“USTEDES TIENEN EL POTENCIAL PARA LLEGAR MÁS LEJOS AÚN, MANTENGAN EL ESPÍRITU DEL PILOTO DE CAZA”
Expresó el jefe del Grupo 3 de Ataque, comodoro Plinio Guillermo Poma, en la ceremonia del Vuelo Solo en el Sistema de Armas IA-58 Pucará
Por Lic. Laura Artuso / Fotos: C. Rocío Martínez
El 29 de junio en la III Brigada Aérea, ubicada en Reconquista, provincia de Santa Fe, se cumplió un ciclo más en la instrucción de tres jóvenes pilotos de combate que con esfuerzo, dedicación y profesionalismo han sorteado los primeros desafíos para poder volar solos. Cerca del mediodía, los tenientes Lorenzo Quiros Feijo, Sergio Palacios y Guillermo Rasia concretaron la vibrante experiencia en el avión de combate más versátil que tiene la Fuerza Aérea Argentina: el Pucará.
Cuando la aeronave busca su posición de estacionamiento en la plataforma militar de la Unidad, tras el primer Vuelo Solo, de su piloto recibe el “bautismo” a base de numerosas costumbres que conforman los códigos de la aviación, entre ellas la tradicional “manteada” con la que los compañeros de los tenientes los elevan al cielo, una y otra vez, en una manta.
Luego de esta antigua y legendaria tradición cazadora de Vuelo Solo se realizó en el Grupo 3 de Ataque el acto de entrega de diplomas y distintivos que fue presidido por el jefe del Estado Mayor General, brigadier general "VGM" Enrique Víctor Amrein. También estuvieron presentes el comandante de Adiestramiento y Alistamiento, brigadier mayor Oscar Charadía; el inspector general, brigadier mayor Héctor Ascazuri; el jefe de la III Brigada Aérea, comodoro Roberto Orlando, personal militar y civil e invitados especiales.
Con la interpretación del Himno Nacional por parte de la Banda Militar de Música Pucará” de la III Brigada Aérea comenzó el acto tan esperado por los jóvenes pilotos.
El jefe del Grupo 3 de Ataque (G3A), comodoro Plinio Guillermo Poma estuvo a cargo de las palabras alusivas:
“Para alcanzar esta meta se ha hecho necesaria la participación del G3A que día a día ponen su cuota de compromiso, laboriosidad e iniciativa para mejorar las condiciones de trabajo y lograr que se alcancen así los mejores resultados posibles”.
“En la faz netamente con el vuelo, estamos logrando los objetivos impuestos por la superioridad de instrucción, adiestramiento y operación real. Esto no sería posible si no contáramos con un excelente equipo compuesto por jefes de escuadrones, escuadrillas, sección y numerales abocados a dar uno lo mejor que posee, su profesionalismo y su entusiasmo en cada vuelo realizado”, expresó el comodoro.
Y agregó que
“aunque no ha sido el primer Vuelo Solo de sus vidas estoy seguro de que la ansiedad y las expectativas en llegar a este día han sido profundas como en las otras oportunidades, en las que preguntaron si estarían a la altura de las circunstancias. Tienen ustedes el potencial para llegar más lejos aún. Mantengan el espíritu inquisidor del piloto de caza. Preocúpense por saber siempre que hay más allá y apóyense en los más experimentados para sacar lo mejor de ustedes mismos”.
Con su mirada puesta en los pilotos de combate y con la voz enérgica expresó:
“Orgullo de pertenencia al Sistema de Armas IA-58 Pucará, espíritu de equipo puesto de manifiesto en los Escuadrones Aéreos y vocación de servicio por nuestra de condición de militares son los pilares fundamentales para una carrera profesional, y ustedes lo han demostrado”.
A continuación, se llevó a cabo la habitual invocación religiosa por parte del padre Héctor Farías, capellán de la Fuerza Aérea:
“Señor contempla y bendice a estos pilotos de combate de Pucará que hacen esta ceremonia de Vuelo Solo. Gracias por haber enriquecido sus mentes y fortalecido sus corazones con el conocimiento y con el amor su destino inmortal y transcendente como hijos de Dios, como miembros de la Fuerza Aérea y como argentinos. Virgen de Loreto te confiamos la custodia y protección de estos jóvenes para que en el desempeño de su profesión sean fortalecidos y puedan proseguir animosos en la senda del deber, en el servicio abnegado de la Patria”. Seguidamente, el capellán bendijo los diplomas y distintivos.
Los pilotos recibieron por parte de sus instructores de vuelo un diploma, escudos y el pañuelo que identifica al Grupo 3 de Ataque dentro de la Institución y, orgullosos, firmaron el Libro de Oro.
El jefe de Estado Mayor General junto al comandante de Adiestramiento y Alistamiento realizaron la entrega de presentes a los pilotos para cerrar al son de “Alas Argentinas” esta ceremonia tan emotiva.
Finalmente los nuevos “pucareros” recibieron las felicitaciones por parte de los invitados y todos los presentes fueron invitados al Casino de Suboficiales para almorzar un típico asado criollo.
Noticias en Vuelo entrevistó al teniente Palacios quién relató muy emocionado la experiencia de haber volado por primera vez solo:
“Es una ceremonia muy esperada dentro de los pilotos de caza ya que nos permite adiestrarnos y seguir adelante superándonos día a día”.
Por su parte, el teniente Rasia dijo que lo
“honra enormemente ser parte del Grupo 3 de Ataque. Y agradezco a mis instructores de vuelo por el intenso y arduo trabajo que realizaron en estos meses para lograr este exitoso Vuelo Solo”.