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<blockquote data-quote="pabloeldido" data-source="post: 1501083" data-attributes="member: 5377"><p><strong>Pudo ver una oportunidad </strong></p><p></p><p>Todos los expertos vaticinaban una victoria para el S.51 italiano. Los hidroaviones de canoa franceses se retiraron después de las pruebas preliminares, en las que uno de ellos zozobro.</p><p></p><p>Italia y Gran Bretaña quedaron en carrera. A las 16, 06 del sábado 12 de agosto, Henry Biard hizo rodar al Supermarine II sobre la línea de salida y despego sobre la costa en busca del primer pilón. Cuando partió había visto que los tres aparatos italianos se habían situado tras él, y sabia que volarían como un equipo, utilizando tácticas de bloqueo si podían.</p><p></p><p>Biard mantuvo el motor a pleno rendimiento, volando a la máxima velocidad desde el principio y probando la capacidad y velocidad de los italianos. Cuando aparecía cada pilón de la primera manga, alabeaba rápida y acusadamente, arañando centímetros para cerrar al máximo los virajes.</p><p></p><p>Antes de que Biard hubiera terminado su primer circuito, el M.7 y el M.17 estaban en el aire, pero sus tiempos de manga estaban muy por debajo del de Biard. El Supermarine había vencido a los italianos, que quedaban tras sus talones con su marca de 150 millas por hora en la primera vuelta. El S.51 seguía en persecución.</p><p></p><p>Los italianos, según el plan, se agrupaban muy juntos delante del avión británico, especialmente en los virajes. Biard se acercaba a ellos en las rectas, pero no los podía sobrepasar debido a sus tácticas de bloqueo en los giros. Intentar hacerles un exterior podría representar la pérdida de demasiado tiempo. En uno de los virajes, pensó que tenia una oportunidad. Había aparecido un hueco, y Biard dio gases fondo y se dirigió hacia él. Sin embargo, los italianos se percataron de la maniobra y cerraron el hueco.</p><p></p><p><strong>Gases a fondo.</strong></p><p></p><p>Ahora pensaba que no había otra alternativa que fuera la de volar muy cerca detrás de los italianos y rebasarles por arriba. Se acercó estratégicamente a los tres hidroaviones italianos hasta que se sintió sacudido y golpeado por el calor de los escapes y el rebufo de las hélices de éstos. Entonces dio gases a fondo y tiró de la palanca de mando.</p><p></p><p>Cuando niveló encima de los hidroaviones italianos, vio cómo sus asombrados pilotos levantaban la cabeza, mirándole. Los italianos se abrieron e intentaron cortarle el paso de nuevo. Biard estaba picando hacia el siguiente pilón, a una milla de distancia. Temeroso de causar un terrible accidente si golpeaba con su estabilizador a uno de los italianos, picó violentamente hacia el pilón preguntándose si las alas del Sea Lion podrían soportar la enorme tensión. Por entonces, el globo blanco se hallaba por debajo de él, a la izquierda. Precipitó el aeroplano sobre el punto de la virada como si fuera un caza. Ahora, los italianos tenían que soportar la turbulencia del rebufo de su hélice.</p><p></p><p>Biard se mantuvo a la máxima velocidad durante siete mangas, pero los tiempos de S.51 se le iban acercando. Biard tuvo miedo de fatigar demasiado su motor y comenzó a suavizar el régimen. El S.51 continuó arañando tiempos, registrando mangas mas rápidas que las del Supermarine. Sin embargo, al final ganó Biard por sólo dos minutos.</p><p></p><p>La séptima carrera Schneider, que se celebro en 1923, anuncio una era totalmente nueva en el desarrollo aeronáutico y en las competiciones.</p><p></p><p>Estados Unidos volvió a las lista de la competición internacional. La rivalidad entre los servicios aéreos de la armada y el ejército, y la instauración del trofeo Pulitzer, una nueva carrera internacional de velocidad con sustancioso premios, estimularon nuevos diseños y la competitividad entre los propios constructores aeronáuticos y pilotos.</p><p></p><p>La curtiss Aeroplane and Motor company apareció con un rápido biplano de carreras dotado de un motor ligero y refrigerado por agua. Denominado CR-3, el curtiss tenía radiadores alares de superficie y hélice metálica. Hubo dos en el debut norteamericano en la carrera Schneider, junto con un nuevo avión de carreras de ala Armada, el Wright NW-2.</p><p></p><p><strong>Fuerte como un potro </strong></p><p></p><p><img src="https://imagizer.imageshack.us/v2/464x226q90/32/shoz.png" alt="" class="fr-fic fr-dii fr-draggable " style="" /> </p><p>Supermarine Sea Lion III</p><p></p><p>Cuando países se inscribieron para la competición. Aparte del equipo norteamericano y sus pilotos de prueba navales escogidos, estaban los franceses con un par de hidroaviones CAMS para tiempo estable, más dos lentos hidroaviones Latham L1 para mal tiempo. Los italianos se retiraron en el último momento por falta de financiación. Las multitudes británicas tenían sus esperanzas puestas principalmente en su Supermarine Sea Lion III. Los otros dos participantes británicos eran anticuado Sopwith Hawker, que tuvo que retirarse poco antes de la carrera; y un Blackburn Pellet, un pequeño hidroavión monoplaza de caza que llevaba el ultimo motor Napier Lion.</p><p></p><p>A falta de cuatro días, el motor del norteamericano Wright NW-2 explosiono en la cara del piloto a unas 220 millas por hora.</p><p></p><p><strong>FIN de la segunda parte.</strong></p></blockquote><p></p>
