Buques de la Armada en Ushuaia
28·09·07 | El destructor ARA “La Argentina” y la corbeta ARA “Gómez Roca”, que realizan la tercera Etapa de Mar, se encuentran en Ushuaia, el último puerto de su itinerario por el litoral austral.
USHUAIA - La corbeta ARA “Gómez Roca” y el destructor ARA “La Argentina”, que están realizando la tercera etapa de adiestramiento en el mar, arribaron el lunes pasado a la capital fueguina, último puerto que tocarán desde que zarparon de Puerto Belgrano, el pasado 15 de septiembre.
Antes de amarrar en el puerto de Ushuaia, las unidades de la Armada navegaron por el estrecho de Magallanes, en aguas de jurisdicción de la República de Chile. En el marco del Tratado de Paz y Amistad que rubricaron ambos países en los 80, el adiestramiento se realiza con pilotos de navegación chilenos.
En esta ocasión, embarcaron el capitán de fragata Claudio Yañez y el teniente segundo Mauricio Carrasco Ríos.
Camaradería trasandina
Permanecieron a bordo un día y medio, orientando al comandante del destructor “La Argentina” (buque insignia) desde el canal Magdalena. Cubrieron guardias y compartieron el quehacer de los marinos argentinos en un marco de camaradería y amistad.
“Tenemos oficiales de la Armada Argentina embarcados en nuestras unidades”, dijo Yañez, quien aseguró que todo marino argentino es bien recibido. “Es una manera de dar testimonio y continuidad a los encuentros de camaradería”, expresó.
Y añadió que en los últimos dos años tuvo la oportunidad de embarcar en el aviso ARA “Alférez Sobral” y en la lancha rápida ARA “Intrépida”, unidades argentinas con asiento en la Base Naval de Ushuaia.
En el fin del tránsito por el estrecho, cuando el faro Les Eclaireurs estuvo a la vista y la bahía de Ushuaia indicó que el puerto estaba cerca, se produjo un particular encuentro entre marinos de ambos países.
Por la banda de estribor (lado derecho de un buque) del destructor “La Argentina” se acercó el patrullero chileno “Sibbald”.
A bordo navegaba el comandante de la Tercera Zona Naval, contralmirante Edmundo González Robles, y el comandante de la Flota de Mar argentina, contralmirante Antonio Torres, esperó atento su paso.
“Hace 32 años compartí el viaje de instrucción con la promoción del actual contralmirante González Robles”, dijo. Guardiamarinas argentinos y chilenos realizaron el viaje en el buque escuela BE “Esmeralda”.
“Fue una grata sorpresa”, expresó el contralmirante Torres.
Donde convergen el Pacífico y el Atlántico
36 horas les llevó al destructor ARA “La Argentina” y a la corbeta ARA “Gómez Roca” recorrer las 370 millas del estrecho que conecta el océano Pacífico con el Atlántico. El destino, el puerto de la ciudad de Ushuaia.
El paso donde convergen ambos océanos lleva el nombre de Hernando de Magallanes, el legendario navegante portugués que lo descubrió en 1520. Llegó al sur del continente americano a bordo de una nave que avanzaba a vela, Trinidad, con 265 tripulantes.
El domingo pasado, “La Argentina” y la “Gómez Roca” transitaron esas aguas, atravesando diversos estados meteorológicos que sazonaron la navegación y un horizonte para no olvidar.
El estrecho permite disfrutar de un paisaje forjado por el movimiento telúrico y por tempestades, vientos y la sal que baña ambos lados de la costa. Una reserva natural a gran escala, islas, puestos de control de tráfico marítimo, acantilados, bloques de hielo que se deslizan de los montes nevados son parte del espectáculo visual.
A las tres de la tarde el mar está planchado. La costa todavía no se ve.
Desde el puente de comando ordenan iniciar contacto de radio y maniobras para el embarco de dos pilotos, oficiales de la Armada de Chile, que guiarán al buque en el tránsito por las aguas interiores de su país.
El sábado, la furia del mar azotó la proa del buque y algunos de la tripulación deambularon por las cubiertas bajas para escapar del inevitable mareo. El cabeceo persistió hasta entrada la tarde.
En la “Gómez Roca” fue peor. Durante 12 horas ininterrumpidas sufrieron un cabeceo tan intenso que muchos agradecieron no estar embarcados en ella. “¡Parece un Zamba!” se compadecieron de sus camaradas de la corbeta.
Los dos buques cruzaron la línea de frontera signada por el puesto de control marítimo argentino ITO 1 enfrentado a punta Dúngenes, lo cual señala el inicio al pasaje del estrecho.
Es la cuarta vez que el comandante de “La Argentina”, capitán de fragata Gabriel Catolino, cruza el estrecho. Primero en el transporte “Cabo de Hornos”, en 1989; luego en el aviso “Suboficial Castillo”, en 2000; y finalmente en el transporte “Aquiles” de la armada de Chile, en 2001.
Pero la cuarta es la vencida. Él comanda el buque esta vez. Detrás, la corbeta “Gómez Roca” sigue su estela.
El recorrido se llevó el día, la noche y casi todas las horas de luz del lunes. Durante la navegación por el estrecho, los buques realizaron un simulacro incendio en el sector de motores, entre otras actividades.