Los problemas de este proyecto son mucho mas básicos, para evitarlos no eran necesarios ni ensayos de canal ni sistemas de calculo muy complejos, el problema es de arquitectura naval y se resuelve simplemente con un buen control de pesos.
Este proyecto lo diseñó un ingeniero naval con casco de acero y casillaje de aluminio, Tandanor tomo el proyecto y se puso a construirlo, como no tenían aluminio, hicieron todo en acero. Por falta de fondos el proyecto se abandono durante el Macrismo. Alrededor del 2020 se retomó y como no tenían ningún calculo de pesos decidieron ponerlo a flote para ver cuanto calaba, obviamente resultó que calaba mucho mas de lo que debía, para salvar este problema decidieron agregar una rodaja al cuerpo paralelo y continuaron la construcción. Devuelta la construcción continuó sin ningún control de pesos y cuando lo volvieron a ponerlo a flote resultó que devuelta calaba mas de lo que debía.
Ahora a un genio se le ocurrió resolver el problema agregando un tercer pontón lo que va a generar un considerable incremento de la resistencia al avance, no solo por el aumento del volumen de carena, sino también por la interferencia de las estelas de los tres pontones y por lo que se ve no hicieron ninguna modificación a la propulsión. También van a aparecer problemas de maniobrabilidad.
Esto es lo que pasa cuando se quiere poner a construir a un taller de reparaciones que no cuenta con oficina técnica, ni con personal idóneo en proyecto y construcciones.
El SWATH tiene un plano de flotación muy reducido y la variación de pesos produce mucha variación de calados, por eso el control de pesos en este tipo de buques es muy importante, tanto como en un submarino.
Este proyecto lo diseñó un ingeniero naval con casco de acero y casillaje de aluminio, Tandanor tomo el proyecto y se puso a construirlo, como no tenían aluminio, hicieron todo en acero. Por falta de fondos el proyecto se abandono durante el Macrismo. Alrededor del 2020 se retomó y como no tenían ningún calculo de pesos decidieron ponerlo a flote para ver cuanto calaba, obviamente resultó que calaba mucho mas de lo que debía, para salvar este problema decidieron agregar una rodaja al cuerpo paralelo y continuaron la construcción. Devuelta la construcción continuó sin ningún control de pesos y cuando lo volvieron a ponerlo a flote resultó que devuelta calaba mas de lo que debía.
Ahora a un genio se le ocurrió resolver el problema agregando un tercer pontón lo que va a generar un considerable incremento de la resistencia al avance, no solo por el aumento del volumen de carena, sino también por la interferencia de las estelas de los tres pontones y por lo que se ve no hicieron ninguna modificación a la propulsión. También van a aparecer problemas de maniobrabilidad.
Esto es lo que pasa cuando se quiere poner a construir a un taller de reparaciones que no cuenta con oficina técnica, ni con personal idóneo en proyecto y construcciones.
El SWATH tiene un plano de flotación muy reducido y la variación de pesos produce mucha variación de calados, por eso el control de pesos en este tipo de buques es muy importante, tanto como en un submarino.