Infanteria de Marina española.
OPERACION SOCOTRA.
Dos buques de la Armada española, la fragata Navarra y el buque de apoyo Patiño, interceptaron en aguas del Océano Índico, al sureste de Yemen, al So-San, un carguero de bandera camboyana y tripulación norcoreana que transportaba al menos una veintena de misiles balísticos Scud, La operación se saldó sin heridos.
Abordaje y disparos
La fragata 'Navarra' recibió la orden de interceptar el barco. Los militares españoles exigieron 'visitar' el 'So San', pero el capitán del navío pirata se negó y siguió su rumbo sin inmutarse. Fue entonces cuando el barco de guerra realizó tres ráfagas de 'disparos disuasorios' para forzar a parar al mercante: primero a 200 metros de la proa, luego a 100 metros y finalmente sobre la cubierta del barco. La respuesta del capitán norcoreano fue aumentar su velocidad.La decisión de asaltar el barco fue inmediata. Tiradores de élite de la IM dispararon contra el cableado que impedía el abordaje de la embarcación. Una vez quedó despejado el camino, un grupo de la UOE, que viajaba a bordo del 'Patiño', descendió sobre la cubierta del 'So San' a bordo de un helicóptero. En apenas segundos, los 'comandos' españoles redujeron a la tripulación del navío sin que se produjese un solo herido.Un segundo grupo de tropas de élite se hizo cargo del control del mercante, mientras que los 'comandos' comenzaban la inspección.Unos minutos después de comenzar los registros, los soldados españoles comprobaron que las sospechas estaban más que fundadas y que las bodegas del 'So San' escondían el más importante arsenal descubierto en aguas de Oriente Medio desde el nacimiento de la coalición internacional contra el terrorismo tras los atentados del 11-S.Tras confirmarse la importancia del hallazgo, varios navíos de guerra de EEUU se trasladaron hasta la zona, junto a un equipo de registro especializado.El buque camboyano, su tripulación y su carga ilegal fueron entregados al Alto Mando de la operación 'Libertad Duradera', que les dejó en libertad.