Estados Unidos recurrió a un importante lanzamiento paracaidista en el norte de Irak en la última invasión a ese país. Creo que fue en el 2003.
La operación francesa en Mali también tuvo un importante componente paracaidista. No se lanzaron en "paracaídas", sino que los aviones aterrizaron y desde allí se desplegaron. Pero a pesar de la sutil diferencia en la táctica de penetración, es una operación paracaidista.
La última intervención rusa en Ucrania tuvo una importante acción paracaidista en cercanías de Kiev. Y fue exitosa en una primera etapa. Los problemas que tuvieron fueron posteriores a eso y porque otros elementos de la operación no fueron como se planifico.
Pocos meses antes de la intervención en Ucrania, los propios rusos enviaron sus paracaidistas en apoyo del gobierno de Kazajistan. En este caso, aterrizaron en un aeropuerto de forma muy ordenada. Pero sólo los paracaidistas podían dar ese nivel de respuesta. Pocas horas después de encargada las misión, estaban aterrizando en ese país e iniciando el despliegue.
Cuanto menos, cuatro ejemplos recientes que muestran que se continúan utilizando los paracaidistas.
En al menos un ejemplo, muestran la velocidad de respuesta ante la convocatoria a un despliegue.
En al menos un ejemplo, muestra la capacidad de desplegarse en lugares donde el enemigo no espera. Obligando a este último a tomar recaudos que pueden debilitar la concentración de fuerzas en otros lugares.
En al menos un ejemplo, muestra que los paracaidistas no necesariamente se despliegan en paracaídas. Tienen más de una modalidad de introducción en el terreno.
Pero observaría un detalle adicional. Muchos de los críticos de los paracaidistas también son defensores del asalto aéreo mediante helicópteros.
Asaltos aéreos en maquinas mucho más frágiles. Mucho más ruidosas. Más lentos. Transportan menos carga y su acción se realiza mucho más cerca del punto de partida.
Los paracaidistas tienen varias ventajas frente a los asaltos aéreos. Como la capacidad de penetrar mucho más atrás de las lineas enemigas, más rápido, transportando más carga, etc. Un avión es más silencioso que un helicóptero, vuela más rápido, más lejos, con mayor cantidad de personas y cargas y también puede volar al ras del suelo para evitar ser detectado.
Más carga en particular implica que pueden ser acompañados por vehículos ligeros, más municiones, etc. En general, más cosas de lo que se puede hacer en helicópteros.
También son más robustas y resistentes a fallas, averías y daños.
Y, casi lo olvido, las condiciones climáticas para un lanzamiento en paracaídas puede ser un poco más perniciosas que las necesarias para un asalto aéreo.
Suponiendo un lanzamiento a baja altura, un C-130 Hercules puede volar los último cientos de kilómetros al ras del suelo, finalmente elevarse a sólo 100 metros de altura respecto al suelo para lanzar más de 60 paracaidistas en menos de un minuto mientras atraviesa el área de aterrizaje a cientos de kilometros por hora. Dichos paracaídas estarán menos de veinte segundos en el aire antes de tocar el suelo. Para cuando el último paracaidista toco el suelo, cerca de un minuto después de que el primero paracaidista abandonó el avión, el Hercules ya estaría ocultándose tras el horizonte.
Un asalto aéreo con Black Hawk requeriría más de cuatro helicópteros volando lentamente y generando mucho ruido. Teniendo que detenerse y conservar el vuelo estacionario a baja altura para que la infantería suelte las sogas y desienda.
El asalto aéreo no es tan extraordinario como se lo pinta, ni el paracaidismo tan obsoleto como aparenta.
Ambos aportan cosas imprescindible en las guerras modernas: el dominio de la tercera dimensión.
Un ejercito con capacidad de moverse en la tercera dimensión podrá realizar penetraciones por sorpresa y avanzará más rápido y más lejos que aquel ejercito que sólo domine dos dimensiones.