Tendrías que ver que si bien todos del sur de Brasil, Jujuy, Uruguay a Ushuaia identificaríamos casi todas las comidas, lo común es otro tema.
Dudo mucho que en mi zona las comidas normales sean las mismas que en Puerto Madryn y que lo que comen en Gualeguaychú sea lo mismo que comen en San Martín de los Andes.
Si la empresa es de MdQ, ellos están acostumbrados a comer mucho marisco y peces de mar. Cosas que yo en mi **************** vida como y las paellas son lujos que se comen una vez al año. Sale un huevo traer cosas de mar por acá. Así como le saldría un huevo a la gente de Bahía Blanca querer comer un Dorado o Surubí.
Tiene razón. País grande y diverso.
Además, seguramente, a cualquier soldado que le den paella y la mayoría de estos productos con champiñones, frutos del mar, salsas especiales, etc. Estará más que contento.
Pero independientemente de eso, es probable que en la mayoría de las familias argentinas se coman milanesas con papas, fideos o tallarines con salsa boloñesa, tortilla de papas, algún tipo de tarta, ensaladas rusas o de lechuga, tomate y zanahoria, etc.
Existe un grupo de alimentos que no importa a qué lugar del país estés, seguramente encontrarán. En todos los restaurantes. En casi todas las familias. En las reuniones de amigos o de trabajo. Viajando en autobús. Etcétera.
Yo supongo que para mantener la moral alta de un soldado tienen que tratar de brindarle una alimentación saludable y equilibrada, preparada para un deportista y, también, más o menos “típica” de lo que acostumbraba a comer en su casa, con sus amistades, etc.
Por ello las raciones de cada país tienen sus particularidades únicas. El de Estados Unidos tiene lo que tiene, el de Rusia rico en grasas, el italiano con pastas, los japoneses con mucho arroz y algas, la española con paellas, etc. En el caso de Francia, literalmente las mismos productos disponibles comercialmente.
En algunos casos, yo no sé en qué grado son productos representantes de la “típica” gastronomía local, o en qué grado prefirieron ahorrarse la investigación y desarrollo y, simplemente, importan productos de otros países y/o producirlos bajo licencia, sin adaptarlos al paladar local.
Puede ser una solución rápida y eficaz. Pero ¿qué tan contento estaría la tropa de comer cosas no-típicas todos los días?
Por ejemplo, me ha parecido que los chilenos prácticamente importan las raciones estadounidenses sin ningún tipo de adaptación. Son de buena calidad. Nadie discute eso, pero desconozco qué tan feliz estará el soldado de comer cosas “raras” todos los días.
En el caso de esta empresa marplatense. Quizás es lo que usted dice. O, quizás, también trata de ganarse su nicho en el mercado con una cartera de productos exclusivos. Lo cual es más que legítimo.
O, simplemente, repite la receta que se desarrollo en otro país para otro público y, así, ahorrarse el tener que reinventar la rueda.
En cualquier caso, no estoy seguro de que su actual cartera de producto sea la óptima para proporcionarle a las tropas argentinas.