Armada Argentina - Comando de Aviación Naval - Base Aeronaval Comandante Espora, Bahía Blanca, Buenos Aires - 2º Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque
Dassault Super Etendard
COMIENZOS
Dentro del plan de modernización de las fuerzas aeronavales de finales de los ‘70, la Armada Argentina decidió, luego de una gran competencia con el modelo A-4F norteamericano, a 14 Dassault Super Etendard.
PRE-GUERRA
En Marzo de 1982 la Armada había recibido el primer lote de 5 Super Etendards franceses, monomotores a reacción subsónicos especializados en misiones aire-superficie, especialmente antibuque. El punto que había inclinado la balanza por éste sobre el A-4F Skyhawk era no solo que eran aparatos totalmente nuevos, sino por la capacidad de utilizar armamento inteligente antibuque, el cual era la frutilla del postre de la adquisición. Se trataba claro está, del misil AM-39 Exocet, que se había recibido una unidad por avión, como el contrato lo especificaba.
Los aviones fueron movilizados a la 2º Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque basados en la Estación Aeronaval Comandante Espora, en las afueras de la ciudad de Bahía Blanca, desplazando a los A-4Q a la 3º Escuadrilla.
DESPLIEGUE
Posterior a la Operación Rosario la Armada Argentina ordenó a la 2º Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque disponer en el menor tiempo posible de cuatro aviones y sus cadenas logísticas correspondientes para ser desplegados a una base aeronaval del Sur del continente, para estar en condiciones de realizar operaciones contra las fuerzas británicas que se acercaban. El 20 de Abril, los cuatro aviones arribaron a Río Grande, siendo seguidos sus mecánicos, logística y armamento en un avión de transporte que los proseguía. En un principio se consideró desplazar las máquinas al aeropuerto de Puerto Argentino, pero posteriormente esta idea fue descartada.
GUERRA
Los Super Etendard realizaron únicamente misiones antibuque con los cinco Exocet disponibles, como estaba planeado. Se contaron en total cinco salidas, todas ellas en el mes de mayo (los días 2, 4, 23, 25 y 30).
Las misiones infructuosas fueron las del 2 de Mayo (problemas de reabastecimiento en vuelo), y la del 23 de Mayo (ningún blanco fue encontrado).
En las otras misiones, el 4 de Mayo uno de dos AM-39 Exocet lanzados impactó y explotó (contra el pensamiento oficial que dice no haber explotado pero generado un gran incendio) sobre el destructor HMS Sheffield, destruyéndolo, el cual se hundió una semana después. El 25 de Mayo dos Super Etendard lanzaron sus Exocet contra uno de los dos portaaviones, siendo éstos desviados, aunque pudieron re-enganchar un blanco, siendo la víctima el pavoroso SS Atlantic Conveyor, el buque más grande de toda la Fuerza de Tareas británica. El mismo se hundió tres días después.
Por último, el único misil remanente fue disparado en una épica misión desde el sudeste (los aviones habían sobrepasado a la flota para atacarla “por sus espaldas”) hacia el portaaviones HMS Invincible, y siguiendo al AM-39 atacaron al portaaviones cuatro aviones A-4C Skyhawk, quedando el portaaviones inoperativo por un tiempo no revelado por Gran Bretaña.
Ya sin Exocets los Super Etendard regresaron a Bahía Blanca, desde donde se prepararon (ante la posible llegada de más AM-39 del mercado negro) para seguir los combates, especialmente en configuración de ataque nocturno, ya que era la única forma que faltaba sorprender a los británicos.
Los misiles no llegaron, y así finalizó la actuación de los Super Etendards en la guerra, respondiendo acordemente a la expectativa que generaban éstos por ser los aviones más modernos y de tecnología más alta del país.
Los Super Etendard fueron el temor más grande que tuvo la flota enemiga desde el 4 de Mayo (antes a eso el temor era hacia la Fuerza de Submarinos de la Armada Argentina), y no solo generó respeto y cambio rotundo de tácticas de defensa de la Royal Navy, sino de todo el mundo. Es por eso justamente que los mismos británicos planearon suicidas misiones con sus fuerzas especiales para eliminar la amenaza de Super Etendards, destruyendolos y matando a sus pilotos.
Dos Super Etendards se reabastecen de un KC-130H Hercules, con su mortífera carga de Exocets, rumbo a la flota británica
DETALLES DE PERDIDAS Y EXITOS
- 30 de Mayo, portaaviones HMS Invincible
(/)
- 4 de Mayo, destructor HMS Sheffield
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- 25 de Mayo, portaconentenedores Atlantic Conveyor
(X)
POST-GUERRA
Luego de seis meses de finalizada la guerra Francia decidió levantar el embargo, y envió en Diciembre 1982 y Enero 1983, los 9 aviones y 9 misiles restantes.
Durante los años siguientes la Armada Argentina reconoció la importancia de los AM-39 Exocet, incorporando nuevos lotes para aumentar la capacidad en caso de ser requeridos nuevamente.
Con el correr de los años tres Super Etendard sufrieron accidentes, reduciendo el parque aéreo a 11 unidades.
ACTUALIDAD
Existen 10 Super Etendards en estado operativo en la 2º Escuadrilla Aeronaval de Caza y Ataque, en Comandante Espora, con un número aproximado de 35/40 Exocets en stock, los cuales comparten con los ASH-3 Sea King.
El único Super Etendard sobreviviente con dos KillMarks es mantenido dentro de los hangares sin volar (aunque en caso de guerra total obviamente lo hará), para que no se pierda un avión histórico en una misión de entrenamiento, como había sucedido en una demostración en Punta Indio.
Los Super Etendard no recibieron ningún upgrade ni modernización, a pesar de las constantes ofertas francesas para llevar a los SUE al estándar Super Etendard Moderniseé.