EL ALTO PRECIO DEL GAS EN EUROPA IMPONE EL CIERRE DE VARIAS EMPRESAS ACERÍAS, CON GRAVES PERJUICIOS PARA EL MERCADO DEL ACERO
El cierre de los grifos de gas a Europa ordenado por el gobierno ruso está sacudiendo a Europa por el cuello y dejando un ojo morado en su economía. Las repercusiones en la industria del acero son inmensas. ArcelorMittal, la mayor siderúrgica de Alemania, ya ha ordenado el cierre de sus altos hornos, con graves consecuencias para la empresa. Además de Alemania, la empresa detuvo la producción en su planta siderúrgica en Warzawa, Polonia; En España, en Asturias, la compañía parará dos altos hornos a finales de septiembre. Otras empresas también experimentan el mismo problema en otros países, como Liberty Steel, de la República Checa. Detuvo uno de sus dos altos hornos; Lo mismo sucedió con United States Steel Kosive, de Eslovaquia, también paró uno de sus dos altos hornos; En Serbia, el Grupo HBIS dio la misma orden y detuvo uno de sus dos altos hornos. En Italia, Acciare d'Italia, Ferriere Nord y Arvedi han detenido por completo su producción.
Reiner Blaschek, director ejecutivo de ArcelorMittal Alemania y también responsable de la planta de Bremen, dijo que el aumento exorbitante de los precios de la energía está teniendo un gran impacto en la competitividad de la producción de acero. "Esto se ve agravado por la débil demanda del mercado y las perspectivas económicas negativas, así como los altos costos de CO2 en la producción de acero, lo que hace que las medidas de salvaguardia de la Unión Europea sean ineficaces", dijo.
ArcelorMittal está asumiendo las consecuencias en Alemania, ya que no todos los activos pueden operarse económicamente. Desde finales de septiembre, obremen group cerrará uno de los dos altos hornos de acero plano en Bremen hasta nuevo aviso. En la planta de aceros largos de Hamburgo, donde ArcelorMittal produce alambrón de calidad, la planta de reducción directa también se cerrará en el cuarto trimestre debido a la situación actual y las perspectivas negativas.
El trabajo a corto plazo también se está aplicando en los sitios de producción en Duisburg y Eisenhüttenstadt debido a la tensa situación. Los altos costos del gas y la electricidad están ejerciendo una fuerte presión sobre la competitividad de la empresa. Además, a partir de octubre, estará el impuesto a la gasolina previsto por el gobierno alemán, que gravará aún más a la empresa.
“Como una industria que consume mucha energía, estamos extremadamente afectados por esto. Con una multiplicación por diez de los precios del gas y la electricidad, que tuvimos que aceptar en unos meses, ya no somos competitivos en un mercado que se abastece en un 25% con importaciones. Vemos una necesidad urgente de acción política para controlar de inmediato los precios de la energía”, dijo Reiner Blaschek.
Uwe Braun, CEO de ArcelorMittal Hamburg, dijo: “Ya hemos reducido el consumo de gas de manera muy significativa. Entre otras cosas, compramos el precursor de la esponja de hierro en el exterior de Estados Unidos, para lo cual habríamos utilizado gas natural localmente. La fábrica ya ha reducido las operaciones en un 80%. El aumento extremo del precio del gas y la electricidad nos impide seguir operando de manera rentable”, agregó.
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