Informate bien de tu propia historia. Criollos lo eran todos, ya que en vuestras guerras de independencia no hubo nunca un ejercito de refuerzo a los leales desde la península. En un primer momento se estaba lichando contra la invasión francesa, y en 1819 el ejército que se había preparado se sublevó contra el Gran Felón para reinstaurar la constitución de 1812. Así que repito, criollos e indios en ambos bandos, y además bastantes más indios entre los leales que entre los renegados.
Estoy de acuerdo contigo en que habia criollos e indios de ambos lados, y tambien habia españoles de ambos lados.Aclaremos que no estoy defenestrando a los españoles que lucharon con bravura y lealtad, como nos tienen acostumbrados, lo humillante lo puse en cuanto a la conformacion del armamento y la preparacion y cito : Dice Artigas: "La fuerza enemiga constaría de 400 á 500 hombres de Infantería con cuatro piezas de Artillería dos obuses de á 32, y dos cañones de á 4, con 64 artilleros buenos: de á 16 hombres de dotación en cada cañón, y 459 que componían la Caballería. La fuerza de mi división, se componía de 600 hombres de caballería (mal armados), y 400 infantes, con los dos cañoncitos de á 2".
Los adictos a la corona pudieron elegir dónde hacerse fuertes, y lo hicieron en una elevación que dominaba el entorno y les daba una considerable ventaja. Especialmente ante la disponibilidad de varias piezas de artillería, que durante toda la batalla batieron a los orientales. La toma de esas posiciones fue ardua. Narra Artigas, siempre en su parte a Ronde-au, que "todo mi esfuerzo y el de los oficiales no era bastante á contenerlos (a los patriotas) en avanzar, por que no sufrieran el ventajoso fuego de los enemigos; en un lugar donde el terreno era dominado por ellos". Ese sacrificio dio sus frutos, logrando finalmente los orientales desalojar el enclave de la artillería -donde los españoles abandonaron un cañón y municiones- y colocar al grueso de las fuerzas de Posada en una situación estratégicamente difícil, atacados por la retaguardia y ambos flancos. Poco después, sobre las cuatro de la tarde,-el comando español levantaría una bandera de Parlamento. Y Artigas reclamaría la rendición incondicional, con respeto de la vida de los vencidos. Así se aceptó y la batalla terminó con una rotunda victoria de las armas orientales y la captura de todo el buen armamento del que disponían las tropas españolas. Una idea de la precaria formación militar de los patriotas la da el hecho de que Artigas le pide a Rondeau artilleros para manejar cinco de las seis piezas de artillería capturadas: en el ejército oriental no había quien pudiera hacerlo.
Un abrazo