy rápido implicaría que el buque terminaría la maniobra muy lentamente y el misil podría impactar con un mejor ángulo para que estallara su cabeza de combate, detenerla muy lento podría producir pasar de largo del rumbo 190º y presentarle directamente la popa al misil que podría entrar directamente y hacer estallar los misiles Sea Slug presentes en la gigantesca santabárbara de este tipo de destructor. Con toda su concentración en el repetidor del girocompás dio la orden cuando le pareció de acuerdo a su experiencia que era más apropiado… En ese momento la CIC jugó su única carta disponible y se lanzó un Sea Cat desde el lanzador de babor. Sin embargo, era demasiado tarde… el pequeño misil superficie-aire salió correctamente y pasó a muy poca distancia del Exocet, pero no había volado la distancia suficiente para que su espoleta se activara. No había nada más qué hacer … el impacto era inminente. No obstante haberse entrenado innumerables veces, nadie, ni el Puente ni en la CIC dio el aviso de “Brace, brace, brace”, por lo que casi la mitad de la dotación no supo del misil hasta sentir el impacto en el buque. Es probable que algunas vidas se pudieran haber salvado de haberse dado ese aviso a tiempo. El Exocet impactó por la aleta de babor, a la altura del hangar. Como el destructor se encontraba todavía ejecutando una caída escora a babor, con lo que el impacto fue en la cubierta y no en el casco. Tal como los ingleses pensaban al ejecutar la maniobra antimisil, el MM-38 rebotó hacia arriba y gran parte de la fuerza de la explosión se perdió en el aire y aun cuando rompió la cubierta, esparciendo parte de su combustible y otros restos al interior, el misil hubiera caído al agua por la otra banda de no haberse encontrado con el hangar y un helicóptero Wessex cargado de combustible. En segundos, un gigantesco incendio se inició en el hangar con llamas de más de 30 metros de altura, otro un poco menor en la cocina y comedores, el lanzador de Sea Cat de babor había desaparecido, las turbinas a gas aspiraron directamente las llamas y el humo del incendio del hangar y se apagaron, así como tres de los cinco generadores, los tubos lanzatorpedos de babor, el director de Sea Cat de la misma banda, la sala de transmisores de Sea Cat y varias antenas sufrieron graves daños a causa de esquirlas, además, numerosos cables y cañerías se rompieron o fracturaron. Impacto de Exocet en la banda de babor del HMS “Glamorgan”. La fragata HMS “Yarmouth” en cercanías del destructor presenció el impacto del Exocet en el “Glamorgan” y el personal del puente por largos segundos pensó lo peor. Tal fue la cantidad de llamas y humo generado que el destructor desapareció, una nueva tragedia al estilo de los cruceros de batalla de la Primera y Segunda Guerra Mundial, sin embargo, segundos después la silueta característica del destructor clase County emergió de la nube de humo causando gran alivio en la “Yarmouth”.