[QUOTE="pabloeldido, post: 1501083, member: 5377"] [B]Pudo ver una oportunidad [/B] Todos los expertos vaticinaban una victoria para el S.51 italiano. Los hidroaviones de canoa franceses se retiraron después de las pruebas preliminares, en las que uno de ellos zozobro. Italia y Gran Bretaña quedaron en carrera. A las 16, 06 del sábado 12 de agosto, Henry Biard hizo rodar al Supermarine II sobre la línea de salida y despego sobre la costa en busca del primer pilón. Cuando partió había visto que los tres aparatos italianos se habían situado tras él, y sabia que volarían como un equipo, utilizando tácticas de bloqueo si podían. Biard mantuvo el motor a pleno rendimiento, volando a la máxima velocidad desde el principio y probando la capacidad y velocidad de los italianos. Cuando aparecía cada pilón de la primera manga, alabeaba rápida y acusadamente, arañando centímetros para cerrar al máximo los virajes. Antes de que Biard hubiera terminado su primer circuito, el M.7 y el M.17 estaban en el aire, pero sus tiempos de manga estaban muy por debajo del de Biard. El Supermarine había vencido a los italianos, que quedaban tras sus talones con su marca de 150 millas por hora en la primera vuelta. El S.51 seguía en persecución. Los italianos, según el plan, se agrupaban muy juntos delante del avión británico, especialmente en los virajes. Biard se acercaba a ellos en las rectas, pero no los podía sobrepasar debido a sus tácticas de bloqueo en los giros. Intentar hacerles un exterior podría representar la pérdida de demasiado tiempo. En uno de los virajes, pensó que tenia una oportunidad. Había aparecido un hueco, y Biard dio gases fondo y se dirigió hacia él. Sin embargo, los italianos se percataron de la maniobra y cerraron el hueco. [B]Gases a fondo.[/B] Ahora pensaba que no había otra alternativa que fuera la de volar muy cerca detrás de los italianos y rebasarles por arriba. Se acercó estratégicamente a los tres hidroaviones italianos hasta que se sintió sacudido y golpeado por el calor de los escapes y el rebufo de las hélices de éstos. Entonces dio gases a fondo y tiró de la palanca de mando. Cuando niveló encima de los hidroaviones italianos, vio cómo sus asombrados pilotos levantaban la cabeza, mirándole. Los italianos se abrieron e intentaron cortarle el paso de nuevo. Biard estaba picando hacia el siguiente pilón, a una milla de distancia. Temeroso de causar un terrible accidente si golpeaba con su estabilizador a uno de los italianos, picó violentamente hacia el pilón preguntándose si las alas del Sea Lion podrían soportar la enorme tensión. Por entonces, el globo blanco se hallaba por debajo de él, a la izquierda. Precipitó el aeroplano sobre el punto de la virada como si fuera un caza. Ahora, los italianos tenían que soportar la turbulencia del rebufo de su hélice. Biard se mantuvo a la máxima velocidad durante siete mangas, pero los tiempos de S.51 se le iban acercando. Biard tuvo miedo de fatigar demasiado su motor y comenzó a suavizar el régimen. El S.51 continuó arañando tiempos, registrando mangas mas rápidas que las del Supermarine. Sin embargo, al final ganó Biard por sólo dos minutos. La séptima carrera Schneider, que se celebro en 1923, anuncio una era totalmente nueva en el desarrollo aeronáutico y en las competiciones. Estados Unidos volvió a las lista de la competición internacional. La rivalidad entre los servicios aéreos de la armada y el ejército, y la instauración del trofeo Pulitzer, una nueva carrera internacional de velocidad con sustancioso premios, estimularon nuevos diseños y la competitividad entre los propios constructores aeronáuticos y pilotos. La curtiss Aeroplane and Motor company apareció con un rápido biplano de carreras dotado de un motor ligero y refrigerado por agua. Denominado CR-3, el curtiss tenía radiadores alares de superficie y hélice metálica. Hubo dos en el debut norteamericano en la carrera Schneider, junto con un nuevo avión de carreras de ala Armada, el Wright NW-2. [B]Fuerte como un potro [/B] [IMG]https://imagizer.imageshack.us/v2/464x226q90/32/shoz.png[/IMG] [B] [/B]Supermarine Sea Lion III[B][/B] Cuando países se inscribieron para la competición. Aparte del equipo norteamericano y sus pilotos de prueba navales escogidos, estaban los franceses con un par de hidroaviones CAMS para tiempo estable, más dos lentos hidroaviones Latham L1 para mal tiempo. Los italianos se retiraron en el último momento por falta de financiación. Las multitudes británicas tenían sus esperanzas puestas principalmente en su Supermarine Sea Lion III. Los otros dos participantes británicos eran anticuado Sopwith Hawker, que tuvo que retirarse poco antes de la carrera; y un Blackburn Pellet, un pequeño hidroavión monoplaza de caza que llevaba el ultimo motor Napier Lion. A falta de cuatro días, el motor del norteamericano Wright NW-2 explosiono en la cara del piloto a unas 220 millas por hora. [B]FIN de la segunda parte.[/B] [/QUOTE]
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