Progreso en las otras reservas
RESERVISTAS DEL EJÉRCITO
La Compañía Buenos Aires
por Lucía Tornero
Todos los ciudadanos tienen el derecho constitucional de capacitarse para la defensa de su país y las Fuerzas Armadas que están formadas por el cuadro permanente y la Reserva, deben ocuparse de su instrucción. Uno puede servir a la Patria y satisfacer su vocación militar, incorporándose a la Reserva.
Durante el segundo semestre de 2008, como resultado de la implementación de la nueva normativa de las reservas, se creó un nuevo sistema de instrucción
LOS RESERVISTAS forman antes de las actividades que realizarán durante el día.
diferente del que se estaba implementando. Prevé la creación de elementos de dimensión variable (compañías, secciones o grupos) que, en primera instancia, cada cuerpo tiene la responsabilidad de su implementación dentro de su jurisdicción. A tal fin, el Ejército Argentino creó la primera Compañía de Reservistas Voluntarios “Buenos Aires”. SOLDADOS asistió a una de sus reuniones en las cuales realizan actividades de instrucción y perfeccionamiento, dos sábados al mes.
SIMULACRO de tiro con el programa SIMRA II de Citefa, allí perfeccionan su puntería.
Vencer la tentación de dormir hasta tarde los sábados es difícil, aún más cuando llueve a cántaros. Sin embargo, allí estaban firmes en su puesto los reservistas de esta Compañía que depende orgánicamente del Comando de Operaciones Terrestres. Con su asiento en la Guarnición Militar de Campo de Mayo, en el Grupo de Artillería 1, la característica más distintiva de este elemento es que está totalmente integrado por personal superior y subalterno de la reserva del Ejército Argentino fuera de servicio. De alguna manera, servirá como modelo para futuras compañías que, de acuerdo a la nueva normativa, se están implementando en todo el país.
Primero lo primero: la formación y el saludo, ejecutados por el jefe de la Compañía, el Capitán
Vicente Ventura, quien fuera de los cuarteles es abogado. “Además de las responsabilidades propias que tiene cualquier jefe de compañía, yo debo armonizarlas con las distintas actividades que tienen los reservistas durante la semana. Todos los días estoy en contacto con ellos -comparte el Capitán, de 38 años-. Debo mantenerlos motivados y cohesionados”. El Teniente Primero Héctor Vuoso aporta su perspectiva: “Lo rescatable es la voluntad de todos. Esto es totalmente voluntario. Queremos aportar nuestro granito de arena a la institución. Hay muchas esperanzas puestas en esto”.
La heterogeneidad reina en la Compañía. “Acá tenés de todo -apunta el Presidente de la Unión de Oficiales de Reserva de las Fuerzas Armadas, Teniente Coronel Stafforini-. Hay desde un abogado, un diseñador gráfico, un estudiante de medicina. No tienen estado militar salvo en los horarios de instrucción, desde el momento que ingresa en la unidad militar hasta que se retira”. Pero al vestir el uniforme, son iguales y todos realizan las mismas actividades, sin excepción. Por ejemplo, aquel sábado, se cruzaron a la Escuela de las Armas a realizar una instrucción de tiro con simulador de tiro SIMRA II y a presenciar una clase de didáctica militar, en la cual los reservistas hicieron preguntas e interactuaron.
“Se ha hecho mucho, pero es sólo el principio. Debemos redoblar el esfuerzo -expresa el Presidente de la UNOR y concluye-. Los componentes están. Afortunadamente contamos con hombres y mujeres dispuestos a dar generosamente su tiempo para capacitarse en la defensa de la Nación, se autoimponen esta importante y patriótica misión”.
Fuente: Revista Soldados