Su voz de mando era: “Todos adelante, pero detrás de mi!” Cuando recibe la ráfaga y cae, Giachino pronuncia el nombre de su amada: «¡Me dieron, Cristina!” Gravemente herido, soportando el dolor atroz, el capitán blande una granada de mano, le saca la chaveta e intima al gobernador Rex Hunt a...