No paso de los planos. Requería la reactivación de una metalúrgica para el acero ya que no era sólo un proyecto para incorporar un nuevo sistema de armas, sino también un proyecto industrial. La metalúrgica en cuestión no se reactivo, así que el proyecto no era factible.
Aunque el M-119 es estadounidense, el hecho de ser una licencia del L-119 británico me lleva a preguntarme si es factible su adquisición por Argentina.
Una alternativa era el GIAT LG1 francés. Aunque entiendo que nunca estuvo en consideración.
Nada de eso sucedió.
Lo que si sucedió es que Argentina incorporó excedentes italianos del Oto-Melara M-56.
Entre 2013 y 2015 se incorporaron varias baterías de M56 completamente nuevos.
Entiendo que con esto fue suficiente para sustituir todas las piezas perdidas en Malvinas y, también, aquellas desgastadas en décadas posteriores.
Así que, tal parece, la artillería ligera argentina tiene su dotación de obuses completa y no se prevén nuevas incorporaciones en el futuro predecible.
Hoy en día, las inversiones en la artillería ligera estarían concentrada en otros conceptos, como producción de municiones, sistemas informáticos, telémetros, drones, etc.